Yahoo Noticias Porqué Miami-Dade no consigue arreglar el ascensor de esta estación del Metromover
María Hernández no tuvo más opción que subir los 49 escalones en una estación del Metromover en la que el ascensor lleva averiado un mes y la escalera eléctrica no funciona desde el otoño pasado.
“Es muy incómodo”, dijo el martes Hernández, limpiadora de casas, tras la subida de dos pisos hasta el andén de la estación Adrienne Arsht Center en Miami. “Y tengo problemas en los pies”.
Los problemas crónicos con ascensores y escaleras eléctricas averiados en el sistema de transporte público de Miami-Dade han resultado en pasajeros frustrados mientras el condado trata de gestionar los envejecidos aparatos y los proveedores privados contratados para mantenerlos.
E; Metromover, una red de vagones de transporte automatizados que serpentean por los distritos comerciales de Miami, y el Metrorail, que opera trenes hacia y desde la ciudad, usan vías elevadas. Estas estaciones necesitan ascensores, escaleras eléctricas y escaleras para llevar a los pasajeros a los andenes desde el nivel de la calle.
Escalera eléctrica del Metromover lleva un año averiada
Schindler, fabricante suizo de ascensores, tiene el contrato del condado para dar mantenimiento al equipo de la estación Arsht, así como a los otros ocho ascensores y escaleras eléctricas del transporte público cerrados por reparaciones, según un resumen que el Departamento de Transporte y Obras Públicas publicó el martes.
El problema de reparación más antiguo es una escalera eléctrica en la estación de Metromover de 11 Street, que quedó fuera de servicio en abril de 2022. Aunque su reparación está prevista para el 31 de julio, el resumen muestra que aún no hay piezas disponibles para el proyecto.
La escalera eléctrica de Arsht dejó de funcionar el 22 de octubre, según el resumen, y el ascensor se averió el 18 de abril.
Schindler informó en un comunicado que la mayoría de los más de 130 ascensores y escaleras eléctricas a los que presta servicio para el sistema de transporte público del condado funcionan correctamente. Las averías aisladas provienen de equipos que Miami-Dade se ha negado a sustituir, a pesar de las advertencias de la empresa que “están muy por encima de su vida útil”.
‘Equipos viejos y obsoletos’, dice Schindler
“Estamos esperando la aprobación del condado para sustituir este equipo viejo y obsoleto por modelos nuevos equivalentes que cumplan plenamente el código y ofrezcan a los pasajeros del Metromover un viaje mucho mejor, más fiable y más seguro”, dijo Kim LaCava, portavoz de Schindler.
La alcaldesa Daniella Levine Cava ha dicho que su administración está estudiando esta petición, al tiempo que presiona a Schindler para que acelere la solución de los problemas existentes. Dijo que el condado está considerando servicios de transporte y otras opciones de transporte público para que las personas que no pueden subir escaleras eviten algunas estaciones del Metromover por completo.
“Estamos trabajando con Schindler, obviamente, para que estas reparaciones se hagan rápidamente”, dijo Levine Cava a los reporteros el martes por la tarde frente a escaleras eléctricas en funcionamiento en la estación de transporte público Government Center. “Han hecho algunas propuestas para la sustitución de los ascensores. Tenemos que ver si es lo mejor. Obviamente, se trata de una gran inversión de capital... Si es necesario, lo haremos”.
La mayoría de las escaleras eléctricas y ascensores funcionan en el sistema de transporte público del condado, que se financia en gran parte a través de los impuestos sobre la propiedad y un impuesto especial sobre las ventas dedicado al transporte.
El Miami Herald visitó el lunes 45 escaleras eléctricas y ascensores del sistema Metromover y encontró seis que no funcionaban: ascensores en las estaciones de Arsht y 5 Street, así como cuatro escaleras eléctricas en las estaciones de Arsht, 11 Street, Financial District y School Board.
Los ascensores han sido una fuente de fricciones para Levine Cava. El año pasado, rescindió el contrato en todo el condado de Oracle, otra importante empresa de ascensores, tras las acusaciones de problemas de seguridad en los ascensores del Aeropuerto Internacional de Miami que gestionaba.
Oracle negó las acusaciones y calificó la medida de Levine Cava de favor a un sindicato que no había conseguido organizar a los trabajadores de Oracle. El contrato del MIA fue a parar a Schindler, que tiene una fuerza laboral sindicalizada en Miami.
Comparando las dos situaciones, Levine Cava dijo que cuestiones de seguridad provocaron la decisión sobre Oracle, mientras que Schindler solo enfrenta problemas con los retrasos en las reparaciones. Se le han pagado a Schindler más de $120 millones por un contrato del condado desde 2007 para ascensores y escaleras eléctricas en las estaciones de transporte público, PortMiami y otras instalaciones del condado.
Las declaraciones de Levine Cava ocurrieron tras las quejas en las redes sociales por los retrasos en las reparaciones de la estación Arsht. Un cartel en las puertas cerradas del ascensor daba como fecha de reparación a finales de abril; ahora dice que es el 15 de junio. El lunes, en Twitter, se vio a una pareja de ancianos subiendo las escaleras de la estación, con la mano de ella en la barandilla y pareciendo apoyarse en él.
‘Realmente me duele’, dice Levine Cava.
“Entendemos las dificultades”, dijo Levine Cava. “Realmente me duele verlo y leerlo”.
Por ahora, los anuncios en el Metromover advierten que las escaleras eléctricas y los ascensores están dañados en la estación Arsht y animan a los pasajeros que no puedan usar las escaleras a detenerse en otra estación.
La estación School Board está a unas seis manzanas y el ascensor funcionaba allí esta semana. La escalera eléctrica no.
Levine Cava dijo que su administración está estudiando la posibilidad de no contar con Schindler para adquirir piezas en el mercado abierto, así como comenzar a usar empleados del condado para dar mantenimiento a las instalaciones.
Un ascensor averiado supone el cierre de una estación de transporte público para personas que usan sillas de ruedas y andadores. “Ya estoy acostumbrado”, dijo Harold Smith mientras empujaba a su amiga Budisma Scott, en silla de ruedas al salir de un vagón del Metromover en Government Center.
Aunque los ascensores funcionan en esa estación, Smith dijo que está fatigado por enfrentar la suspensión de servicio cuando la pareja hace viajes en el transporte público por Miami desde su casa en Miami Gardens. “No puedo depender de este lugar”, dijo.
Hernández hace cuatro trasbordos en su trayecto de dos horas desde la limpieza de casas en Miami Beach, donde toma un autobús hasta la estación de Arsht para viajar en el Metromover hasta el Metrorail, y luego sube a otro autobús para su último tramo a casa, en la zona de West Kendall.
Yeda Braziller, que es niñera, también estaba tomando el Metromover hacia el Metrorail cuando subió las escaleras a toda prisa para tomar el siguiente vagón que se dirigía al downtown. La estación de Arsht da a una garaje de autobuses que conecta muchos de los barrios del norte del condado con el sistema Metromover.
Braziller solía trotar por las escaleras eléctricas para acelerar su llegada, pero ahora eso no es una opción. “Siempre pierdo el tren”, dijo.
