"Siempre serás mi policía favorito": familiares de uniformados
CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 16 (EL UNIVERSAL).- Más de 2 mil elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desfilaron este domingo por el Día del Policía y muchos de los espectadores eran sus hijos, esposas y padres, quienes, aunque los apoyan en su trabajo, aseguraron sentir preocupación por la labor que desempeñan todos los días.
"Sí vives pensando en si algo sale mal, o en la mañana cuando se va no sabes si va a regresar", dijo Guillermina Castro, esposa de un policía, quien dijo que lo conoció tres meses después de que él salió de la academia. Aseguró que su pareja ha estado en operativos "donde agarran pues a delincuentes y no sabes lo que puede pasar. Tenemos un hijo y te pones a pensar en si algo le pasa". Cuando empezó al desfile ella y su hijo mostraron su orgullo.
El Desfile del Día del Policía se realizó sobre avenida Juárez, de Eje Central a Paseo de la Reforma, pero se concentró en el Hemiciclo a Juárez donde estaban las autoridades, pero principalmente eran vitoreados por sus familiares. "Siempre serás mi orgullo, Mi policía Favorito. Te amo", era la leyenda de una de las pancartas.
A pie y a bordo de más de 100 vehículos oficiales, integrantes de las diversas corporaciones de la SSC desfilaron junto con elementos del Ejército, Marina, Guardia Nacional, del Heroico Cuerpo de Bomberos y de la Fiscalía General de Justicia local,
La hija de Florencio Reyero también forma parte de la SSC, en la división Atenea, y aseguró que su hija, con cuatro años en la institución, ya ha recibido golpes en las marchas y mítines. "Para mí como papá es muy difícil, pero es lo que siempre le ha gustado y no hay de otra más que apoyarla en sus sueños. Es su trabajo y su decisión", dijo.
Mientras le acomodaba la boina a su hija, Isabel Guerrero, madre de una mujer que trabaja en la policía cibernética, señaló que este elemento, aunque sentada detrás de una computadora, también corre riesgos.
En cuanto su hija comenzó a desfilar, la mujer aceleró el paso para acompañarla durante el recorrido, tomarle fotos y aplaudirle.
Mientras elementos del ERUM, de la Policía Cibernética o de la Bancaria e Industrial, desfilaban, el ruido de los motores de los ocho helicópteros que sobrevolaron la Alameda Central desvió un momento la atención de los familiares que tras unos segundos volvieron la mirada a sus hijos, hijas, esposos y padres o madres.