Peña y Alegre pelearán la presidencia en Paraguay con un oficialismo polarizado

Asunción, 19 dic (EFE).- El economista oficialista Santiago Peña y el opositor liberal Efraín Alegre se convirtieron en los dos principales candidatos a la Presidencia de Paraguay para las elecciones generales de abril de 2023, después de unos comicios internos que dejaron al gobernante Partido Colorado sumido en la polarización.

Respaldado por el movimiento Honor Colorado, del exmandatario Horacio Cartes (2013-2018), Peña se impuso en las internas a Arnoldo Wiens, de la facción Fuerza Republicana, afín al presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez.

Cartes, a su vez, conquistó la jefatura del Partido Colorado, que disputaba con el actual jefe de Estado.

Peña, quien obtuvo 51,60 %, según los resultados que arroja el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) con un 99,87 % de las mesas escrutadas, tendrá como desafío cerrar las brechas de una campaña feroz entre los colorados.

De esa unidad dependerá, primero, su llegada al poder, y, en segundo lugar, que pueda alcanzar en el Congreso y las gobernaciones el apoyo de sus hasta ahora competidores oficialistas que confirmaron el domingo sus candidaturas para abril próximo.

Los resultados preliminares de la votación interna señalan que, para el caso del Senado, las 45 candidaturas coloradas quedaron divididas: 23 para el movimiento de Cartes y 22 para el de Abdo Benítez.

Otro es el panorama en las gobernaciones, donde se anticipan, con las cifras preliminares, que 10 de las 17 candidaturas pertenecen a la Fuerza Republicana.

"Aquí el que tiene que empezar a articular un discurso de unidad, pero en serio es Honor Colorado", afirmó este lunes el expresidente Nicanor Duarte (2003-2008), cercano a Abdo Benítez, y quien advirtió que la "soberbia" puede llevar a los cartistas a "grandes dificultades".

Duarte, en declaraciones a la Radio Monumental, relató que en las elecciones generales de 2018 -en las que Abdo Benítez se impuso con una ventaja del 2 %-, la oposición no había sumado en sus internas más de 600.000 votos.

Sin embargo, en la votación nacional, el entonces candidato Efraín Alegre llegó a 1,2 millones de votos.

Justamente Alegre, quien el domingo resultó elegido por tercera vez candidato presidencial, esta vez por la Concertación Nacional -la coalición de movimientos de oposición-, tendrá el desafío de capitalizar los votos de la fragmentación oficialista.

Alegre, quien también es presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PRLA), tiene como fórmula a la vicepresidencia a la exministra Soledad Núñez.

El trabajo de la Concertación Nacional será "armar un consenso", dijo a EFE el politólogo Guzmán Ibarra, quien consideró que esto resulta "bastante complejo".

Ibarra señaló que en Paraguay "la excepción" es que el Partido Colorado pierda una elección, especialmente porque tiene un piso "bastante alto", que estimó en cerca del 40 % del electorado.

Para los comicios de abril se han postulado, además, el excanciller Euclides Acevedo, del Movimiento Nueva República, y el exfutbolista José Luis Chilavert, del Partido de la Juventud.

(c) Agencia EFE