Presidente checo propone que Grecia pague su deuda acogiendo centros de inmigración

PRAGA (Reuters) - Grecia podría pagar su deuda externa al acoger centros de deportación, dando a Europa otra opción para hacer frente a la crisis migratoria, dijo el domingo el presidente checo, Milos Zeman. Zeman, hablando en una entrevista con el canal checo de televisión Prima, dijo que la idea surgió de uno de sus asesores y lo llamó para contarle "una idea original que podría matar dos pájaros de un tiro". "Los centros de detención serían construidas en las islas griegas a donde serían deportados los inmigrantes procedentes de Europa (...) y Grecia, mediante el mantenimiento de estos centros de detención, pagaría su deuda externa, de otro modo incobrable", dijo. La Unión Europea celebrará el lunes una cumbre con Turquía sobre cómo gestionar la crisis migratoria. Alemania ha dicho que encontrar la manera de ayudar a Grecia, el punto de entrada principal para los refugiados en Europa, sería una prioridad. Zeman tiene un poder limitado pero ha sido muy asertivo sobre la cuestión migratoria. Ha dicho que la integración de las comunidades musulmanas es "prácticamente imposible" y calificó la afluencia de una "invasión organizada". El Ministerio de Asuntos Exteriores griego declinó hacer comentarios sobre las declaraciones de Zeman el domingo. El primer ministro griego Alexis Tsipras, atacando el domingo a las restricciones fronterizas que dieron lugar a atascos, dijo que Grecia presionaría a la solidaridad con los refugiados y pedirá una justa distribución de la carga entre los estados de la Unión Europea en la cumbre del lunes. Tsipras ha acusado a Austria y los países de los Balcanes de "arruinar Europa" al disminuir el flujo de emigrantes y refugiados se dirigen al norte de Grecia, donde unos 30.000 se encuentran ahora atrapados, a la espera de que Macedonia vuelva a abrir su frontera para que puedan ir a Alemania. "Europa está en una crisis nerviosa", dijo Tsipras al comité central de su partido de izquierdas Syriza. "¿Será una Europa del miedo y el racismo la que venza a una Europa de la solidaridad?" Los líderes de los países del centro de Europa se han mostrado escépticos sobre la capacidad de Grecia para limitar los emigrantes, muchos de los cuales huyen de la guerra en Siria y en otros lugares, y temen que Turquía no logre frenar el número de personas que cruzan el mar Egeo. Ellos han dicho que es importante elaborar un plan de emergencia para proporcionar ayuda a los países de los Balcanes a lo largo de la ruta de emigración.