El presidente del Consejo de Estado libio presenta una denuncia contra Debeiba

Trípoli, 14 nov (EFE).- El presidente del Consejo de Estado libio, Jaled al Mashri, presentó este lunes una denuncia ante el fiscal general contra el jefe del Gobierno Nacional de Unidad (GNU), Abdulhamid Debeiba, al que acusa de obstruir el trabajo de la institución e impedir a sus miembros celebrar una sesión prevista este lunes para aprobar la base constitucional que permitirá la celebración de elecciones.

En un discurso televisado, Al Mashri explicó que habría pedido la apertura de una investigación sobre la actuación de la Fuerza de Protección de la Constitución- afin al GNU- que rodeó su sede en la capital por órdenes "directas" de Debeiba e impidió el acceso a sus miembros, obligados a postergar la sesión para este martes.

En este sentido, el político acusó al primer ministro de dirigir un "gobierno de milicias" que busca controlar e imponer su opinión por la fuerza para impedir la unificación del poder ejecutivo, dividido actualmente en dos poderes enfrentados.

Por un lado, Fathi Bashagha, designado primer ministro en febrero por el Parlamento y basado en Sirte (centro) tras varios intentos fallidos de entrar en la capital.

Por otro, el gobierno de Debeiba, situado en Trípoli y reconocido por la comunidad internacional, que se niega a ceder el poder sin pasar por las urnas y defiende su legitimidad pese a que su mandato concluyó después de que las elecciones fueran suspendidas en diciembre.

Esta iniciativa surgiría como reacción a una posible reunión que iba a celebrarse este sábado en Turquía entre Al Mashri y el presidente del Parlamento de Tobruk (este), Aquila Salah, para consensuar el texto constitucional entre ambas instituciones aunque más tarde se desmintió dicho encuentro.

La embajada de Estados Unidos en Libia instó hoy a los dirigentes libios a resolver sus diferencias políticas a través del diálogo y advirtió de que la amenaza de la fuerza es "desestabilizante y socava los esfuerzos hacia la unidad nacional".

Días antes, el embajador estadounidense, Richard Norland, advirtió de que su país podría reconsiderar sus relaciones con actores e instituciones que retrasen y obstruyan el proceso político y advirtió que el "statu quo" "no es sostenible".

(c) Agencia EFE