El popular pastor evangélico que encabezará una marcha con Bolsonaro y pedirá “cárcel” para el juez que bloqueó X

Jair Bolsonaro junto a su esposa, Michelle Bolsonaro, y el pastor Silas Malafaia, durante la manifestación en San Pablo
Jair Bolsonaro junto a su esposa, Michelle Bolsonaro, y el pastor Silas Malafaia, durante la manifestación en San Pablo - Créditos: @Nelson Almeida / AFP

RÍO DE JANEIRO.- El pastor evangélico brasileño Silas Malafaia sube la apuesta. Aliado del expresidente Jair Bolsonaro y organizador de un acto este sábado en San Pablo para pedir el juicio político del juez del Supremo Tribunal Federal (STF) Alexandre de Moraes, anticipa que pronunciará un discurso “durísimo” contra el magistrado que viene de bloquear la plataforma X en Brasil.

El popular líder religioso brasileño advirtió en una entrevista con LA NACION que el bolsonarismo está construyendo “una escalada” para que el Senado brasileño discuta el impeachment del juez del STF, némesis de Bolsonaro.

El pastor evangélico brasileño Silas Malafaia
El pastor evangélico brasileño Silas Malafaia

“Voy a denunciar su forma de actuar. [De Moraes] es un verdadero dictador, está violando la Constitución. El mundo sabrá que es una revuelta contra las ilegalidades, es el mensaje que queremos enviar”, dice el pastor, con más de 4,4 millones de seguidores en Instagram, horas antes de la manifestación.

El titular de la iglesia Asamblea de Dios Victoria en Cristo será junto a Bolsonaro uno de los principales oradores del acto que promete colmar la Avenida Paulista, en el feriado por el Día de la Independencia en Brasil.

Como en las manifestaciones callejeras de febrero pasado, en San Pablo, y abril, en la playa de Copacabana de Río de Janeiro, el bolsonarismo vuelve a apuntar sus cañones contra De Moraes, responsable en el STF de las investigaciones que más comprometen a Bolsonaro y su núcleo político, entre ellas la investigación por un intento de golpe de Estado el 8 de enero de 2023.

“El foco de este acto es pedir el impeachment. Será diferente a otros, porque todos los oradores van a pedirlo. Vamos a apuntar los cañones contra el juez”, asegura el pastor, en una charla en su oficina, en la zona oeste de Río.

El 7 de septiembre tendrá un contrapunto público entre el gobierno del presidente Luiz Inacio Lula da Silva y el bolsonarismo.

Poco antes de que miles de personas pidan su juicio político, De Moraes, bajo la lupa del mundo los últimos días por su pulso firme contra el magnate y dueño de X, Elon Musk, se mostrará junto a Lula en Brasilia, quien en un gesto de respaldo lo invitó al palco oficial para el desfile por el Día de la Independencia en la Explanada de los Ministerios.

“Indignadas”

Malafaia asegura que la suspensión de X, determinada el 30 de septiembre por el magistrado luego de que la red social se negara a nombrar un representante legal, acatar multas y suspender perfiles señalados por difundir desinformación, potenciará el acto del sábado.

Las personas están más indignadas, hubo 20 millones de personas cercenadas. Suspender X fue uno de los mayores errores de De Moraes, que ni sus amigos están de acuerdo”, agrega.

El pastor evangélico brasileño Silas Malafaia
El pastor evangélico brasileño Silas Malafaia

Según el líder religioso, el juez intentó “desviar la atención” al bloquear X, semanas después de que el diario Folha de S. Paulo revelara haber obtenido mensajes que muestran cómo el juez ordenó en 2022 la producción de informes en la justicia electoral para alimentar investigaciones del propio ministro en el STF contra bolsonaristas, en una maniobra considerada irregular por algunos especialistas.

Musk, adoptado como un referente por la derecha brasileña luego de los cruces protagonizados por el magnate y De Moraes desde abril, llegó a ser tildado como un “mito de la libertad” por Bolsonaro.

El juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil Alexandre de Moraes, en una audiencia en Brasilia. (AP/Eraldo Peres)
El juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil Alexandre de Moraes, en una audiencia en Brasilia. (AP/Eraldo Peres) - Créditos: @Eraldo Peres

Malafaia, en tanto, asegura que el empresario sudafricano es apenas “aliado circunstancial” en el enfrentamiento con el juez.

Pese a la insistencia del bolsonarismo para remover al magistrado, cualquier discusión sobre juicio político debería pasar por el Senado, donde su presidente, Rodrigo Pacheco, no ha dado indicios de que habilitará el trámite.

Estamos construyendo una escalada. Es cuestión de tiempo. Si el pueblo sale a la calle, y se indigna, no va a haber ningún Rodrigo Pacheco que aguante. Tendrá que ceder, y la hora está llegando”, confía el pastor, que dice no temer eventuales retaliaciones del juez.

Para mandarme a arrestar tiene que tener un motivo. No es una buena idea meterse con un líder evangélico, en un país donde los evangélicos son más de 30% de la población. No le tengo miedo”, desafía.

Apuntado habitualmente como vocero de Bolsonaro, quien es blanco de varias investigaciones en el STF y cualquier afronta directa al supremo podría valerle una orden de arresto inmediata, Malafaia niega que exista un discurso pactado “su amigo”.

Creo que él [por Bolsonaro] no va a decir nada [sobre De Moraes] en su discurso, porque está incluido en investigaciones. Pero yo no le comenté lo que diré en mi discurso. Es mi amigo, compañero, pero nunca combino nada con él, está enterándose por el periodismo que voy a pedir impeachment y cárcel para De Moraes”, asegura.

El expresidente brasileño Jair Bolsonaro, en la conferencia de la CPAC en el balneario Camboriú, Santa Catarina. (Evaristo Sa / AFP)
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro, en la conferencia de la CPAC en el balneario Camboriú, Santa Catarina. (Evaristo Sa / AFP) - Créditos: @EVARISTO SA

La policía brasileña se prepara para concluir las próximas semanas la investigación contra Bolsonaro por su presunta participación como autor intelectual de los ataques a las sedes de los tres poderes en Brasilia en enero de 2023. Las conclusiones de la investigación, con un eventual pedido de imputación, serán remitidas a De Moraes.

El pastor, quien califica de “mediocres” y “frágiles” las acusaciones contra Bolsonaro, niega que exista temor en el entorno del expresidente por una eventual orden de arresto, aunque calcula ese escenario. “[De Moraes] está midiendo la temperatura para ver si lo manda a arrestar a Bolsonaro, creo que lo está midiendo”, señaló.