Quisquillosos "sommeliers de vacunas" socavan campaña de vacunación de Brasil: expertos

Por Pedro Fonseca y Eduardo Simões

RÍO DE JANEIRO/SAO PAULO, 9 jul (Reuters) - Una pregunta se extendió por la fila frente a un centro de inoculación improvisado en el barrio costero de Copacabana en Río de Janeiro en una mañana reciente: "¿Qué vacuna están usando?".

A pesar de que el país tiene el segundo número de muertes más alto del mundo y un elevado número de contagios, las personas en todo Brasil se niegan a recibir su inyección si la vacuna que se está utilizando no les satisface.

Los medios locales los han apodado "los sommeliers de vacunas".

No hay cifras oficiales sobre el número total de personas que escogen sus vacunas, pero decenas de ciudades en Brasil han tratado de acabar con la práctica, tomando los nombres de aquellos que se niegan a ser vacunados con la vacuna que se ofrece y moviéndolos al final de la cola.

Los expertos en salud pública en Brasil afirman que la práctica y la información errónea, o información poco entendida, que la alimenta, amenaza con socavar la campaña de vacunación del país.

También es, dicen, muy egoísta.

"La persona se está poniendo en riesgo y termina poniendo en peligro todo el sistema", apuntó Alexandre Naime Barbosa, profesor de enfermedades infecciosas de la Universidad Estadual de São Paulo. "Muestra una falta de empatía, un egoísmo enorme".

La tendencia surge cuando muchos países ya han vacunado a la mayoría de sus poblaciones y están levantando las restricciones.

La Sociedad Brasileña de Inmunizaciones dijo que la mayoría de los incidentes involucran a personas que rechazan las vacunas de Sinovac de China o, en menor medida, Astrazeneca. En cambio, prefieren dosis de Pfizer y Johnson & Johnson.

Han aparecido grupos de WhatsApp con personas que intercambian consejos sobre qué centros de vacunación ofrecen las vacunas más solicitadas.

A algunos les preocupa que CoronaVac de Sinovac no funcione tan bien, mientras que otros temen que Europa y Estados Unidos no lo reconozcan, a medida que se eliminan las restricciones de viaje para los que están completamente vacunados.

Los expertos en salud brasileños buscan disipar las preocupaciones, particularmente sobre CoronaVac, luchando contra una ola de críticas, incluso del presidente Jair Bolsonaro, quien declaró sobre el uso de la vacuna china a principios de este mes: "No funcionó".

Los ensayos de etapa tardía en Brasil encontraron que CoronaVac tiene una eficacia del 50% en la prevención de infecciones sintomáticas, en comparación con el 76% de Astrazeneca y el 95% de Pfizer.

Pero en un contexto del mundo real, CoronaVac ha demostrado ser muy eficaz para reducir la hospitalización y la muerte, argumentan los expertos en salud pública de Brasil.

"Cuando se mira lo que realmente importa, reducir el número de hospitalizaciones y muertes, todas las vacunas que tenemos en Brasil tienen una eficacia muy alta", sostuvo Barbosa.

En Serrana, una localidad del estado de Sao Paulo, donde casi toda la población adulta fue vacunada con CoronaVac como parte de un estudio, las muertes se redujeron en un 95%. Las hospitalizaciones cayeron un 86% y las infecciones sintomáticas un 80%.

Los expertos en salud pública también han enfatizado que el riesgo de desarrollar coágulos sanguíneos como resultado de tomar la vacuna Astrazeneca es increíblemente raro.

Ninguna vacuna, declaran los científicos, elimina por completo la posibilidad de muerte.

"Elegir su vacuna es un gesto ignorante que carece de compromiso con la salud pública", dijo Dimas Covas, presidente del Instituto Butantan que produce CoronaVac en Brasil.

(Reporte de Pedro Fonseca en Rio de Janeiro y Eduardo Simoes en Sao Paulo, escrito por Stephen Eisenhammer; Editado en español por Janisse Huambachano)