El príncipe Harry perdió la batalla judicial por su protección policial en el Reino Unido
LONDRES.- El príncipe Harry perdió el miércoles un recurso judicial contra la decisión del Gobierno británico de retirarle la protección policial completa cuando se encuentre en Reino Unido.
El hijo menor del rey Carlos había interpuesto la demanda contra el Gobierno ante el Tribunal Superior de Londres después de que el Ministerio del Interior –el ministerio responsable de la policía– decidió en febrero de 2020 que dejaría de recibir seguridad policial personal inmediatamente al llegar a Reino Unido.
Harry, al igual que otros miembros de la realeza, había recibido protección de seguridad completa financiada con fondos públicos y proporcionada por el Estado antes de retirarse de sus obligaciones reales y trasladarse a California con su esposa estadounidense Meghan en marzo de 2020.
El juez Peter Lane indicó este miércoles en el Alto Tribunal que la decisión de proporcionar seguridad a Harry caso a caso no era ilegal, irracional ni injustificada.
En una audiencia en diciembre, la abogada de Harry había argumentado que una decisión caso por caso “conlleva una incertidumbre excesiva” para el príncipe y las personas a su cargo. Además, el duque de Sussex afirmó que su familia y él se habían visto en peligro durante sus visitas al país debido a la hostilidad contra él y su esposa en redes sociales y a la persecución constante de los medios.
Su abogado alegó que el equipo del gobierno que evaluó las necesidades de seguridad de Harry actuó de forma irracional y no siguió sus propios protocolos, que habrían requerido un análisis de riesgo sobre la seguridad del duque.
Por su parte, un abogado del gobierno argumentó que Harry recibió un trato justo y aún recibía protección en algunas visitas. Por ejemplo, una escolta lo acompañó en junio de 2021 cuando fue perseguido por fotógrafos tras asistir a un acto con niños con enfermedades graves en los jardines Kew del oeste de Londres.
El hijo menor del rey no fue demasiadas veces a Reino Unido desde que se mudó a Estados Unidos. En el último año solo ha realizado rápidas visitas para la coronación de Carlos III en mayo o a principios de febrero para visitar a su padre al que diagnosticaron un cáncer.
La cuestión de la seguridad es muy sensible para el príncipe Harry, que responsabiliza a la prensa y los paparazzis del accidente mortal de su madre, la princesa Diana, en París en 1997.
Gran parte de este proceso se desarrolló a puerta cerrada debido a la información confidencial de seguridad que se trataba.
Harry, de 39 años, ha roto con la tradición de la familia real al acudir a los tribunales para desafiar tanto al gobierno como a los tabloides en sus esfuerzos de que los editores asuman responsabilidades por perseguirlo durante toda su vida.
Otros casos
La demanda era uno de los seis casos que Harry ha planteado al Alto Tribunal. Tres estaban relacionados con sus despliegues de seguridad y tres se presentaron contra editoriales de tabloides acusados de hackear celulares y utilizar investigadores privados para buscar historias noticiosas sobre su vida.
En el primer caso que llegó a juicio, Harry logró una gran victoria el año pasado contra la empresa editora del Daily Mirror por acusaciones de acceso ilícito a teléfonos, lo que le valió un veredicto y finalmente un acuerdo sobre otras acusaciones pendientes de juicio. Aunque los términos del acuerdo no se hicieron públicos, la compañía debía reembolsarle todos sus gastos legales y estaba previsto que recibiera un pago provisional de 400.000 libras (505.000 dólares).
Hace poco retiró un caso por difamación contra el Daily Mail por un artículo sobre que Harry intentó ocultar sus esfuerzos de seguir recibiendo seguridad financiada por el estado.
Harry retiró el caso cuando un juez determinó que era más probable que perdiera en un juicio porque la compañía editora podría mostrar que los documentos emitidos en su nombre eran engañosos y que un artículo de febrero de 2022 reflejaba una “opinión sincera” y no era difamatorio.
Agencias AFP, AP y Reuters