Foto con el secretario de Justicia de EEUU ha puesto en aprietos a un restaurante tex-mex de Houston

Hay visitas que, en cierto modo, pareciera que están envenenadas. O, al menos, amargan el menú en una situación altamente controversial.

Algo así le sucedió al restaurante tex-mex El Tiempo Cantina, ubicado en Houston cuando recibió el viernes pasado al secretario de Justicia de Estados Unidos, Jeff Sessions. De acuerdo al relato de la televisora ABC13, Sessions visitó esa ciudad texana para dirigir una junta de fiscales federales y otras autoridades sobre contención de la delincuencia y la inmigración ilegal y en un momento decidió ir a comer algo. Optó por El Tiempo Cantina.

Otros funcionarios de la administración de Donald Trump han sido increpados públicamente durante su visita a restaurantes pero este no fue el caso de Sessions. Al parecer, no hubo tal conmoción mientras él estuvo allí (la figura de Sessions es especialmente controversial por su ruda posición en contra de los indocumentados y la comunidad LGBTQ) pero fue el propio restaurante el que encaró un vendaval de reproches en redes sociales.

El clamor fue tan agudo que Roland Laurenzo, presidente de la empresa que es dueña de El Tiempo Cantina, tuvo que cerrar sus cuentas en redes sociales ante el abierto rechazo que produjo un post colocado en su página de Facebook en el que apareció una foto de Sessions en el restaurante y la afirmación de que había sido un “honor” servirle.

Como indicó la televisora CBS, El Tiempo Cantina comenzó a recibir en sus redes sociales una catarata de reproches, insultos, llamados a un boycott y hasta amenazas de muerte. Todo en repudio a la noción de que fue un “honor” atender allí a Sessions.

El post de El Tiempo Cantina que desató todo el vendaval ya no existe, pues fue borrado junto al resto de las redes sociales de ese restaurante, pero algunos usuarios lo compartieron y preservaron.

Y aunque la gran mayoría de las reacciones que ha suscitado han sido de crítica y repudio, algunos han defendido al restaurante e incluso han prometido ir a comer allí próximamente.

Laurenzo señaló que en realidad trató al secretario de Justicia como a cualquier otro cliente, que se charló con él sobre fajitas (el platillo de carne) y aclaró que el post que desató la conmoción no significa que su compañía avale la política de Sessions, como la cruel y perturbadora separación de menores de sus padres indocumentados en la frontera, pero reconoció que nunca pensó que se iba a meter en tremenda tempestad por colocar el citado post.

Sea como sea Dominic Laurenzo, padre de Roland y también propietario de El Tiempo Cantina, expresó directamente en su página de Facebook un deslinde de la política de Sessions. Ese comunicado señaló, entre otras cosas, que el restaurante “en ninguna forma apoya la práctica de separar niños de sus padres ni ninguna otra práctica del gobierno relativa a inmigración” y añadió, tras mencionar que solo supieron de la visita de Sessions hasta el último momento (el Servicio Secreto solo les dijo inicialmente que acudiría allí un funcionario gubernamental), que el post sobre el “honor” de servir al secretario de Justicia fue publicado sin la aprobación de los propietarios del restaurante.

Sessions, con todo, tiene otras cosas más severas en redes sociales de qué preocuparse. Por ejemplo, el tuit que el 11 de agosto publicó en presidente Donald Trump, donde señala que Sessions está “tieso de miedo” y “perdido en acción” por su inacción ante la permanencia en el Departamento de Justicia de Bruce Ohr, funcionario cuya esposa realizó investigaciones para la empresa Fusion GPS en relación al dossier compilado por el exespía británico Christopjer Steele sobre presuntas relaciones y actividades de Donald Trump en Rusia (alegaciones que en general no han sido probadas y que el presidente entiende como una “cacería de brujas” en su contra).

Por añadidura, El Tiempo Cantina fue el segundo restaurante de comida mexicana que Sessions visitó en su paso por Houston, pues antes había visitado La Mexicana para desayunar con el jefe de la policía de esa ciudad, Art Acevedo. El por qué Sessions visitó en específico restaurantes mexicanos o tex-mex no se ha revelado, pero ciertamente La Mexicana no publicitó la visita del funcionario y por ende no sufrió las críticas que azotaron a El Tiempo Cantina.

La severa tensión por las políticas del gobierno federal han, así, conducido a que la mera presencia de un funcionario de la administración desate rechazo y críticas punzantes. Atrás han quedado las épocas en las que unas fajitas eran solo cuestión de sazón y apetito. Ahora pueden también convertirse en un huracán político y mediático.

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