Yahoo Noticias La polémica lucha de los transgénero por ir al baño de su preferencia en EEUU
La determinación de un adolescente podría ser definitiva para abatir la oleada de leyes y normas discriminatorias contra la comunidad LGBT que ha azotado a Estados Unidos en fechas recientes y, por lo pronto, ya ha logrado una singular victoria en su propio caso.
Gavin Grimm es un adolescente transgénero de 16 años que demandó a su escuela en Virginia en defensa de su derecho de usar los baños de hombres, su identidad de género, y no los de mujeres, su sexo biológico.
De acuerdo al relato de The New York Times, la escuela de Grimm originalmente le había concedido el uso del baño de varones, pero más tarde las autoridades escolares (al parecer luego de recibir quejas) determinaron que los baños escolares debían ser usados según el sexo biológico de los estudiantes y que los alumnos con “cuestiones de identidad de género” tenían que utilizar un baño privado.
Gavin Grimm, un joven transgénero que ha luchado judicialmente, con éxito, por su derecho a usar el baño de su escuela según su identidad de género. (AP)
Esto resultó inaceptable para Grimm, quien presentó una demanda que, tras resultarle contraria inicialmente, llegó hasta la Corte Federal de Apelaciones del Cuarto Circuito. Allí se determinó que la resolución viola una ley federal que prohíbe la discriminación por razones de género en cualquier institución o programa educativos que reciba fondos federales.
Y aunque Grimm no puede ya mismo usar el baño de hombres en su escuela, pues el fallo a su favor indica que el caso debe volver a una corte menor para ser resuelto, sí sienta un precedente que tiene alcances mucho más allá.
El fallo de la Corte de Apelaciones tiene validez en toda el área de su jurisdicción, que abarca Maryland, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Virginia y Virginia Occidental y por ello la victoria judicial de Grimm da una sacudida a leyes anti LGBT que han proliferado en el país, y muy específicamente a la recién promulgada en Carolina del Norte, que entre otros asuntos ominosos contra la comunidad homesexual y transgénero obliga a las personas a usar los baños públicos según su sexo biológico.
La presión contra esa ley en Carolina del Norte es fuerte, pues el fallo en el caso del joven Grimm invalidaría la restricción de esa norma al uso de baños públicos en escuelas y, además, pone en evidencia su carácter discriminatorio.
La escuela Gloucester High School, que le prohibió a Gavin Grimm usar el baño de hombres. (AP)
Pero lo que la victoria judicial de Grimm añade al actual contexto es la clarificación de que prohibirle a una persona usar el baño que coincide con su identidad de género es discriminatorio e ilegal, y que imponer tales medidas tiene consecuencias negativas.
Esto es especialmente relevante pues normas como la de Carolina del Norte han surgido, como iniciativas de ley, en múltiples estados. Y en otros, como en Mississippi, han entrado en vigor bajo la forma de leyes de ‘protección de la libertad religiosa’ que permiten que una persona le niegue a otra la prestación de un bien o servicio si considera que hacerlo viola sus creencias religiosas (que, en este asunto, implican el rechazo a los homosexuales y transgénero).
Con todo, y aunque la presión de los políticos y grupos ultraconservadores que han impulsado esas normas es intensa, también lo ha sido la reacción de rechazo a la discriminación legalizada.
Por ejemplo, importantes empresas han repudiado esas normas en Carolina del Norte y Mississippi, y en Georgia el gobernador debió vetar una ley similar por la presión de los grupos empresariales.
Target, por ejemplo, anunció que rechaza la discriminación y que permitirá a las personas transgénero utilizar los baños en sus tiendas del modo que ellas prefieran, sin restricción basada en su sexo biológico.
Caitlyn Jenner, famosa mujer transgénero, podría usar el baño que quisiera en su Torre, dijo Donald Trump. (AP)
Hasta el precandidato republicano a la presidencia Donald Trump sugirió que las personas transgénero deberían tener la posibilidad de usar el baño de su preferencia y dijo que la conocida transgénero y exatleta de los Juegos Olímpicos Caitlyn Jenner puede ir a la Torre Trump y utilizar cualquier baño que le parezca, como indicó CNN citando al programa Today de NBC.
Y muchas empresas y organizaciones han pedido la anulación de las leyes anti LGBT por su severo impacto en su economía. Autoridades en Raleigh, Carolina del Norte, han dicho que ya se han perdido en esa ciudad 3 millones de dólares en actividades de negocios y turismo a causa de la citada ley, y en otra ciudad de ese estado, Charlotte, se ha proyectado que esa norma causará que se dejen de recibir más de 86 millones de dólares en los próximos cuatro años, dinero que los consumidores simplemente dejarían de gastar allí en rechazo a la norma discriminatoria, de acuerdo al Huffington Post.
Además, la compañía de transacciones de pago en línea Paypal anunció que cancelará una inversión de 3.6 millones de dólares en Carolina del Norte como muestra de repudio a la ley discriminatoria y, en Mississippi, importantes corporaciones, entre ellas Tyson Foods, Nissan y Toyota, han expresado sus objeciones a la norma anti LGBT en ese estado, de acuerdo a The New York Times.
Estudiantes en California se movilizaron en favor de un plan de baños neutros en una escuela, y en contra de la discriminación. (AP)
La lucha contra la discriminación en general y, en lo específico, por el derecho de los homosexuales y transgénero a utilizar el baño según su identidad de género, está inscrita en el hondo conflicto cultural que experimenta Estados Unidos, y por ello será de larga duración. Con todo, poco a poco, las cortes, las legislaturas y los gobernadores han comenzado ya a revertir algunos de esos intentos de discriminación, y en los casos en los que se han impuesto leyes al respecto la presión es intensa.
Por ahora, el joven Grimm ha conseguido una victoria judicial que resonará poderosamente a escala nacional, y muy específicamente en su región en el ámbito de la igualdad de género en las escuelas. Y es justo allí, entre las nuevas generaciones, que una mayor y creciente actitud de respeto, apertura y tolerancia hacia la diversidad permitirá el cambio futuro a gran escala. Grimm es, en cierto modo, un nuevo y singular pionero en el cambio social necesario para abatir la discriminación.
