Putin se reúne con el líder checheno Kadírov tras la tormenta por sus comentarios sobre la paliza a un preso

El presidente ruso, Vladímir Putin, asiste a una reunión con el líder checheno Ramzán Kadírov en Moscú

28 sep (Reuters) - El presidente ruso, Vladimir Putin, se reunió el jueves con el líder checheno Ramzán Kadírov, según un reportero de la televisión estatal, tres días después de que Kadírov dijera que estaba orgulloso de su hijo de 15 años por golpear a un preso acusado de quemar el Corán.

Un breve vídeo publicado por el reportero de televisión Pavel Zarubin mostraba a los dos hombres intercambiando comentarios iniciales, sin ninguna referencia al episodio de la paliza que suscitó la condena incluso de algunos partidarios de la línea dura del Kremlin.

Putin dijo que había una "dinámica positiva" en Chechenia, en gran parte gracias a Kadírov y su equipo. Se mostró a Kadírov entregándole unos papeles de un archivo.

Putin ha dado rienda suelta a Kadírov para que dirija la región musulmana del sur como un feudo personal a cambio de mantenerla estable y leal tras las guerras de las décadas de 1990 y 2000 en las que intentó separarse de Moscú.

Kadírov ha cultivado la imagen de aliado despiadado de Putin y de animador agresivo de la guerra de Rusia en Ucrania, pero algunos comentaristas sugirieron que había cruzado la línea esta semana al respaldar el ataque de su hijo Adam contra el prisionero Nikita Zhuravel.

Publicó un vídeo en el que se veía al menor de los Kadírov pegando puñetazos y patadas a Zhuravel mientras el prisionero se encogía en una silla, y dijo estar orgulloso de su hijo por haber adquirido "ideales adultos de honor, dignidad y defensa de su religión".

La presunta quema del Corán no tuvo lugar en Chechenia, pero los investigadores rusos afirmaron que trasladaron a Zhuravel a la custodia chechena porque los musulmanes de allí se consideraban víctimas del incidente.

La paliza expuso a Putin a acusaciones de que había entregado a una persona de etnia rusa "para que lo devoraran los chechenos", dijo esta semana el antiguo escritor de discursos del Kremlin Abbas Gallyamov, ahora un duro crítico de Putin. Incluso los comentaristas de guerra pro-Kremlin describieron el episodio como un ultraje.

Kadírov, de 46 años, ha sido objeto de intensas especulaciones sobre su salud, y este mes han circulado rumores de que estaba muerto o en coma. La semana pasada publicó un post en Telegram en el que afirmaba que se encontraba bien y que el motivo de su viaje a un hospital moscovita era visitar a un tío enfermo.

(Información de Mark Trevelyan; editado por Alexandra Hudson; editado en español por Javi West Larrañaga)