Si al morder una fruta sientes un cosquilleo en la boca, puede que padezcas este síndrome

Algunas personas notan una especie de cosquilleo cada vez que se llevan a la boca una determinada fruta. Muchos no le dan importancia, pero puede ser el primer síntoma de un trastorno denominado ‘síndrome de alergia oral’, una alergia que puede aparecer de la noche a la mañana y que consiste, además de ese cosquilleo, en un enrojecimiento de labios, boca o garganta.

Este fenómeno suele ocurrir al consumir frutas como las manzanas, los plátanos, los kiwis, las sandías, los melocotones, las naranjas o las peras, entre otras. Lo mismo puede pasar con verduras y hortalizas como los pepinos, las zanahorias o los tomates. Y algunos pueden experimentarlo con frutos secos como las almendras o las nueces.

Las manzanas crudas pueden desencadenar la reacción alérgica (Unsplash/Holly Mindrup)
Las manzanas crudas pueden desencadenar la reacción alérgica (Unsplash/Holly Mindrup)

El síndrome de alergia oral solo suele afectar a la boca y la garganta. Pero, en contadas ocasiones, la reacción alérgica también afecta a otras partes del cuerpo o causa problemas más graves, como dificultades para respirar.

La aparición de este trastorno suele coincidir con la primavera y el otoño. Al igual que hay personas que empiezan a sufrir una alergia al polen de manera inesperada, los que sufren el síndrome de alergia oral pueden padecerlo de forma repentina, aunque toda la vida hayan podido comer ese alimento que ahora les produce molestias.

El origen de esta alergia está en algunas proteínas que contienen las frutas que pueden desencadenar una reacción exagerada por parte de nuestro sistema inmunitario. Es habitual que las personas que ya padezcan alergia al polen desarrollen el síndrome de alergia oral, por sus defensas actuarán de la misma forma que ante esa sustancia.

Los que sufren este problema no tienen por qué dejar de consumir las frutas que les provocan la desagradable reacción. Muchas veces pueden consumirlas si las cocinan o si las pelan. Por ejemplo, sí pueden tomar tarta de manzana o un postre elaborado con plátano. Esto ocurre porque al cocinar estos alimentos las proteínas que generan la reacción alérgica se degradan y sus restos no son interpretados como una amenaza por el cuerpo.

Ante cualquier síntoma, lo más recomendable es acudir a un médico especialista y escuchar atentamente sus consejos.