Relata Pedro Ángel Palou la intimidad de la Ciudad de México

CIUDAD DE MÉXICO, julio 12 (EL UNIVERSAL).- El movimiento estudiantil de 1968 le dio al escritor Pedro Ángel Palou el universo para poner en un mismo sitio a los descendientes de las cuatro familias sobre las que estructura los 500 años de historia íntima de la mítica y noble Ciudad de México, desde la caída de Tenochtitlan hasta el sismo de 1985. Entre cisma y cisma, el narrador y profesor de literatura de tiempo completo en Tufts University, donde es jefe del Departamento de Lenguas Romances, relata en su novela México (Planeta, 2022) la épica de esta ciudad que ha tenido el poder de destruirse y edificarse en varias ocasiones.

"Meto ese mundo que fue el de la gloria juvenil de los 60, y no me interesa sólo el 2 de octubre, me interesa todo lo previo al 2 de octubre en las relaciones humanas e íntimas de todos esos hijos de las cuatro familias que por primera vez puedo poner juntos, a todos, en la misma casa: repartiendo volantes, imprimiendo en el mimeógrafo, y haciendo activismo por los derechos civiles y los derechos políticos en el México del 68", asegura Palou.

Quiso contar una historia íntima de la ciudad. Parte de la realidad de que historias de la ciudad hay muchas y no se trata de rivalizar con los historiadores, sino contar una historia íntima de una urbe que nace de una utopía, "es la historia de una tierra prometida para los mexicas que llegan y fundan lo que después será México Tenochtitlan; fundan una ciudad utópica: es cierto que es la ciudad de los desastres, es cierto que es la ciudad de las inundaciones, las pestes, los terremotos, pero algo tiene esa utopía fundacional porque es la ciudad que siempre renace, esa ciudad que se rehace, la ciudad infinita y la ciudad que acoge", afirma el escritor nacido en Puebla, en 1966.

A lo largo de cinco siglos y mediante las historias íntimas de cuatro familias: los Cuautle, los Santoveña, los Landero y los Sefamí, Palou relata los avatares de la llamada Ciudad de los Palacios, pero desde los ciudadanos que la han habitado y, ante todo, desde la perspectiva de cómo los acogió esta ciudad y de cómo esta ciudad les permitió rehacerse tal como la Ciudad de México se ha rehecho tantas veces.

"La ciudad de México no es la ciudad de las segundas oportunidades, es la ciudad de las terceras y cuartas y quintas oportunidades; ante eso ¿cómo contar la vida íntima de la ciudad?, merece ser contada desde esa virtud que tiene de acoger, desde esa capacidad de crear familias, justo desde la genealogía familiar", señala el narrador de esta novela ambiciosa; "se vuelve ambiciosa porque no se trata de una sola saga familiar, que ya sería ambiciosa por los 500 años, sino porque son cuatro familias".

México no es un libro de historia con los momentos relevantes y las efemérides, es una novela contada desde la vida íntima de una ciudad en la que no existe solamente el día en que entraron Villa y Zapata a la Ciudad y ocuparon Palacio Nacional, no es sólo el día del sismo de 1957 y la caída del Ángel de la Independencia, sino lo que provocó ese sismo en las familias.

"Yo quise contar eso y quise contar obviamente las colonias marginadas, y quise contar la vida de la Merced, que es súper interesante, y por eso la familia judía llegada en el Porfirismo para mí era muy importante, porque tienen otra idea de comunidad que a veces quienes no son somos judíos no entendemos; yo quería que estuvieran esas solidaridades gremiales: la de los panaderos, la de los talabarteros, los zapateros y donde los judíos se vieran también como parte de la ciudad. No es una ciudad que solamente se vive por barrios, se vive por oficios, se vive por modos de ser. Me interesaba salirme de los estereotipos", afirma Palou, el autor de esta historia que va de la cultura, a la política, la vida social, la utopía, la destrucción y el renacimiento.