Pyongyang, el eje de una cumbre entre presidentes de China y Corea del Sur

Imagen de archivo del presidente surcoreano, Moon Jae-in, en el consejo de seguridad nacional en la Casa Azul en Seúl, Corea del Sur, el 29 de noviembre de 2017. La Casa Presidencial Azul/Yonhap vía REUTERS

Por Christine Kim y Ben Blanchard

SEÚL/PEKÍN (Reuters) - Limitar las ambiciones nucleares de Corea del Norte marcará la agenda del presidente surcoreano, Moon Jae-in, durante una visita esta semana a Pekín para romper el hielo tras el despliegue por parte de Seúl de un sistema antimisiles estadounidense que generó tensión con China.

Si bien tanto Corea del Sur como China comparten el objetivo de que Pyongyang desista de su carrera armamentista nuclear y deje de probar misiles de largo alcance cada vez más sofisticados, los líderes de ambos países no se han visto cara a cara para abordar cómo lograrlo.

A China le ha molestado particularmente el despliegue en Corea del Sur de un sistema antimisiles fabricado en Estados Unidos denominado Terminal High Altitude Area Defence (THAAD), ya que Pekín argumenta que su poderoso radar puede ver gran parte de China y no aliviará la tensión con Corea del Norte.

En su tercer encuentro del año con el presidente chino XiJinping el jueves, se espera que Moon confirme en Pekín el acuerdo chino-surcoreano de finales de octubre en el prometieron normalizar los intercambios y superar la disputa por el THAAD, que congeló el comercio y los negocios entre ambos países.

El distanciamiento por el THAAD ha minado el crecimiento económico surcoreano, especialmente la industria del turismo, dado que las visitas desde China se suspendieron y los vuelos chárter provenientes de Corea del Sur fueron cancelados.

Aunque Pekín aún objeta el THAAD, ha dicho que comprende la decisión de Seúl de desplegarlo. En una entrevista con la televisión estatal china difundida en la noche del lunes, Moon dijo que la presencia del THAAD era inevitable debido a la amenaza norcoreana pero aseguró que no sería usado contra China.

"Corea del Sur será extremadamente cuidadoso de ahora en adelante con que el sistema THAAD no sea invasivo de la seguridad de China. Corea del Sur ha recibido promesas de Estados Unidos varias veces al respecto", dijo Moon, quien agregó que los esfuerzos para llevar a Pyongyang a la mesa de negociación tendrán "buenos resultados" si Seúl y Pekín trabajan juntos.

Corea del Norte ha mostrado pocas señales de interés en participar de conversaciones formales. La televisión estatal local citó el martes al líder Kim Jong Un diciendo que debían desarrollar y fabricar más armas diversas para "derrotar completamente al enemigo".

Pyongyang probó el mes pasado lo que calificó como su misil balístico intercontinental más avanzado y Washington advirtió al liderazgo norcoreano que sería "completamente destruido" si estalla una guerra.