Psilocibina, una droga psicodélica contra la depresión


La droga psicodélica psilocibina es un compuesto natural que se encuentra en algunos hongos y se ha estudiado como un posible tratamiento para la depresión durante años. Pero todavía no está claro cómo funciona exactamente en el cerebro y cuánto tiempo podrían durar los resultados beneficiosos.

En un nuevo estudio, los investigadores de Yale muestran que una sola dosis de psilocibina administrada a ratones provocó un aumento inmediato y duradero de las conexiones entre las neuronas. Los hallazgos se publicaron el pasado 5 de julio en la revista Neuron.

“No solo vimos un aumento del 10 por ciento en el número de conexiones neuronales, sino que también eran en promedio alrededor de un 10 por ciento más grandes, por lo que las conexiones también eran más fuertes”, dijo Alex Kwan de Yale, profesor asociado de psiquiatría y de neurociencia y autor principal del artículo.

Experimentos de laboratorio anteriores habían demostrado que la psilocibina, así como la ketamina anestésica, pueden disminuir la depresión.

La nueva investigación de Yale encontró que estos compuestos aumentan la densidad de las espinas dendríticas, pequeñas protuberancias encontradas en las células nerviosas que ayudan en la transmisión de información entre las neuronas. Se sabe que el estrés crónico y la depresión reducen el número de estas conexiones neuronales.

LA PSILOCIBINA, UNA PROFUNDA EXPERIENCIA MÍSTICA

Usando un microscopio de escaneo láser, Kwan y el primer autor Ling-Xiao Shao, fotografiaron las espinas dendríticas en alta resolución y las rastrearon durante varios días en ratones vivos.

Encontraron aumentos en el número de espinas dendríticas y en su tamaño dentro de las 24 horas posteriores a la administración de psilocibina. Estos cambios seguían presentes un mes después. Además, los ratones sometidos a estrés mostraron mejoras de comportamiento y un aumento de la actividad de los neurotransmisores después de recibir psilocibina.

Para algunas personas, la psilocibina, un compuesto activo en los “hongos mágicos”, puede producir una profunda experiencia mística. El psicodélico fue un elemento básico de las ceremonias religiosas entre las poblaciones indígenas del Nuevo Mundo y también es una droga recreativa popular.

Pueden ser los nuevos efectos psicológicos de la psilocibina en sí los que estimulan el crecimiento de las conexiones neuronales, dijo Kwan.

“Fue una verdadera sorpresa ver cambios tan duraderos de una sola dosis de psilocibina”, dijo. “Estas nuevas conexiones pueden ser los cambios estructurales que el cerebro utiliza para almacenar nuevas experiencias”. N

Con información de Yale.

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