Los salvadoreños conmemoran los 44 años del asesinato de Romero entre palmas del Domingo de Ramos

San Salvador, 24 mar (EFE).- Los feligreses salvadoreños conmemoraron el 44 aniversario del magnicidio de monseñor Óscar Arnulfo Romero, santo de la Iglesia católica asesinado en 1980 por un francotirador de la extremaderecha, entre las procesiones y misas del Domingo de Ramos.

"En muchas iglesias está entronizada la imagen de monseñor Romero, y hoy también haremos un recuerdo durante la misa de este martirio, que fue sangre con la que se sembró la fe de este pueblo", dijo a EFE el sacerdote de la parroquia Santa Lucía, en la central localidad de Suchitoto, Fabio Márquez.

Indicó que, a pesar de que la Arquidiocesis de San Salvador inició la conmemoración del magnidicio de Romero, conocido como "el santo de América" el pasado viernes, su legado fue recordado en esta celebración.

Agregó que con el Domingo de Ramos, que recuerda al pasaje bíblico de la entrada de Jesús a Jerusalén, se inicia la Semana Santa, en la que "celebramos su pasión, muerte y resurrección".

En Suchitoto, al igual que cientos de templos salvadoreños, se realizó un procesión por el casco urbano de la localidad con unas 200 personas acompañando a la imagen de Jesús subida en un burro. Posteriormente, los sacerdotes bendijeron las palmas y celebraron misas.

En San Salvador, decenas de feligreses se acercaron también este domingo a la capilla en la que Romero fue asesinado para recordar sus mensajes y obras, incluidos familiares de personas detenidas bajo el régimen de excepción vigente en el país que defienden la inocencia de cientos de detenidos.

Por su parte, la Fundación para el Debido Proceso recordó en sus redes sociales que cada 24 de marzo se conmemora el Día Internacional del Derecho a la Verdad.

"Conmemoramos el asesinato de monseñor Óscar Romero recordando su legado de no violencia y solidaridad con las personas más desfavorecidas, y honramos a quienes trabajan por justicia y verdad en contextos de riesgo", indicó.

San Romero fue asesinado a las puertas de la guerra civil por un escuadrón de la muerte de ultraderecha en una capilla del pequeño hospital para enfermos con cáncer La Divina Providencia, en San Salvador.

Conocido como 'La voz de los sin voz', Romero se pronunciaba contra la violencia y las violaciones a los derechos humanos en los años previos a la guerra civil, con lo que se erigió en un referente en la defensa de los más vulnerables.

El Informe de la Comisión de la Verdad de la ONU de 1993 señaló como el responsable de dar la orden de asesinar a Romero al mayor Roberto D'Aubuisson, fundador de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena), partido del que fue diputado y candidato presidencial.

Dicho documento también apunta que en la planificación y ejecución del asesinato participaron los capitanes Álvaro Saravia y Eduardo Ávila, así como Fernando Sagrera y Mario Molina, entre otros.

La anulación de una ley de amnistía de 1993 por un fallo de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de 2016 permitió la reapertura de este caso y de los procesos por la masacre de unos 1.000 campesinos en El Mozote (1981) y de seis sacerdotes jesuitas (1989), aunque con avances lentos y sin resoluciones aún.

Romero fue canonizado en Roma el 14 de octubre de 2018 ante miles de personas, después de que el papa Francisco firmara meses antes un decreto que reconoce el milagro atribuido al religioso.

(c) Agencia EFE