¿Quién robó un tributo a la reina Isabel? Se llevan bandera británica colocada en la boya gigante de Cayo Hueso

La ciudad de Cayo Hueso decoró su emblemático marcador del punto más al sur del país con una banda púrpura y la bandera británica en honor a la reina Isabel, fallecida el 8 de septiembre. La decoración se colocó el viernes y debía permanecer allí hasta su funeral el lunes.

Pero el domingo por la mañana, alguien descolgó sin contemplaciones la bandera británica, la arrugó y se marchó con ella.

Un video tomado desde una cámara web fijada en el lugar mostró a tres hombres de pie junto a la boya. Uno de ellos, con un perro atado, posa para una foto junto a la boya. Luego, otro hombre, con camisa roja, baja la bandera y la retira, colocándosela bajo el brazo.

La reina Isabel y su esposo, el príncipe Felipe, visitaron los Cayos de la Florida en 1991 a bordo del yate real Britannia . Primero llegaron al Parque Nacional de Dry Tortugas y a Fort Jefferson, que está 70 millas al oeste de Cayo Hueso, en el Golfo de México, dijo Andy Newman, director de Relaciones con los Medios del Concejo de Desarrollo Turístico del Condado Monroe.

La pareja real fue recibida en la ciudad por la entonces alcaldesa del Condado Monroe, Wilhelmina Harvey, quien les regaló un caracol, dijo Newman.

“La reina es un icono muy importante en el mundo, y es una mujer tan fuerte y una líder increíble que estamos aquí para rendirle homenaje”, dijo la alcaldesa de Cayo Hueso, Teri Johnston, en una declaración el viernes con motivo de la inauguración de la exposición en el llamado Southernmost Point. “Hoy nos unimos al mundo en el duelo por la pérdida de un ser humano tan increíble”.

El marcador es un monumento de concreto de 20 toneladas construido para parecerse a una boya de navegación. Está pintado en rojo, amarillo, negro y blanco, y se instaló en 1983 para designar el punto de tierra más meridional del territorio continental de Estados Unidos.

Es uno de los lugares favoritos de los turistas que visitan la ciudad para fotografiarse junto al Océano Atlántico. A principios de este año, la boya estuvo en el punto de mira cuando unos vándalos prendieron fuego al hito y lo dañaron.