Pekín y ciudades del norte de China impulsan la recuperación tras el tifón Doksuri

Por Liz Lee

PEKÍN, 1 ago (Reuters) - Pekín y las ciudades cercanas intensificaron el martes las labores de rescate y recuperación tras las lluvias e inundaciones generalizadas provocadas por los restos del tifón Doksuri, que interrumpieron el suministro energético y de alimentos y se cobraron la vida de al menos 20 personas.

El distrito de Fangshan, en Pekín, dijo que desplegaría helicópteros para llevar alimentos, agua potable y suministros de emergencia a los pueblos de las zonas montañosas que han quedado aislados.

En la cercana Tianjín, donde la lluvia se ha vuelto intermitente, 35.000 personas han sido evacuadas de sus hogares y el gobierno local fortificó las orillas de los ríos e intensificó la inspección y reparación de las líneas eléctricas, de agua y de comunicaciones.

Meituan, el gigante del reparto de comida a domicilio, también añadió personal y amplió los horarios de entrega, ya que los pedidos de verduras, carne y huevos aumentaron un 50% en su aplicación y las compras en general aumentaron un 20%, según medios.

El número de víctimas mortales en Pekín aumentó a 11 el martes y 13 personas seguían desaparecidas, mientras que en la vecina provincia de Hebei, nueve personas murieron y seis estaban desaparecidas.

El presidente, Xi Jinping, exigió una búsqueda exhaustiva y esfuerzos de rescate para los desaparecidos o atrapados, dando instrucciones a las autoridades para minimizar las víctimas y restablecer las condiciones de vida a la normalidad tan pronto como sea posible, informaron medios estatales.

El Ministerio de Finanzas también anunció que destinaría 110 millones de yuanes (15 millones de dólares) a las labores de rescate en la región de Pekín-Tianjín-Hebei.

Doksuri, una de las tormentas más fuertes que han azotado China en años, se debilitó a medida que se adentraba en el país y descargó precipitaciones ininterrumpidas en las ciudades del norte durante unos días. Las autoridades han advertido que persisten los riesgos de nuevas inundaciones y otros desastres geológicos.

El martes se preveían tormentas localizadas y fuertes vientos en Pekín, Tianjín y Hebei, según la cadena estatal CCTV, mientras las precipitaciones se prolongaban por cuarto día consecutivo.

Los ríos se han desbordado hasta alcanzar niveles peligrosos, lo que ha obligado a Pekín a utilizar un embalse de almacenamiento de agua por primera vez desde su construcción hace 25 años. Hasta el lunes por la noche, la capital china había precintado más de 100 rutas de montaña y evacuado a más de 52.000 personas de sus hogares.

Varias líneas de metro de la capital, incluidos los trenes de los suburbios occidentales, se suspendieron el martes. El distrito de Mentougou, en el oeste de Pekín, sufrió daños considerables un día antes, después de que las lluvias torrenciales convirtieran las carreteras en ríos, arrastrando los coches.

Casi 400 vuelos fueron cancelados el martes y cientos sufrieron retrasos en los dos aeropuertos de Pekín, según la aplicación de seguimiento Flight Master.

Pekín registró una media de 260 mm de precipitaciones entre el sábado y la madrugada del lunes, siendo el embalse de Changping Wangjiayuan el que más registró, con 738,3 mm.

El gobierno de la ciudad dijo que las precipitaciones de los últimos días han batido los récords de una fuerte tormenta de hace 11 años. En julio de 2012, Pekín fue azotada por lo que entonces era la tormenta más fuerte desde la fundación de la China moderna, con la ciudad recibiendo 190,3 mm de lluvia en un día, afectando a más de 1,6 millones de personas.

En Hebei, las precipitaciones acumuladas entre el sábado y el lunes en una estación meteorológica local superaron la cantidad habitual registrada en medio año, con 1.003 mm en el periodo de tres días. La precipitación media anual en el condado donde se encuentra la estación es de 605 mm.

Más al oeste, en Shanxi, un total de 42.211 personas de la provincia habían sido reubicadas hasta el lunes.

Doksuri arrasó la costa de Fujian la semana pasada, causando un perjuicio económico directo de 14.760 millones de yuanes (2.060 millones de dólares) a la provincia sudoriental y afectando a casi 2,7 millones de personas, con cerca de 562.000 evacuados y más de 18.000 casas destruidas, según medios estatales.

(1 dólar estadounidense = 7,1655 yuanes)

(Reporte de Liz Lee, Ryan Woo y las redacciones de Pekín y Shanghái; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)