Refugiados en México y el problema que nadie ha solucionado hasta ahora: integrarlos a la sociedad

Refugiados y migrantes, un asunto que traspasa los sexenios con más retos que logros. (Isaac Monroy/picture alliance via Getty Images)
Refugiados y migrantes, un asunto que traspasa los sexenios con más retos que logros. (Isaac Monroy/picture alliance via Getty Images)

La migración y el alojo de refugiados ha sido uno de los asuntos que más debates ha generado en la conversación pública mexicana. El gobierno mexicano vigente, del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), tuvo en un comienzo (2018) una postura humanitaria: estableció no penalizar ni inhibir la entrada de migrantes por la frontera sur del país. AMLO sentenció su forma de pensar entonces: había que atender las causas de la migración en lugar de recurrir al castigo. Pero al paso de los años esa idea se difuminó y el problema creció sin que se le diera atención a nivel institucional.

La tensiones con los gobiernos de Estados Unidos, tanto el de Donald Trump como el de Joe Biden, llevaron a López Obrador a utilizar a la Guardia Nacional como muro humano de contención. Las críticas desde las organizaciones humanitarias han sido amplias para el mandatario mexicano, que terminará su gestión el próximo mes de octubre. Claudia Sheinbaum, también del partido Morena, será su sucesora y tendrá que lidiar con un asunto que está lejos de acabar. Ha formulado posturas similares a las del todavía mandatario.

Una familia centroamericana, parte de la Caravana Migrante, pasando por Ciudad Hidalgo, Chiapas, en el 2018. (ALFREDO ESTRELLA/AFP via Getty Images)
Una familia centroamericana, parte de la Caravana Migrante, pasando por Ciudad Hidalgo, Chiapas, en el 2018. (ALFREDO ESTRELLA/AFP via Getty Images)

En marzo pasado, Sheinbaum, durante su campaña, volvió a la idea de López Obrador de atender las causas que originan esa migración. “Esa va a ser y va a seguir siendo nuestra posición, que es cooperación para el desarrollo. Que haya un apoyo a México, pero principalmente a Centroamérica y a otros países en donde hay migración para llegar a Estados Unidos”, sentenció en conferencia de prensa en Chihuahua.

De acuerdo con la abogada Karen Pérez, presidenta del Servicio Jesuita de Refugiados en México, cada día llegan a México entre 6 mil y 8 mil personas en busca de refugio. Ella sostuvo, en entrevista con EFE, que todavía hay más retos que logros en cuanto a la atención de esas personas, que encuentran dificultades sociales e institucionales apenas entran a territorio nacional. Ella ve avances, aunque, desde luego, eso no es definitivo. “Hay escuelas en donde ya vemos muchos más niños y niñas que están en diferentes grados y nos decían los profesores que son niños felices, que no se sienten distintos a los demás”. Esas cuestiones reflejan un trabajo hecho a nivel comunitario, pero que todavía debe encontrar pleno respaldo en las autoridades educativas.

Recordó que si bien la mayoría de los refugiados provienen de Centroamérica, además de países como Venezuela, Haití y Cuba, también hay casos de refugiados de otros continentes que llegan hasta suelo nacional, lo cual pone la mira sobre otros focos rojos, como la trata de personas a la que pueden ser susceptibles cuando arriban. “Atraviesan miles de kilómetros, países completos, e incluso continentes, para solicitar protección internacional en México. Tenemos personas de Uzbekistán, Kazajistán, Pakistán, Irán, Bangladesh, Mauritania, que incluso se mueven con el tráfico de personas”.

Migrantes haitianos realizando trámites migratorios en Tijuana, Baja California. (Carlos Moreno/NurPhoto via Getty Images)
Migrantes haitianos realizando trámites migratorios en Tijuana, Baja California. (Carlos Moreno/NurPhoto via Getty Images)

A pesar de los prejuicios que todavía existen en la sociedad, también se han percibido avances en ese sentido y de ello se ven beneficiados los refugiados que logran integrarse de manera exitosa a las comunidades a las que llegan. “Hemos visto a familias que han podido establecerse en una comunidad, integrarse a ella misma, ser miembro activo de la comunidad”, subrayó Karen Pérez.

El tema seguirá dando de qué hablar mucho tiempo más. Fue, de hecho, de los primeros asuntos que debió afrontar López Obrador incluso antes de asumir la presidencia formalmente: en los meses finales de 2018, la Caravana Migrante de Centroamérica pasó por territorio mexicano, despertando una fuerte tensión social, cargada de comentarios discriminatorios. Contra eso también se deberá luchar en el futuro inmediato.