Putin llega a la vecina Bielorrusia para una visita de dos días a un aliado clave

El presidente ruso Vladímir Putin, a la derecha, escucha al presidente bielorruso Alexander Lukashenko mientras caminan el jueves 23 de mayo de 2024 tras la llegada de Putin al aeropuerto internacional de Minsk, Bielorrusia. (Mikhail Metzel, Sputnik, foto compartida del Kremlin vía AP)

El presidente ruso Vladímir Putin llegó el jueves a Bielorrusia para una visita de dos días, subrayando sus estrechos lazos con un aliado vecino que ha sido fundamental en la ofensiva bélica de Rusia en Ucrania.

Putin ha iniciado su quinto mandato con varias giras por el extranjero: Recientemente viajó a China y el domingo llegará a Uzbekistán. Horas antes el jueves, el presidente ruso recibió en el Kremlin al rey de Bahrein, Hamad bin Isa Al Jalifa.

En Bielorrusia, Putin se entrevistará con su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko. Éste lo recibió en la pista y ambos sostuvieron una “breve conversación” en el aeropuerto, según informó el Kremlin. Lukashenko prometió hablar sobre “cuestiones de seguridad en primer plano, y mañana conversaremos sobre cuestiones económicas junto con nuestros colegas de los gobiernos”.

El gobernante bielorruso nombró el jueves a un nuevo jefe del Estado Mayor del país, una medida que, según analistas, pretende demostrarle a Rusia la máxima lealtad de su vecino y aliado.

Moscú utilizó a Bielorrusia —país que depende de préstamos rusos y energía barata— como base de operaciones en la guerra contra Ucrania, desplegando allí algunas de sus fuerzas desde territorio bielorruso. En 2023, Rusia también trasladó algunas de sus armas nucleares tácticas a Bielorrusia.

El general de división Pavel Muraveyka, nombrado jefe del Estado Mayor de Bielorrusia y primer viceministro de defensa, es conocido por amenazar públicamente a Polonia y Lituania, países vecinos miembros de la OTAN.

En octubre de 2023 dijo que Bielorrusia podría apoderarse de la llamada Brecha de Suwalki, una franja de tierra escasamente poblada de unos 100 kilómetros (60 millas) a lo largo de la frontera entre Polonia y Lituania. Vincula a Lituania, Letonia y Estonia con el resto de la OTAN y separa a Bielorrusia de Kaliningrado, un enclave ruso altamente militarizado sobre el mar Báltico que carece de conexión terrestre con Rusia.

Desde hace tiempo, analistas militares occidentales consideran que la Brecha de Suwalki podría convertirse en un punto álgido en cualquier enfrentamiento entre Rusia y la OTAN. Les preocupa que Moscú pudiera intentar apoderarse de ese corredor y dejar a las tres naciones bálticas aisladas de Polonia y otras naciones de la OTAN.

“El nombramiento de Muraveiko es un desafío abierto a Occidente”, declaró a The Associated Press el analista independiente bielorruso Valery Karbalevich.