Soy el mejor y estoy aquí para demostrarlo. El Alfa de Cuba envía reto a todos en su división

Dos peleas, dos nocauts. Hasta el momento, el cubano Kevin Brown ha validado todas las expectativas puestas en él desde el momento en que abandonara una delegación de su país para probar fortuna en el boxeo profesional junto con decenas de compatriotas.

Brown (2-0, 2 KO) derrotó el pasado sábado a Adriano Porfirio Ramírez (12-5, 7 KO) por la vía rápida en el sexto asalto en el Caribe Royale Resort de Orlando, Florida, en una cartelera promovida por Boxlab Promotions, empresa que le ha dado abrigo y actividad a varios cubanos.

“Estoy emocionado de mostrar mis habilidades y mi poder de golpeo al mundo’’, expresó Brown, quien es manejado por Jesse Rodríguez.

“Estados Unidos es la tierra de las oportunidades y tengo la suerte de tener ahora mi oportunidad de alcanzar la gloria. Estoy preparado para los mejores del mundo. No necesito que me construyan. He sido construido a través de mis peleas internacionales. Mi momento es ahora’’.

El antillano, quien disputó su primer combate programado a 10 asaltos en tan solo su segunda pelea profesional, fue ganando cada minuto de cada asalto hasta el momento de detener a Ramírez a los 2:34 minutos del sexto round para conquistar su primera faja regional: un título Fedecentro de la Asociación Mundial del Boxeo.

Al igual que su compatriota David Morrell (7-0, 6 KO) que pelea el 5 de noviembre en Minneápolis y es campeón supermediano de la AMB, Brown está en la vía rápida hacia un título mundial.

Su empresa Warriors espera colocarlo pronto en un combate de 12 asaltos para su próxima pelea contra un contendiente de primera línea que habrá de acercarlo cada vez más a esa meta en las 140 libras, donde se encuentran figuras importantes como Gervonta Davis, Ryan García, Teófimo López y Regis Progreis, entre otros.

“Tengo un muy buen pedigrí y luché contra los mejores púgiles del mundo como aficionado’’, señaló Brown, quien entrena en Las Vegas con Bob Santos.

“Estoy listo para saltar ahora mismo con cualquiera en la división de peso ligero o superligero. Ya sea Michel Rivera, Gervonta Davis, Isaac Cruz, lo que sea, pelearé con ellos. Creo que soy el mejor y estoy aquí para demostrarlo. Tengo 28 años, no quiero perder el tiempo, quiero lanzarme ya’’.

Brown, uno de los mejores boxeadores aficionados del mundo, ganó el campeonato nacional de Cuba en 2019 y derrotó al legendario Roniel Iglesais en la final. Tras escapar de una selección de su país a principios de 2022, llegó a Estados Unidos por la oportunidad de convertirse en campeón mundial.

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Campeón mundial juvenil en Ereván, Armenia, en 2012, el camagüeyano Brown se fugó antes de que iniciara en un torneo celebrado a principios del 2022 en Ecuador durante una escala en Panamá y luego firmó un contrato promocional con Warriors Boxing.

“Kevin Brown tiene todas las herramientas para convertirse en un campeón del mundo’’, declaró Santos, entrenador de Brown.

“Su poder de pegada está en otro nivel. Ha visto todos los estilos posibles y fue una estrella internacional en el equipo nacional cubano. Llevo mucho tiempo en este deporte y creo que Kevin Brown puede convertirse en uno de los grandes púgiles de Cuba’’.