Presidente de Colombia suma a canciller y a empresario a equipo de negociadores con FARC

BOGOTÁ, 20 mayo (Reuters) - La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, y un destacado empresario reforzarán el equipo del Gobierno en el diálogo de paz con la guerrilla de las FARC, en un esfuerzo para agilizar la negociación que busca poner fin al conflicto armado de más de medio siglo, dijo el miércoles el presidente Juan Manuel Santos. El anuncio se hizo al término de la reunión de la Comisión Asesora para la Paz y antes de que el equipo del Gobierno viaje a La Habana para iniciar un nuevo ciclo en la negociación de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con la que se busca acabar la confrontación que ha dejado más de 220.000 muertos. "La paciencia de los colombianos no es infinita y llegó el momento de las decisiones, el momento de trabajar más intensamente. No podemos desaprovechar esta oportunidad. No dejemos que pase el tren de la historia. El tiempo se volvió enemigo de la confianza en el proceso", dijo Santos en una declaración desde la sede de la Presidencia. "He decidido reforzar el equipo negociador en La Habana con la ministra de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, que seguirá ejerciendo como canciller, y también con el empresario, muy conocido por los colombianos, Gonzalo Restrepo", agregó. Restrepo fue presidente de Almacenes Éxito y actualmente pertenece a la junta directiva de la petrolera Ecopetrol. En los diálogos en Cuba, que han logrado más avances que todos los esfuerzos anteriores para la paz, las partes han llegado a acuerdos sobre desminado, para dar acceso a la tierra a los campesinos pobres, facilitar la transformación de la guerrilla en un partido político y combatir el narcotráfico. Sin embargo, todavía quedan pendientes complicados asuntos como la compensación a las víctimas y el fin del conflicto. Una vez que se alcance un acuerdo, los colombianos deben aprobarlo en una consulta o un referendo. Las FARC, que cuentan con unos 8.000 combatientes, declararon un cese unilateral e indefinido al fuego desde el 20 de diciembre pasado, lo que se evidenció en una reducción de la intensidad del conflicto. Pero el grupo rebelde que es considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, rompió la tregua en abril con un ataque en el que murieron 11 militares en una zona montañosa del sur del país y que desmoronó la confianza que un sector de la población tenía en la negociación que comenzó hace 30 meses. Aunque las FARC anunciaron después del ataque que mantendrían la tregua, Santos ordenó reanudar los bombardeos contra los campamentos de la guerrilla por lo que la negociación se cumple en medio de la confrontación. (Reporte de Luis Jaime Acosta; Editado por Javier López de Lérida)