San Lorenzo no puede ganar en la Liga Profesional ni cuando está 1-0: perdió con Unión, uno de los líderes, en Santa Fe

Braida, Ferreira y Cuello, el símbolo de la frustración en San Lorenzo, que arrancó ganando pero al final perdió con Unión por 2-1, en Santa Fe
Braida, Ferreira y Cuello, el símbolo de la frustración en San Lorenzo, que arrancó ganando pero al final perdió con Unión por 2-1, en Santa Fe - Créditos: @Fotobaires

A San Lorenzo le tocaba despedir el semestre en el escenario complejo del 15 de Abril, donde lo esperaba un hambriento Unión que anhelaba irse a descansar sabiéndose puntero de la Liga Profesional. Muchos eran los desafíos para el conjunto dirigido por Leandro Romagnoli, hombre que esperaba el receso con ansias, pero para seguir trabajando: cómo afrontar lo que vendrá, con los octavos de final de la Copa Libertadores por delante, es uno de los pensamientos que ya mismo tiene el entrenador. Era una prueba importante que ponía la escala de tranquilidad también como centro. En ese sentido, el golpe fue fuerte y la preocupación es más grande: ganaba, pero especuló en el segundo tiempo, lo padeció y se lo dieron vuelta sobre el final, en un lapso de cuatro minutos.

San Lorenzo sigue sin ganar en la Liga Profesional. Y tampoco lo pudo hacer este sábado ni siquiera luego de ponerse 1-0. Contra Riestra (1° fecha) y Sarmiento de Junín (4°) no hizo tantos y frente a Lanús (2°) y Godoy Cruz (en el partido suspendido por la 3° fecha) lo convirtió para empatar. Hasta ahora acumula tres derrotas y un empate, además del 1-1 suspendido ante el Tomba.

Braida, de San Lorenzo, marca a Federico Vera, de Unión
Braida, de San Lorenzo, marca a Federico Vera, de Unión - Créditos: @Fotobaires

Era un duelo cruzado entre las realidades de cada uno. La inestabilidad del “Ciclón” se contrastaba con la firmeza “Tatengue”: mientras el visitante llegó sin conocer el triunfo en el torneo, ubicado entre los tres últimos de la tabla y convirtiendo apenas dos goles en tres partidos y medio (Lanús y Godoy Cruz, con el que debe el segundo tiempo del 1-1 tras la suspensión), al local le urgían las tres unidades para sumarse a Talleres, de Córdoba, entre los punteros por no conocer la derrota y buscaba mantener el bajo número de goles recibidos (sólo le había anotado Instituto).

¿Más? Los santafesinos habían caído en condición de local en uno de los últimos siete compromisos, todo un desafío para San Lorenzo, que no había salido victorioso fuera de Boedo en todo el año, obteniendo siete empates y dos derrotas.

Esas fueron las cartas de presentación de ambos en el arranque del encuentro. Uno decidido, con el objetivo claro; otro, protegido, consciente de la avalancha de energía que lo invadiría en ese tramo inicial. Sin embargo, eso que parecía peligroso, terminó siendo tan fuerte como una caricia. Tres minutos de un Unión enérgico, que tuvo el derechazo cruzado de Franco Pardo como su único aviso del primer tiempo, fueron los que pasaron hasta que los de camiseta azulgrana comenzaron a equiparar el trámite. Sin embargo, aquel momento efímero sería un thriller de la película completa. Una de mucho pochoclo.

Duelo de entrenadores en Unión vs. San Lorenzo: Leandro Romagnoli y, de fondo, el Kily González
Duelo de entrenadores en Unión vs. San Lorenzo: Leandro Romagnoli y, de fondo, el Kily González - Créditos: @Fotobaires

Entre imprecisiones e infracciones, terminaron siendo más las amonestaciones (especialmente en el equipo de “Kily” González) que las oportunidades de gol. Se empezó a jugar un encuentro entretenido en su intensidad y disputa, pero consecuentemente se acható el desarrollo. Parecía que no pasaría nada, hasta que a los 35 minutos San Lorenzo hilvanó más de cinco toques rápidos (toda una novedad en ambos conjuntos) y encontró la diagonal de Cristian Tarragona, que asistió a Alexis Cuello para una definición fácil.

Todo lo que se esperaba y terminaron debiendo en los primeros 45 minutos, más allá de la ventaja azulgrana, lo devolvieron en el complemento. En realidad, hablar en plural tiene un tinte falso. Es cierto, sobraron las emociones, la tensión y las llegadas al arco, pero es una parte de la historia: San Lorenzo salió con la misma postura escasa de ambición, intentando que el partido se planche; Unión, en cambio, con una voracidad mayor a aquellos tres minutos iniciales y se otorgó constancia en esa búsqueda rabiosa.

Lo mejor del partido

El “Tatengue” lo abrumó y le desnudó todo aquello que rondará en la cabeza de “Pipi”. Facundo Altamirano pasó de ser un espectador a tener que poner las manos a cada rato. Porque a San Lorenzo le spoilearon el final mientras le leían el cuento, pero quedó dormitando. La doble atajada contra Pardo y el gol bien anulado a Gonzalo Morales por VAR al minuto de haber ingresado (junto a Lautaro Vargas, Lucas Gamba y Simón Rivero refrescaron al local) eran anuncios.

El intento del DT del “Ciclón” por sumar un volante más (con Francisco Perruzzi), en cambio, lo retrasaron más. Los múltiples cabezazos de Nicolás Orsini, que encontraron el travesaño y la respuesta de Altamirano con un minuto de diferencia, tampoco le hicieron sonar la alarma. Hasta que Unión acertó. En el momento ideal y con el gancho rápido y certero para dejar a San Lorenzo sin respuestas: Pardo tuvo aroma a gol toda la tarde y lo encontró a los 33, mientras que el “Toro” Morales encontró otro rebote y el arco servido para la explosión del 2-1.

Mauro Pittón, volante de Unión, ante Luján, defensor de San Lorenzo
Mauro Pittón, volante de Unión, ante Luján, defensor de San Lorenzo - Créditos: @Fotobaires

En la desesperación, despertó con un remate de Nahuel Barrios, pero ya era tarde. “Tenemos que incorporar, ya lo saben los dirigentes”, aseguró un Romagnoli con cara de pocos amigos. No es para menos: Unión se fue a descansar puntero, mientras que Atlético Mineiro -de Brasil- mira cómo su futuro rival San Lorenzo sigue en el fondo, sin ganar y sumando tropiezos.