El pedido de detención a Evo Morales: "Es un disparate", dijo Eugenio Zaffaroni, su abogado

El exjuez de la Corte Suprema es uno de los defensores del expresidente, acusado de terrorismo

LA PAZ (AP).- Tras conocerse la noticia del pedido de detención del expresidente de Bolivia Evo Morales, asilado en la Argentina desde diciembre tras renunciar a su cargo días después de las elecciones presidenciales denunciadas por fraudulentas, sus abogadosEugenio Raúl Zaffaroni y Raúl Gustavo Ferreyra emitieron un comunicado en el que aseguraron que la imputación constituye la enésima evidencia "del estado policial de Bolivia".

"Las pruebas no existen, la acusación fiscal es un disparate, igual que el pedido de detención. No hay cargo penal alguno que deba incriminar al expresidente, nuestro defendido", indicaron en el texto difundido anoche Ferreyra y Zaffaroni, exjuez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Asimismo destacaron que "Morales lucha por la recuperación del Estado constitucional y la democracia" y afirmaron: "El peso de nuestras razones despeja los señalamientos despreciables, como son la imputación y el pedido de detención".

Ayer la fiscalía boliviana abrió un proceso al expresidente por supuesto terrorismo y pidió su detención preventiva al acusarlo de coordinar bloqueos en ciudades importantes tras la convulsión política y social que vivió el país andino el año pasado, tras los comicios en los que se presentó, salió ganador y fueron denunciados de irregulares.

En un comunicado de prensa, el Ministerio Público informó que después de investigaciones "se evidenció" que el exmandatario se comunicó con un exdirigente de su partido político desde México, el 14 de noviembre, primer país que lo recibió tras salir de Bolivia. El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, presentó ante la fiscalía un video en el que se escucha presuntamente a Morales instruir al dirigente bloquear las ciudades para que no pasen alimentos durante las protestas.

Por su parte Morales rechazó la imputación y denunció "una persecución política" por parte del gobierno interino de la presidenta Jeanine Áñez, al que considera "de facto". "De manera ilegal e inconstitucional, la Fiscalía de La Paz pretende imputarme por terrorismo con un audio alterado y sin ser notificado", agregó en su cuenta de Twitter.

El exmandatario renunció el 10 de noviembre a la presidencia después de casi 14 años de estar al mando de Bolivia luego de las protestas callejeras generadas tras acusaciones de fraude en las elecciones presidenciales de octubre en que Morales, tras una maniobra para volver a presentarse pese a perder un referéndum, buscaba un nuevo mandato. Al final los comicios fueron anulados.