Yahoo Noticias Estos son los principales temas que se van a tratar en la Cumbre del Clima COP29 de Bakú
La próxima conferencia de la ONU sobre el clima, la COP29, se celebra dentro de un mes en Bakú, la capital de Azerbaiyán. En una semana marcada por las mortíferas inundaciones en Europa del Este y por el huracán Milton en Estados Unidos, resulta evidente que la crisis climática sigue agravándose más allá de los esfuerzos por atenuarla.
¿Cuándo se celebrará la cumbre del clima?
Durante quince días, del 11 al 22 de noviembre, el mundo esperará que los líderes intensifiquen la acción por el clima y protejan mejor a quienes están en primera línea y sufren más las consecuencias.
La COP29 se anuncia como la 'cumbre de las finanzas', porque ha llegado el momento de que los países fijen un nuevo objetivo mundial para la financiación de la lucha contra el cambio climático. De cara a la COP30, que se celebrará en Brasil el año que viene, también tienen que presentar compromisos nacionales más firmes.
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Y después de algunas victorias en la COP28 celebrada en Dubai el año pasado -incluido el lanzamiento oficial de un nuevo fondo de pérdidas y daños para las víctimas del cambio climático-, los países en desarrollo están ansiosos por que se cumplan y mejoren los compromisos anteriores.
Un mes es mucho tiempo en los asuntos mundiales. El devastador conflicto de Oriente Medio y las elecciones estadounidenses de principios de noviembre influirán de diversas maneras en las negociaciones. Pero dados los plazos previstos, he aquí las cuestiones clave de cara a la Cumbre.
¿Qué se acordó en la COP28?
Tal y como exige el Acuerdo de París, que ha guiado la acción climática mundial desde 2015, el principal resultado acordado en la COP28 fue el primer balance mundial de la historia.
Por primera vez en una COP sobre el clima, el texto final nombraba los combustibles fósiles y pedía a todos los países que "abandonaran" este tipo de combustibles. A pesar de este avance, la decisión se alejó de la "eliminación progresiva" que muchos consideraban necesaria para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 ºC. También se pidió a los países que contribuyeran a triplicar la capacidad mundial de energías renovables para 2030.
Tras el histórico acuerdo alcanzado en la COP27 para crear un fondo de pérdidas y daños que compense de forma efectiva a los países vulnerables al cambio climático, la COP28 logró poner en marcha oficialmente el fondo. En Bakú aún deben concretarse los detalles antes de que el dinero empiece a llegar a los países necesitados el año que viene.
¿Por qué se la ha bautizado como la 'COP de las finanzas'?
Por primera vez en 15 años, los países tendrán que acordar un nuevo objetivo de financiación mundial, conocido como el nuevo objetivo colectivo cuantificado de financiación para el clima (NCQG, por sus siglas en inglés).
Así se actualizará el objetivo fijado en 2009, cuando los países desarrollados se comprometieron a movilizar 100.000 millones de dólares (91.400 millones de euros) al año de aquí a 2020 para ayudar a los países en desarrollo a mitigar el cambio climático y adaptarse a él. Una promesa que sólo lograron cumplir en 2022.
Con el recrudecimiento de la crisis, se calcula que la cantidad real de financiación para el clima que necesitan ahora los países en desarrollo oscila entre 500.000 millones de dólares y más de un billón de dólares al año. Los países en desarrollo se enfrentan a grandes retos para alcanzar el mínimo que están dispuestos a aceptar en un acuerdo y el máximo que los países desarrollados están dispuestos a asumir.
Además de la cifra total, en la COP29 habrá muchas discusiones sobre las condiciones del NCQG, como quiénes serán la base de donantes y los receptores, qué cantidad procederá de fuentes públicas y privadas y si será en forma de subvenciones o préstamos.
¿Cuál es la posición de la UE sobre la financiación de la lucha contra el cambio climático?
Los ministros de la UE aprobaron sus conclusiones sobre financiación climática a principios de esta semana, comprometiéndose a seguir movilizando colectivamente 100.000 millones de dólares al año hasta 2025 (unos 900.000 millones de euros), y a fijar un NCQG "ambicioso" para más adelante.
Se espera que el Consejo adopte su mandato de negociación final para la COP29 el 15 de octubre. En la actualidad, el texto sobre financiación de la lucha contra el cambio climático hace hincapié en que la financiación pública internacional debe ser su núcleo y proceder de una "base más amplia de contribuyentes, incluidos los países que sean capaces de contribuir".
Michael Bloss, portavoz de Clima y Política Industrial de Los Verdes en el Parlamento Europeo, dice a 'Euronews Green' que "100.000 millones de dólares al año no son ni de lejos suficientes".
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"Nuestra prioridad es clara: equilibrar la financiación entre mitigación, adaptación y pérdidas y daños, con objetivos provisionales estrictos", añade. "Las subvenciones deben sustituir a los préstamos para romper el ciclo de la deuda y desbloquear el verdadero potencial de desarrollo sostenible".
Queda por ver si el NGQG tendrá subobjetivos específicos para la financiación de la adaptación y de las pérdidas y daños. Lo primero es más probable, según Alden Meyer, asociado principal del Grupo de Reflexión sobre el Clima E3G. En los últimos años, los países en desarrollo han luchado para que el 50% de la financiación se destine a la adaptación, dada la urgente necesidad de adaptarse al cambio climático.
Sentar unas bases más sólidas
En el marco del Acuerdo de París también se acerca rápidamente la fecha límite para que los países presenten nuevas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés), que describan cómo van a frenar las emisiones.
Éstas deben renovarse cada cinco años, y la próxima ronda vence en febrero de 2025. Por tanto, la COP29 es un momento crucial para que los países suban el listón y se exijan mutuamente responsabilidades.
El Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés) señala que las NDC deben incluir objetivos sectoriales específicos, como metas concretas para pasar a sistemas energéticos y alimentarios libres de emisiones.
Durante un reciente evento de alto nivel, la 'troika' de presidencias -los EAU, Azerbaiyán y Brasil, anfitrión de la COP30- indicaron que sus NDC se anunciarán en la COP o a finales de año.
Pero a pesar de la retórica sobre "mantener vivo el objetivo de 1,5 ºC", Meyer afirmó que los líderes tenían poca información sobre cómo actuarán en relación con el balance mundial del año pasado.
"Me llamó la atención que las presidencias de la 'troika' no dijeran nada sobre reformar sus actuales intenciones de ampliar la producción y exportación de combustibles fósiles", declaró a la prensa durante una sesión informativa posterior. "Las tres tienen planes para aumentar drásticamente la inversión en ese sector". La COP29 tiene la ingente tarea de acercar la retórica a la realidad.
Convertir la ambición energética en acción
"Esta va a ser una COP de finanzas a la que nos dirigimos", afirmó Leo Roberts, experto en transición energética de E3G durante la misma sesión informativa. "Pero eso no significa que la energía ya no sea relevante; de hecho, hace que sea extremadamente importante que no se deje de lado".
Con la decisión sobre el balance mundial, la COP28 concluyó con una serie de esfuerzos mundiales a los que los países debían contribuir, entre ellos: triplicar la capacidad de energía renovable y duplicar la eficiencia energética para 2030; reducir progresivamente la energía de carbón; y abandonar los combustibles fósiles.
En su primera carta oficial a las partes, el Presidente designado de la COP29, Mukhtar Babayev, subrayó que los dos pilares de la cumbre serán aumentar la ambición y posibilitar la acción.
Según el último informe de la AIE, actualmente el mundo sólo está en vías de multiplicar por 2,7 la capacidad de las energías renovables de aquí a 2030, por lo que se necesitan más medidas y apoyo financiero en este frente.
¿Quién asistirá a la COP29?
Los líderes mundiales llegarán al estadio de Bakú para asistir a la Cumbre de Líderes Mundiales para la Acción Climática al comienzo de la COP, los días 12 y 13 de noviembre. Como en años anteriores, será una oportunidad para que los jefes de Estado se reúnan antes de que sus negociadores se pongan manos a la obra. Los nombres más importantes suelen confirmarse con mayor antelación.
Sin embargo, en una señal de que el evento será más reducido que la lista récord de más de 65.000 asistentes del año pasado, numerosos jefes de Finanzas han dicho que este año planean no acudir a la cumbre.
A pesar de centrarse en las finanzas privadas, los directores de Bank of America, BlackRock, Standard Chartered y Deutsche Bank no asistirán, según informa el 'Financial Times', y algunos argumentan que se trata de una "COP técnica" menos adecuada para las empresas. Al parecer, el rey Carlos tampoco asistirá a la COP29.
Sin embargo, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, dará la bienvenida a muchos más líderes mundiales, como la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, defensora de una acción climática más equitativa. Mottley, que ahora preside el grupo V20 de países vulnerables al cambio climático, aportará ideas más radicales para la reforma financiera en el marco de la Iniciativa de Bridgetown.
Defensores del clima
Organizaciones de la sociedad civil y defensores del clima viajarán también a Azerbaiyán, otro país petrolero que ha sido objeto de escrutinio por su historial en materia de derechos humanos.
"La acción climática debe ser holística, con la Justicia en su centro", añade Bloss, portavoz de Los Verdes de la UE. Esto incluye responsabilizar a Azerbaiyán, anfitrión de la COP, de su precaria situación en materia de derechos humanos y exigir plena libertad para que la sociedad civil y los activistas climáticos nacionales actúen sin restricciones".
