¿Qué tan a la izquierda está realmente Joe Biden?

Democratic U.S. presidential candidate and former Vice President Joe Biden speaks with local residents on the patio of the Carlette’s Hideaway sports bar during a campaign stop in Yeadon, Pennsylvania U.S., June 17, 2020. REUTERS/Jonathan Ernst TPX IMAGES OF THE DAY

Qué está pasando

Dada la caracterización que han hecho de Joe Biden sus competidores durante el ciclo electoral de 2020, bien podríamos perdonar al votante promedio que no tenga claro en qué lugar del espectro político ubicarlo.

Durante las primarias demócratas, sus rivales presentaron al exvicepresidente como un centrista con ideas anticuadas en comparación con los candidatos más progresistas que participaban en la carrera electoral. Ahora que ha pasado a ser el candidato para las elecciones generales, la campaña de reelección del actual presidente se refiere a Biden como “un instrumento desafortunado de la extrema izquierda”.

El lugar que ocupa en el espectro político, por supuesto, es relativo. Biden siempre parecerá moderado si se lo compara con el demócrata socialista Bernie Sanders. Cualquier candidato demócrata estaría muy a la izquierda de un republicano conservador como el presidente Trump. Lo mismo se puede aplicar a las propuestas políticas de Biden. Son pocas las propuestas que hizo que satisfagan al ala izquierda del Partido Demócrata. Al mismo tiempo, sus propuestas sobre muchos temas son considerablemente más progresistas que las de Barack Obama o Hillary Clinton.

Por qué hay un debate

Una opinión generalizada sobre Biden es que es un moderado consumado que se ha dedicado a encontrar el centro político del Partido Demócrata a lo largo de su carrera. Entonces, su giro a la izquierda respecto a sus predecesores podría verse como una respuesta al movimiento mayoritario en esa dirección dentro del partido. La “opción pública”, que es el elemento central del plan de atención médica de Biden, fue vista como demasiado progresista por una cantidad importante de senadores demócratas cuando se aprobó la Ley de Atención Médica Asequible en 2009. Hoy, la opción pública se considera una posición moderada si se la compara con las propuestas de Medicare para todos defendidas por algunos de sus competidores en las primarias.

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Esta opinión, afirman algunos, hace pensar que la plataforma de Biden es menos progresista de lo que realmente es. Tras ganar la nominación como candidato, se asoció con Sanders para crear un “equipo de trabajo por la unidad” para encontrar un terreno común entre las alas izquierda y centro del partido. Los compromisos resultantes, que salieron a la luz a principios de este mes, convertirían a Biden en “el presidente más progresista desde Franklin D. Roosevelt”, dijo Sanders. Además de la reforma de la atención sanitaria, la agenda de Biden incluye medidas agresivas para frenar el cambio climático, una inversión de 700 000 millones de dólares en el sector productivo estadounidense, reformas políticas considerables, programas de escolarización temprana gratuita y universal y un aumento de impuestos a los estadounidenses ricos por valor de 4 billones de dólares.

Sin embargo, Biden no está pidiendo las revisiones sistémicas que apoya el ala progresista del partido. También ha rechazado en varias ocasiones el Medicare para todos, el New Deal ecológico y, más recientemente, la desfinanciación de la policía. También se cuestiona el nivel de compromiso de Biden con su agenda política si llega a convertirse en presidente. Sus frecuentes llamamientos a encontrar compromisos con los republicanos y su reticencia a apoyar a los obstruccionistas son vistos como una señal de que podría dejar de lado sus políticas más agresivas para llegar a un acuerdo, dicen algunos desde la izquierda.

Lo siguiente

La elección de la compañera de fórmula de Biden dará un indicio de su visión para el futuro del país, especialmente si nos fijamos en la creencia extendida de que solo estará un mandato si es elegido. Asociarse con una figura progresista como Elizabeth Warren podría sentar las bases para un cambio más grande hacia la izquierda cuando se acerquen las elecciones de 2024.

Perspectivas

La plataforma de Biden no es una revolución, pero sigue siendo una reestructuración importantísima de nuestro sistema político

“Biden no es socialista, no es radical, pero se presenta con la plataforma política más liberal de cualquier candidato demócrata de la historia moderna de Estados Unidos. Si gana la presidencia, podría dar lugar a un período de victorias progresistas que no se ven en el país desde los programas Gran Sociedad de los años 60”. — Michael A. Cohen, Boston Globe

A pesar de su cambio hacia la izquierda, Biden sigue siendo un moderado

“En general, se trata de una agenda que está a la izquierda del centro, cerca de donde se encuentra la opinión pública, aunque debería modificarse para que sea aprobada como ley. No es radical”. — Al Hunt, The Hill

Es muy liberal en relación con todos los candidatos demócratas anteriores

“Biden es un moderado en comparación con Sanders, pero está bastante más a la izquierda que los abanderados demócratas anteriores. Describir a Biden como un moderado sin este contexto es ignorar la especificidad de su agenda y del cambio hacia la izquierda que representa en la política del Partido Demócrata”. — Peter Suderman, Reason

Biden está escuchando a los progresistas, pero puede que no siga sus consejos

“Mientras que los activistas liberales han elogiado el alcance progresista de la campaña, el equipo de Biden no ha prometido actuar usando las contribuciones de las que se ha nutrido”. — Kara Voght, Mother Jones

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Biden ha virado hacia la izquierda junto a la opinión pública

“Biden no es el campeón de los progresistas: no va un paso más allá de lo que quisieran y no ha respaldado sus ideas más ambiciosas, pero la opinión pública ha virado hacia la izquierda y el pensamiento de Biden ha cambiado con ella, creando una plataforma con la que los progresistas están realmente entusiasmados”. — Matthew Yglesias, Vox

No puede moverse demasiado a la izquierda sin dejar fuera a los votantes indecisos

“Va a tener que encontrar una forma de mantener el equilibrio, encontrar una forma de reunir los argumentos y objetivos de los diferentes sectores del partido de un modo que se mantenga dentro del rango del centro de gravedad en el país”. — El politólogo William Galston a Wall Street Journal

Ha rechazado las políticas de izquierda más decisivas

“Se ha resistido a sostener posturas simbólicas que a algunas personas les podrían parecer que se escoran demasiado a la izquierda. Al igual que en las primarias se negó a ‘abolir el ICE’ (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) cuando fue sugerido, hace poco se negó a sumarse a los llamamientos a ‘desfinanciar a la policía’ (…). Al rechazar el eslogan de forma explícita, Biden demuestra que es más moderado que otros en el partido y, ciertamente, más moderado que la izquierda que no se considera del Partido Demócrata”. — Paul Waldman, Washington Post

El coronavirus podría empujar a Biden más hacia la izquierda

“Biden siempre ha sido un animal de su tiempo y la crisis de la COVID-19 podría obligarlo a virar más hacia la izquierda más de lo que lo hubiera hecho en otro contexto”. — Ross Barkan, GQ

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Como presidente, Biden le permitiría a la extrema izquierda controlar su toma decisiones

“Biden ha demostrado únicamente que es una cáscara vacía. El viejo Joe, el que estaba por la policía y por la clase trabajadora, ha dejado de existir. Su cuerpo sigue ahí, pero, al igual que su partido, ha sido invadido por la izquierda socialista”. — Miranda Devine, New York Post

Biden tiene mucho trabajo por hacer si quiere ganarse la confianza de los progresistas

“El escepticismo de la izquierda con el señor Biden tiene raíces profundas (…) Algunos progresistas lo ven como el tipo de instrumento comprometido y transigente habitual del poder establecido que obstaculiza un cambio sustancial y temen que se haya rodeado de otros instrumentos del poder establecido que ven a la base militante como una amenaza para la estructura de poder existente y que, por tanto, debe ser neutralizado”. — Michelle Cottle, New York Times

Mike Bebernes