Presidentes de Panamá y Colombia conversan sobre la migración de retorno de norte a sur y energía

CIUDAD DE PANAMÁ (AP) — Los presidentes de los dos países que comparten la frontera selvática del Darién por la que han pasado miles de migrantes en los últimos años, Colombia y Panamá, se reunieron el viernes en la capital panameña para hablar de la migración de retorno pero también de asuntos energéticos.

El mandatario de Panamá, José Raúl Mulino recibió a su par colombiano Gustavo Petro en el Palacio de las Garzas en lo que estaba previsto que fuera un encuentro sobre “temas puntuales” de interés común, como la situación migratoria.

Ambos países enfrentan ahora las repercusiones de la política estadounidense iniciada con el regreso al poder en enero de Donald Trump de ejecutar deportaciones masivas. La migración que, por años, se originaba en países del sur del continente rumbo a Estados Unidos es ahora de retorno.

“Hemos abordado en detalle el tema migratorio. Sobre todo, teniendo en cuenta los problemas que nos acarrea a ambos países la migración al revés, como le llamo yo. La que viene bajando de norte a sur”, apuntó Mulino en declaraciones posteriores al encuentro con Petro, haciendo hincapié en que las personas en movilidad reciban un trato humanitario.

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Un día antes, Panamá afirmó que, hasta marzo, el flujo migratorio desde el sur del continente hacia el norte por el Darién había disminuido en un 97%. Sin embargo, el retorno de migrantes se incrementó en lo que va del mes y llegaron al país centroamericano 2.285 migrantes, en su mayoría, venezolanos.

Panamá acordó con el gobierno estadounidense la recepción de tres vuelos con migrantes deportados, entre los que había nacionales de otros países. Colombia, por su parte, tuvo un roce inicial con Trump al rechazar la llegada a territorio colombiano de aviones militares con deportados, alegando que el trato para los migrantes no era digno.

La migración, mencionó Petro tras la cita del viernes, va a tener “un crecimiento que puede llegar a 3.000 millones de personas en todo el mundo si los modelos del panel de expertos de Naciones Unidas dicen la verdad”. Relacionó este aspecto a la crisis climática y a que “la zona tórrida va a ver evaporar su agua” y “el agua va a quedar en el norte si no solucionamos el problema hoy”.

Con ese argumento, abordó el tema de la interconexión eléctrica, un proyecto que permitirá el intercambio de energía entre ambos países, y que para el mandatario colombiano está relacionado con la agenda migratoria. “En esa articulación entre Panamá y Colombia puede estar una buena parte de la solución mundial de la crisis climática”.

La Presidencia panameña había puesto sobre la mesa su propuesta de deportar a los migrantes venezolanos a la ciudad colombiana de Cúcuta para que luego éstos se trasladen a Venezuela.

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Panamá suspendió sus relaciones con Venezuela y retiró a todo su personal diplomático de ese país sudamericano en julio de 2024 pocos días después de que las autoridades electorales venezolanas proclamaran la victoria de Nicolás Maduro.

Los vuelos entre Panamá y Venezuela están suspendidos.

“Lo que pedimos es que se nos permita a Panamá llevarlos a Cúcuta que es un área fronteriza con Venezuela para que de ahí las autoridades venezolanas hagan lo que corresponde para permitir sus ingresos a su país”, dijo Mulino antes de la cita con Petro.

Pese a las expectativa del lado panameño, ninguno de los dos mandatarios mencionó después acuerdo algunos para usar a la ciudad de Cúcuta como puente para los migrantes venezolanos.

Petro se trasladará durante el fin de semana hacia Bocas del Toro, punto fronterizo con Costa Rica, donde busca impulsar la recuperación de restos de combatientes que lucharon en la Guerra de los Mil Días, un conflicto civil librado entre 1899 y 1902.

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“Se presume que en esta región existen fosas comunes con los restos de combatientes liberales que lucharon contra el gobierno conservador colombiano de la época, en un conflicto que culminó con la separación de Panamá de Colombia en 1903”, indicó el viernes la Presidencia colombiana en un comunicado.

El mandatario colombiano solicitará autorización para identificar los restos de combatientes colombianos durante reuniones con autoridades de la provincia Bocas del Toro y eclesiásticas.