Rita Maestre, sobre Íñigo Errejón: “¿Cómo iba yo a encubrir como política lo que no sabía como pareja?”
MADRID.- El pasado 28 de octubre, Rita Maestre compareció en una conferencia de prensa con semblante serio para explicar la reacción de su partido, Más Madrid, tras la dimisión de Íñigo Errejón como consecuencia de unas denuncias anónimas en un perfil de Instagram por presuntos comportamientos sexuales vejatorios. Este domingo, la concejal madrileña se ha vuelto a poner delante de las cámaras, en este caso en una entrevista en el programa Salvados de La Sexta. “¿Cómo iba yo a encubrir como política lo que no sabía como pareja?”, se ha defendido Maestre, asegurando que ni ella ni nadie en su partido conoció las actitudes machistas con otras mujeres del que fuera su novio hace aproximadamente una década.
Errejón, cofundador de Podemos en 2014 y desde el pasado febrero portavoz parlamentario de de Sumar, dejó repentinamente la política hace dos semanas a través de una carta en la que decía que había llegado “al límite de la contradicción entre el personaje y la persona”. Maestre considera ese comunicado “un insulto a la inteligencia y una mezcla indecente de victimismo, echar balones fuera y de no pedir perdón”.
— Íñigo Errejón (@ierrejon) October 24, 2024
Días antes de la dimisión, una denuncia anónima en el perfil de Instagram de la periodista Cristina Fallarás señaló de manera indirecta al político, referente en la izquierda española desde el nacimiento de Podemos. Posteriormente hubo otros relatos anónimos de “violencia psicológica, abuso y humillación”, dice Maestre. Y una denuncia en comisaría de la presentadora y actriz Elisa Mouliaá.
Dos de los cinco episodios anónimos se produjeron durante el noviazgo entre Maestre y Errejón. “Aún lo estoy digiriendo”, cuenta. La que fuera novia de Errejón hace diez años y compañera de militancia en el espacio a la izquierda del PSOE decidió entonces escribir una carta que hizo pública. “La escribí del tirón, no me costó nada. Me salió con mucha naturalidad y con mucha rabia”, confiesa Maestre en la entrevista.
En la conversación, de casi una hora de duración, Maestre dice sentirse enfadada, decepcionada, algo culpable
”¿Cómo es posible que no te dieras cuenta de esto [los comportamientos de Errejón] antes?”, se pregunta a sí misma. Pero sobre todo siente rabia. “Un día me despierto y leo un testimonio en el que una mujer cuenta que ha tenido una relación cuando Íñigo Errejón era mi pareja. Y que se ha sentido mal, humillada, etcétera. Y ahí me doy cuenta de que luego Errejón volvía a casa conmigo y eso tiene mucho impacto. No tengo una rivalidad con esa mujer, sino un desprecio por ese hombre. Por eso escribo la carta”.
Un juez ha citado el martes a Errejón a declarar como imputado como consecuencia de la denuncia de Elisa Mouliaá. “El protagonismo no es mío. Las víctimas son las mujeres que han sufrido situaciones de maltrato, acoso o abuso”, subraya Maestre. “Yo me siento estafada, personal y políticamente”, continúa y explica que a partir de ahora tendrá que recolocar el capítulo de su vida con Errejón en otro sitio de su memoria. “Todo lo que ha pasado obliga a reubicar y recolocar de una manera distinta el pasado. Y tengo que hacerlo en privado pero también en publico porque la única manera de sanar es hablar”.
Cuando se destapó el escándalo, muchas voces, sobre todo en la izquierda, deslizaron que el comportamiento de Errejón con las mujeres era un secreto a voces. Con una enorme cara de estupor y sorpresa, Rita Maestre se defiende y asegura que ni ella “ni Manuela [Bergerot], ni Mónica [García], ni ninguna otra persona” de Más Madrid sabían que Íñigo Errejón era “un misógino, un depredador y un manipulador patológico”. Además, define como “impecable” la gestión de esta crisis tanto por parte de Sumar como de Más Madrid.
“Hemos sido rápidos y muy contundentes y francas ante la prensa y en asumir que queda mucho por repensar para garantizar que esto no se vuelva a repetir”. Y responde con un “no” tajante a la pregunta de si está preocupada por la situación emocional o anímica de Errejón. “En este momento, el nivel de rabia y de decepción no me permite tener empatía”, concluye. Preguntada por cómo se siente al ver el final que ha tenido la carrera política de Errejón, afirma: “Lo que siento es que no supiéramos todo esto antes. Porque no creo que ninguna aportación a la política valga tanto como el daño paralelo que ha creado”.