La pelea del año no deja a nadie satisfecho y todo apunta a que habrá revancha entre Bivol y Beterbiev

Nadie ha quedado satisfecho, ni los propios organizadores. Cuando se anunció el resultado de decisión mayoritaria a favor de Artur Beterbiev, muchos corrieron a gritar la palabra “robo’’ en contra del perdedor Dmitry Biviol, quien cedió su corona ante el nuevo rey absoluto de las 175 libras.

Esperado desde hace años, el combate celebrado en Arabia Saudita vivió a la altura de las expectativas, pues se trató de una batalla que contó con todos los ingredientes mejores del boxeo: tuvo agresión y técnica, ataque frontal y defensa férrea, drama.

Sin embargo, el veredicto donde un juez vivió empatada la pelea y otros dos se decantaron por Betetbiev levantó polvaredas en los corrillos del deporte y hasta el propio gestor de la velada, su majestad Turki Alalshik, consideró que Bivol debió ganar al menos por dos rounds.

“Me siento mal’’, declaró Beterbiev tras el combate. “Hoy no lo he hecho bien. No me ha gustado este combate, pero algún día lo haré mejor. Por supuesto, es un combate difícil porque Dmitry también fue campeón del mundo. Tiene buenas habilidades, quizá mejores que yo’’.

El choque resultó como una marea, con un Bivol que dominó claramente los tres primeros rounds del combate antes de que Beterbiev aplicara más presión en el intermedio y luego se compartieran varios asaltos que resultaron en extremo difíciles de puntuar en las boletas.

Para el décimo asalto, en la esquina de Beterbiev le gritaron que debía ganar por nocaut si deseaba conquistar las cuatro fajas por primera vez desde que en el 2000 lo hiciera Roy Jones Jr. y el daguestaní volvió a la carga para cerrar mejor.

Al término de los 12 asaltos, las tarjetas oficiales daban 115-113 y 116-112 a Beterbiev, y un juez daba el combate por empatado a 114-114, y aunque Bivol tomaba el camino más caballeroso y reconocía el triunfo de su oponente, el malestar se le reflejaba en el rostro.

“Enhorabuena a Artur y a su equipo, se lo merece’’, indicó el perdedor, quien se mostró muy dudoso cuando le preguntaron si se veía ganador del encuentro. “No lo sé. Hice mi trabajo. Pensé que podía hacerlo mejor. Siempre puedo mejorar. Ganó él. ¿Qué podía decir?’’.

Lo cierto es que desde las autoridades deportivas de Arabia hasta las tertulias de los más sencillos fanáticos, la palabra revancha de repite con mucha fuerza y Alalshik ya indicó que la buscará con todas sus fuerzas - y recursos- para algún momento del 2025.

“¿Por qué no? Por supuesto, si tengo la oportunidad de hacer la revancha, la tomaré’’, agregó Bivol. “Mi sueño es ser indiscutible. Eso no ha cambiado’‘.