Pillan al dueño de un restaurante chino introduciendo el cadáver de un ciervo en su restaurante

Los restaurantes chinos tienen, de manera injusta, muy mala fama. No son pocos los que insinúan que allí se cocinan todo tipo de animales y se hacen pasar por comida estándar: perros, gatos, ratas e incluso cadáveres humanos son algunos de los ingredientes ‘especiales’ de los que las malas lenguas hablan. Por eso cuando ocurren cosas como lo que acaba de pasar en un pequeño pueblo de Estados Unidos, la repercusión es internacional.

Sucedió el pasado domingo por la tarde, en Concord, Carolina del Norte. Una mujer que conducía camino a casa se topó con una extraña escena: un hombre había parado en el arcén e intentaba introducir en la parte de atrás de su vehículo el voluminoso cuerpo de un ciervo.

La mujer reconoció el coche de inmediato: se trataba del mismo que utiliza un restaurante chino de la misma localidad para repartir a oficinas y hogares. Imaginándose lo peor, la ciudadana decidió seguir a los repartidores.

Y pronto sus sospechas se hicieron realidad: el ‘furtivo’ se llevó el cadáver del ciervo hasta el aparcamiento de su restaurante. Allí entró un segundo en el local y salió con un ayudante y con varios cuchillos afilados. Ni cortos ni perezosos, empezaron a trocear al animal y a introducir los restos en el local.

La mujer, que contempló horrorizada la escena, decidió llamar a la policía. Los agentes se presentaron rápidamente en el lugar de los hechos y pillaron a los dos hombres con las manos en la masa. O mejor dicho, con en la carne de ciervo encima de la tabla de cortar de la cocina del restaurante.

Cuestionados por sus acciones, Sunny Chen, el hombre que recogió el cadáver, confesó que era el dueño del restaurante China Fun, y que se había encontrado con el cuerpo del ciervo, que debió morir atropellado. Según revela la cadena local WSOCTV, Chen se justificó diciendo que nunca había probado la carne de ese animal y que por eso se lo había llevado a sus dominios.

A pesar de repetir varias veces que solo él iba a consumir el ciervo, la policía sospecha que su verdadera intención era la de utilizar este exótico ingrediente para hacer platos que luego serviría a sus clientes.

Sunny Chen se ha disculpado y asegura que fueron sus amigos y familiares los que le dijeron que podía comerse el animal que se había encontrado por la calle. Ahora espera los resultados de una investigación del departamento de Salud Pública del condado de Concord, que podría multarle e incluso cerrar su restaurante.