Quiénes son los sindicalistas que impulsan el paro nacional docente en defensa de un activista acusado de “incendio gravoso”

Sonia Alesso, Roberto Baradel y Eduardo López
Sonia Alesso, Roberto Baradel y Eduardo López, los tres referentes de la Ctera, la entidad gremial docente que activó hoy una huelga nacional en defensa de un dirigente acusado de incendiar la Legislatura de Chubut - Créditos: @Archivo

La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) es en una gremial docente de segundo grado. Es decir, no afilia de manera directa a los maestros sino que enrola a sindicatos. Se convirtió así en la federación docente con mayor representatividad en el país, con 250.000 afiliados y gremios propios en las 24 provincias. Activa hoy el primer paro nacional desde que asumió como presidente Alberto Fernández en rechazo a la “criminalización y judicialización de la protesta social” tras un fallo de la justicia de Chubut que declaró culpable por “incendio gravoso” al dirigente Santiago Goodman, que podría terminar hoy en la cárcel.

Las paritarias ya se negocian por encima del 80% y vuelven las cláusulas gatillo

La Ctera forjó su espíritu combativo durante la década del 90 y uno de sus reclamos más emblemático fue la instalación durante 1003 días de la carpa blanca frente al Congreso. La cúpula actual de la confederación está integrada por Sonia Alesso, referente de la Asociación de Magisterio de Santa Fe; Roberto Baradel, del Suteba bonaerense, y Eduardo López, del sindicato docente porteño más representativo.

La Ctera se jacta de tener más peso que los otros gremios nacionales del sector como la Unión de Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la Confederación de Educadores Argentinos (CEA). De estos tres, UDA es el más representativo, con 180.000 afiliados. Su jefes es Sergio Romero, dirigente de peso en la CGT, que se diferenció y cuestionó el paro de hoy. “Nosotros paramos por los salarios y derechos de los trabajadores y no en defensa de cuestiones personales”, dijo Romero a LA NACION.

En la Argentina hay aproximadamente 1.200.000 maestros, de los cuales la mitad están sindicalizados, según fuentes del sector. Es decir, una mitad no es representada de manera directa por los gremios. Estos números generan inquietud en las cúpulas sindicales.

Sonia Alesso, la defensora de Cristina

Sonia Alesso, jefa de la Asociación de Magisterio de Santa Fe, quedó al frente de la Ctera hace ocho años, cuando debió reemplazar a Stella Maldonado, que falleció por una enfermedad. Alesso se inició en la docencia en 1981 y es una gremialista identificada con el kirchnerismo . Así lo refleja su activismo en las redes sociales, con mensajes de apoyo a la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Fue delegada en la escuela la Integral, de Fisherton, en Rosario. La marcó su participación en la Marcha Blanca del 23 de mayo de 1988, en otro de los grandes reclamos docentes. En los ‘90, Alesso también participó del armado de la Carpa frente al Congreso en rechazo al ajuste salarial y al recorte de las jubilaciones. Sus referentes sindicales son José Tessa, de Santa Fe, y Hugo Yasky, exjefe de la Ctera, ahora a cargo de la CTA y diputado nacional del Frente de Todos. Es, además, columnista en El Cohete a la luna, el medio digital que dirige Horacio Verbitsky.

Alesso mantiene en Santa Fe un prolongado conflicto con la gestión de Omar Perotti por el pago de los salarios.

Roberto Baradel, el de los 62 paros a Vidal

Roberto Baradel renovó en mayo último su mandato al frente del Suteba en medio de acusaciones de irregularidades en el proceso electoral que denunció Romina Del Plá, de la izquierda. Las denuncias no prosperaron y Baradel revalidó con amplio margen su poder al frente del gremio docente bonaerense con mayor cantidad de afiliados. Es el jefe desde 2009.

Su perfil levantó protagonismo durante la gestión de María Eugenia Vidal como gobernadora de la provincia de Buenos Aires. Por entonces, Baradel orquestó un frente gremial con las otras cuatro organizaciones de maestros de la provincia y siempre buscó jugar en tándem. El Suteba activó 62 huelgas entre 2015 y 2019, durante el gobierno de Cambiemos .

Baradel tiene tiene 54 años y hace 30 que empezó su carrera gremial. Sus primeras armas las obtuvo como militante del centro de estudiantes del Colegio Nacional Luís Piedra Buena (actual escuela media N° 8) de Lanús, donde cursó sus estudios secundarios entre 1980 y 1984.

Al terminar sus estudios Baradel se anotó en la carrera de Biología en la UBA. Quería ser biólogo marino, pero la plata no le alcanzaba y se buscó un trabajo: entró como pañolero (encargado de los depósitos de útiles y herramientas) en la Escuela Media N° 22 de Villa Urbana, en el distrito de Lomas de Zamora. Al poco tiempo ingresó en Escuela Media N° 1 de Valentín Alsina, en Lanús, donde fue nombrado preceptor.

El cargo le serviría como plataforma para comenzar su carrera gremial. Fue así como en 1991 empezó a trabajar en la Secretaría de Prensa del Suteba de Lanús. Por aquella época, el sindicato, fundado en 1986, no tenía el aparato de movilización con que cuenta en la actualidad. Mucho menos lo tenía una delegación distrital. Pero Baradel era ambicioso. En sólo tres años llegó a número uno de esa seccional.

Mara Ruiz Malec, ministra de trabajo de la provincia de Buenos Aires, y Roberto Baradel, jefe del Suteba que le activó 62 paros a la gestión de María Eugenia Vidal
Mara Ruiz Malec, ministra de trabajo de la provincia de Buenos Aires, y Roberto Baradel, jefe del Suteba que le activó 62 paros a la gestión de María Eugenia Vidal - Créditos: @Santiago Hafford

La última etapa de Baradel como dirigente de Lanús coincidió con una de las medidas de fuerza más importantes del sindicalismo docente de la Argentina: la Carpa Blanca, instalada frente al Congreso Nacional en reclamo de una reforma educativa y de la aprobación de una ley de financiamiento.

Gracias a su desempeño en la protesta nacional de la Carpa Blanca, Baradel pudo escalar posiciones y saltar al consejo directivo provincial del Suteba. Primero fue secretario de la Rama Privada de los docentes, donde pudo desplegar sus conocimientos de abogado, título que había obtenido en 1995.

En 2000 fue designado secretario de la organización, cargo que ocupó hasta 2003. Comenzó entonces a interesarse por la gestión del presidente electo, Néstor Kirchner . En 2004, Yasky dejó la conducción de Suteba para asumir la secretaria general de la Ctera y Baradel quedó al frente del gremio provincial. A partir de entonces, su política marcaría un lento y sostenido acercamiento al proyecto nacional del kirchnerismo.

Eduardo López, el docente que no quería escuelas abiertas en pandemia

Eduardo Marcelo López es el secretario general adjunto de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), el gremio de maestros más representativo de los 17 que confluyen en la Ciudad de Buenos Aires y al que tuvo en un puño durante ocho años. Su influencia, de todas maneras, sigue intacta: desde hace dos años la UTE es liderada por Angélica Graciano, su esposa. Un dato que refleja su alineamiento político: se casaron en el día de la lealtad peronista, el 17 de octubre de 1987 y tienen dos hijas.

López es al sindicalismo docente porteño lo que Roberto Baradel, el secretario general del Suteba, es al bonaerense. Ambos sindicatos están afiliados a la Ctera, la entidad gremial más importante del país que dirige Sonia Alesso. Así, los dos tienen peso e injerencia a nivel nacional: Baradel es el secretario general adjunto y López, el secretario gremial. El número tres.

Eduardo López
Eduardo López, el docente porteño que desafía a Rodríguez Larreta - Créditos: @Archivo

López se opuso fervientemente a la apertura de las escuelas porteñas durante la pandemia del coronavirus y fue uno de los impulsores de los numerosos reclamos que enfrentó la gestión de Horacio Rodríguez Larreta. Llegó a acusar al jefe de gobierno de “negacionismo sanitario”.

López tiene 57 años y comenzó su trayectoria en la docencia con el profesorado para la educación primaria en la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas N °2 “Mariano Acosta”. La UTE es el gremio con más afiliados en la Ciudad de Buenos Aires: tiene 8600, según fuentes del gobierno porteño. Sin embargo, es apenas el 15% del universo total de los docentes porteños, que son unos 57.000 aproximadamente. Del resto, alrededor de 22.000 educadores forman parte de otros gremios. El 60% no está sindicalizado.