Tanques israelíes bombardean los distritos hospitalarios de Jan Yunis, en Gaza

Familiares del palestino Abdulraheem al-Saloot, que murió de una enfermedad cardiaca y no recibió el tratamiento que necesitaba debido al empeoramiento de las condiciones de salud en el hospital Nasser, según su familia, lloran en el hospital al-Najjar

Por Fadi Shana, Nidal al-Mughrabi y Dan Williams

25 ene (Reuters) - Las fuerzas israelíes bombardearon sin descanso el jueves las zonas próximas a dos hospitales de Jan Yunis, la principal ciudad del sur de Gaza, inmovilizando a un gran número de desplazados, según los residentes, en una ofensiva para tomar el principal bastión de Hamás en el sur del enclave.

Las autoridades sanitarias de Gaza dijeron que al menos 50 palestinos habían muerto en Jan Yunis en las últimas 24 horas, entre ellos dos niños en un ataque aéreo israelí que alcanzó una vivienda residencial.

La ciudad está ahora rodeada por fuerzas blindadas israelíes y bajo fuego aéreo y terrestre casi ininterrumpido, según los residentes.

De acuerdo con los médicos palestinos, los tanques israelíes han cortado el paso y bombardean objetivos en torno a los dos principales hospitales de la ciudad, Nasser y al-Amal, que aún funcionan, atrapando a los equipos médicos, los pacientes y los desplazados que se refugian en su interior o en las inmediaciones.

La mayor parte de los 2,3 millones de habitantes de la Franja de Gaza se concentra ahora en Jan Yunis y en las ciudades situadas al norte y al sur, tras haber sido expulsados de la mitad norte en el bombardeo israelí del territorio gobernado por Hamás, que ya ha cumplido cuatro meses.

El asedio de las fuerzas israelíes a los principales hospitales de Jan Yunis, que Israel afirma que la milicia Hamás utiliza como base para sus atentados —algo que el grupo islamista y el personal de los hospitales niegan—, ha hecho prácticamente imposible que los equipos de rescate lleguen hasta los heridos y los muertos.

El avance de las fuerzas israelíes obligó a muchos desplazados a salir de nuevo en busca de refugios seguros, cada vez más escasos, según médicos y residentes.

Los residentes habían denunciado el miércoles que los anuncios israelíes advirtiéndoles de que abandonaran las zonas en la línea de fuego solo llegaron cuando la operación ya estaba en marcha y la principal carretera de salida de Jan Yunis ya estaba cerrada.

El miércoles, las Naciones Unidas afirmaron que los tanques israelíes habían atacado un gran complejo de la ONU en Gaza que albergaba a palestinos desplazados, matando al menos a nueve personas e hiriendo a 75. Pero Israel negó que sus fuerzas fueran responsables, sugiriendo que Hamás podría haber lanzado el bombardeo, y afirmó que estaba estudiando el incidente.

Israel dijo que Hamás tenía "centros de mando y control, puestos avanzados y cuarteles generales de seguridad" en las inmediaciones, que describió como "una zona densa" con civiles, así como las instalaciones de varios hospitales donde, según dijo, había combatientes activos.

Según las autoridades sanitarias palestinas, al menos 25.700 personas han muerto en Gaza, uno de los lugares más densamente poblados y empobrecidos del mundo, con grandes extensiones del enclave, densamente edificado, arrasadas por los bombardeos israelíes.

Israel desató su guerra para erradicar a Hamás después de que el 7 de octubre milicianos de Hamás asaltaran la valla fronteriza desencadenando una impactante incursión en ciudades y bases israelíes cercanas, matando a 1.200 personas y secuestrando a unos 240 rehenes, según el recuento israelí.

PELIGRA LA VIDA DE 1,5 MILLONES DE PERSONAS

El Comité Internacional de la Cruz Roja declaró que menos del 20% del estrecho enclave costero —unos 60 km2— es ahora refugio de más de 1,5 millones de personas en el sur, "donde la dramática escalada de los combates pone en peligro su supervivencia".

"Todos los hospitales de la Franja de Gaza están abarrotados y escasean los suministros médicos, el combustible, los alimentos y el agua. Muchos albergan a miles de familias desplazadas. Y ahora dos instalaciones más (en Jan Yunis) corren el riesgo de perderse debido a los combates. El impacto acumulativo en el sistema sanitario es devastador y deben tomarse medidas urgentes", declaró el CICR en un comunicado.

Thomas White, director de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos en Gaza, deploró el jueves las operaciones militares de Israel en barrios repletos de civiles vulnerables.

"Los intensos combates cerca de los hospitales que quedan en Jan Yunis, incluidos Nasser y al-Amal, han rodeado en la práctica estas instalaciones, dejando al personal aterrorizado, a los pacientes y a los desplazados atrapados en su interior", dijo en un comunicado.

"El hospital al-Khair ha cerrado después de que los pacientes, incluidas mujeres que acababan de someterse a operaciones de cesárea, fueran evacuados en mitad de la noche".

En el norte de Gaza, los residentes dijeron que se habían quedado casi completamente sin alimentos, especialmente harina, y han estado triturando el pienso del ganado para reponerlo.

El ejército israelí dijo el jueves que había matado a más de 9.000 milicianos de Hamás y perdido 220 soldados en la guerra en 3 meses y medio. Reuters no pudo verificar las cifras.

En su última actualización, el ejército israelí dijo que las fuerzas habían llevado a cabo incursiones selectivas con ataques aéreos de precisión y francotiradores para acabar con múltiples centros de mando de Hamás y emplazamientos de milicianos en Jan Yunis, incluido el distrito de al-Amal.

"En combates cuerpo a cuerpo, los soldados eliminaron a los terroristas, y en el proceso se descubrieron varias armas", afirmó en un comunicado.

Las fuerzas israelíes también asaltaron varios complejos de milicianos en el centro y el norte de Gaza, y en uno de los casos recurrieron a un helicóptero de combate para atacar y matar a los combatientes que se encontraban en su interior, añade el comunicado.

El conflicto de Gaza amenaza con desestabilizar Oriente Próximo, avivando hostilidades que van desde Cisjordania, ocupada por Israel, hasta la región fronteriza entre Israel y Líbano, Siria, Irak y las rutas marítimas del mar Rojo, cruciales para el comercio internacional.

En Cisjordania, el Ministerio de Sanidad palestino, que ejerce allí un autogobierno limitado, dijo que al menos 370 personas habían muerto en incursiones o enfrentamientos del ejército israelí desde el 7 de octubre.

El jueves, las autoridades sanitarias dijeron que las fuerzas israelíes mataron a tiros a un palestino de 24 años en un pueblo cercano a Yenín después de que los soldados rodearan la casa de la familia del hombre y se produjera un tiroteo, según la familia del fallecido.

En el mar Rojo, las fuerzas hutíes de Yemen, alineadas con Irán, llevan desde noviembre atacando buques en declarada solidaridad con los palestinos frente a la embestida israelí en Gaza.

En el último incidente en el mar Rojo, Maersk declaró que unas explosiones cercanas obligaron a dar la vuelta a dos buques operados por su filial estadounidense y que transportaban suministros militares estadounidenses cuando transitaban por el estrecho de Mandeb, frente a Yemen, acompañados por la Marina estadounidense.

(Información de Nidal al-Mughrabi en Doha, Fadi Shana en Gaza, Dan Williams en Jerusalén, Jonathan Saul en Londres; redactado por Mark Heinrich; editado por Sharon Singleton; editado en español por Javi West Larrañaga)