Sandra Cuevas y Alejandra Barrales, los 'rostros jóvenes" que destaparon al verdadero Movimiento Ciudadano
En México, los partidos políticos plantean durante las campañas sus propuestas ideológicas, que permean cada vez menos en los ciudadanos debido a la pérdida de credibilidad de estos organismos, fenómeno que se manifiesta en todo el mundo.
A la pérdida de credibilidad se agrega el “oportunismo” de los políticos que “saltan” de un partido. Cuidan sus intereses particulares antes que las propuestas ideológicas del partido que los adopta. Es práctica frecuente entre los políticos mexicanos. En medio del proceso electoral actual, sin recato se abren paso en opciones diferentes a su origen.
Llama la atención el caso de Movimiento Ciudadano (MC) que se presenta ante el electorado como una opción diferente, una alternativa ante la vieja política y en su discurso actual, en el marco de la sucesión presidencial, dice que es un partido con propuestas jóvenes, frente a las viejas políticas del pasado.
Las afirmaciones planteadas en su discurso no corresponden a su realidad interna, encabezada por Dante Delgado, un político que impone viejas prácticas al adoptar determinaciones que lo alejan de sus dichos.
La última decisión de Dante Delgado fue registrar como candidatas de MC al Senado a Alejandra Barrales, que antes fue legisladora, dirigente del PRD, aspirante a la jefatura de gobierno de la CDMX y ausente de la política por cinco años; así como a Sandra Cuevas, hoy alcaldesa en Cuauhtémoc y hasta hace unos meses crítica y adversaria de MC, al que bloqueó propaganda en su demarcación, en defensa del PRI, PAN y PRD.
La decisión de la dirigencia nacional de MC de postular a Alejandra Barrales y Sandra Cuevas fue rechazada por algunos militantes distinguidos del partido, como Rodrigo Cordera, consejero nacional, que manifestaron estar inconformes por el pragmatismo electoral al que responde estas candidaturas. Consideran que, en la designación de Sandra Cuevas, se impuso una visión electoral sobre la ideología progresista del partido.
El consejero nacional ejemplificó su rechazo a Sandra Cuevas, con la política de seguridad que practicó en la alcaldía Cuauhtémoc. Explicó que el tema se debe abordar siempre, desde una visión de derechos humanos y no bajo un manto punitivo, como lo hizo Sandra Cuevas.
“No estoy en contra del orden y progreso, pero claramente no estoy a favor de darle coscorrones a ciudadanos qué es lo que ella hizo hace poco con su policía”.
La candidata suplente a una diputación federal por MC, Láurel Miranda, se opuso en redes sociales a la candidatura de Cuevas, calificó la administración en Cuauhtémoc como “un gobierno fascista y de derecha”.
El dirigente nacional de MC Dante Delgado explicó a los inconformes, en un intento de control de daños, el pragmatismo electoral al que responde la candidatura de Sandra Cuevas. Dijo que comparte los valores del partido, es joven y es mujer.
“En primer lugar somos la fuerza electoral abierta a la juventud. Lo segundo, debemos llevar adelante prácticas de buen gobierno, y adicionalmente, la fuerza de las mujeres.”
Al recibir la acreditación como candidata, Sandra Cuevas agradeció “al senador Dante Delgado porque fue el único que me tomó en cuenta como ciudadana, que me tendió la mano y me dio esta oportunidad que no voy a desaprovechar. Yo vine aquí a una sola cosa, a ganar, vamos a ganar porque además tengo el privilegio de contar en esta fórmula con una mujer aguerrida, inteligente, Alejandra Barrales”. (Animal Político, 19 de febrero de 2024)
Por más de dos años MC y su dirigente Dante Delgado, reiteraron su discurso de respeto a la ley, para explicar que no lanzaban candidato a la presidencia. Manifestó que propondría “rostros frescos” cuando presentaran a sus candidatos a puestos de elección popular. Que hicieran la diferencia en la política mexicana.
En los últimos meses de 2023, lanzó la candidatura de Samuel García, gobernador de Nuevo León, que planteó el discurso de realizar una política joven frente a la vieja política. Su fantasía duró unas semanas pues lo alcanzó la necesidad de ocultar las viejas prácticas de la política que practica en su “joven” gobierno. Quedó como un joven con las mañas de la vieja política, como su intento autoritario de pasar por encima del Congreso del estado.
Parece que Dante Delgado tiene problemas en reconocer los “rostros frescos” cuando presenta como candidatas al Senado a Alejandra Barrales y Sandra Cuevas. Ninguna ha dado muestras de portar ideas jóvenes, no proponen novedades que modifiquen la realidad de la política mexicana. Con ellas, la “nueva política” es una asignatura pendiente.
Las dos candidatas son ejemplo de la baja calidad de la política mexicana que recurre a los “viejos conocidos” y cierra las puertas a los “jóvenes por conocer”. Estamos en el momento en el que los dirigentes de los partidos “venden” en el mercado puestos de elección popular. El viejo dirigente de MC engaña con el discurso de lo nuevo contra lo viejo. En política lo nuevo no es un asunto cronológico, es un tema de propuestas creativas que empujen a la sociedad hacia un mejor futuro. En la realidad existen jóvenes viejos y viejos jóvenes.