Senegal corta Internet en medio de una creciente represión de la disidencia

FOTO ARCHIVO: El Presidente de Senegal, Macky Sall

Por Ngouda Dione

DAKAR, 13 feb (Reuters) - Senegal cortó el martes el acceso al Internet móvil antes de una marcha contra el aplazamiento de las elecciones presidenciales, y grupos de derechos humanos acusaron a las autoridades de utilizar tácticas excesivamente represivas para sofocar la oposición generalizada a la decisión.

El abrupto aplazamiento de las elecciones del 25 de febrero a diciembre ha sumido a Senegal en una crisis y ha intensificado la reacción contra lo que muchos consideran un intento de prorrogar el mandato del presidente Macky Sall y una amenaza para una de las democracias que quedan en África Occidental, asolada por los golpes de Estado.

Tras los enfrentamientos entre manifestantes y la policía a finales de la semana pasada, el gobierno se negó a permitir una marcha silenciosa organizada por grupos de activistas para el martes y ordenó a los operadores de telefonía móvil que suspendieran el acceso a Internet.

El Ministerio de Comunicaciones dijo que la suspensión era necesaria porque los mensajes de odio y subversivos en línea habían provocado los disturbios anteriores.

El monitor de Internet Netblocks declaró: "El incidente pone de relieve el creciente uso de la censura masiva en el país".

Tres personas murieron y, según informes, unas 270 fueron detenidas durante las protestas que se extendieron por la capital, Dakar, y otras ciudades senegalesas el viernes y el sábado.

Los organizadores de la marcha del martes dijeron que ahora se celebraría el sábado y llamaron a la población de todo el país a participar en ella.

Sall ha dicho que el retraso de las elecciones era necesario porque las disputas electorales amenazaban la credibilidad de la votación, pero algunos legisladores de la oposición y grupos de la sociedad civil lo han denunciado como un "golpe institucional".

(Reporte adicional de Bate Felix, Emma Farge y Portia Crowe, escrito por Anait Miridzhanian y Alessandra Prentice.; Editado en español por Javier Leira)