Peleador dominicano afincado en Miami choca contra un muro de talento en Las Vegas. ¿Nace una estrella?

Michel Rivera llegó con toda la confianza del mundo a Las Vegas. Después de todo, este muchacho es uno de los grandes prospectos del boxeo, como lo indicaba su record inmaculado, pero el dominicano regresó a Miami con la primera marca negativa en su hoja de servicios como profesional.

El residente de la Capital del Sol se estrelló en una velada de Premier Boxing Champions con una noche inmensa de Frank Martin y cayó por decisión unanime de los jueces, perdiendo una oportunidad para acercarse a una cita por una faja del mundo en la Asociacion Mundial del Boxeo.

“Esto es lo que hago”, dijo Martin en el ring después del combate en el Hotel y Casino Cosmopolitan de la Ciudad del Pecado. “Me sentí bien esta noche. Vi algunas cosas que no aproveché, algunas oportunidades. Pero entré y hice el trabajo. Y nos llevamos la victoria”.

Protegido del rey welter Errol Spence Jr. y entrenado por el reconocido Derrick James, Martin se impuso en una eliminatoria a 12 asaltos sobre Rivera para establecerse como una amenaza legítima en las 135 libras, posiblemente la categoría mas repleta de talento y figuras.

Las puntuaciones oficiales fueron 120-107, 118-109 y 117-110 a favor de Martin, quien desplegó una verdadera clínica de boxeo y abrumó a Rivera con golpes que llegaban desde diferentes ángulos y hacían impacto en distintas zonas de su anatomía.

“Entré ahí para ganar, no vine aquí para perder”, apuntó Rivera. “Me sentía bastante bien hoy, pero en el cuarto o quinto asalto, creo que empecé a sentir los efectos del recorte de peso. No pongo excusas, pero soy un tipo grande para la división”.

El combate estaba prácticamente igualado sobre el papel, ya que ambos se consideraban boxeadores dotados de un talento natural y de una gran destreza.

Sin embargo, Martin no tardó en demostrar que está un nivel por encima de Rivera en cuanto a rapidez y habilidad.

Ninguno de los dos asestó muchos golpes, pero Martin hizo valer los suyos, eligiendo los momentos oportunos para lanzar combinaciones explosivas a la cabeza y al cuerpo cuando lo deseaba. Una de ellas derribó a Rivera (24-1, 14 KOs) en el séptimo asalto.

Rivera, cada vez más frustrado y sin poder hacer ajustes, tuvo algunos buenos momentos, pero nunca fue capaz de asestar golpes de forma consistente y solo conectó 67 en toda la pelea, apenas 5.6 por asalto frente a los 14.5 de Martin, según el registro de CompuBox.

“Soy bastante rápido, pero tienes que ser más rápido para pelear con un tipo como éste”, dijo Rivera. “Esta noche he sido demasiado lento. Intenté usar mi jab para mantenerlo alejado de mí. Hoy ha sido mejor que yo. No voy a quitarle nada. No quiero aprender a perder. Voy a trabajar duro para volver a ganar. No quiero que perder me parezca normal. Trabajo para ganar”.

Martin ofreció una actuación virtuosa que ahora lo coloca en la conversación de los mejores del peso ligero, donde pululan hombres importantes desde Vasyl Lomanchenko a Devin Haney, desde Ryan García hasta Isaac Cruz, por mencionar algunos nombres.

La pelea fue anunciada como eliminatoria por el título de la AMB, lo que significa que Martin está ahora en una posición más fuerte para desafiar a los mejores, aunque se espera que Haney, el campeón indiscutible, defienda sus títulos contra Lomachenko el año que viene.

Por otra parte, Davis, titular secundario de la AMB, ha dicho que se enfrentará a Ryan García si derrota al también dominicano Héctor García el 7 de enero en un choque de alto riesgo.

Sin embargo, no podrán evitar a Martin durante mucho tiempo, sobre todo después de su gran actuación del sábado por la noche. El púgil de Indianápolis, de 27 años, cree que estará listo cuando llegue el momento.

“Queremos enfrentar a los mejores. Estamos listos para comer’‘, recalcó Martin. “Los queremos a todos. Gervonta Davis, Devin Haney. Podemos conseguir a cualquiera de los mejores. Estamos preparados. Veo a Rolly [Romero] aquí. Rolly, hombre, podemos hacerlo también. Hagamos que suceda, hombre”.