Pastelería de Belfast no discriminó al rechazar un pastel con inscripción gay, según sentencia del Tribunal Supremo

LONDRES (Reuters) - El máximo tribunal británico dijo el miércoles que la negativa de una pastelería de Irlanda del Norte a realizar un pastel con un eslogan pro-gay no fue discriminatoria, en un fallo elogiado por el principal partido conservador local pero criticado por el cliente, un activista por los derechos homosexuales.

La pastelería Ashers Baking de Belfast fue condenada como culpable de discriminación en 2015, por negarse a hacer un pastel para un cliente con glaseado que debía decir "Apoyen el Matrimonio Gay" debido a las creencias cristianas de los dueños.

La pastelería perdió una apelación en los tribunales locales en 2016, pero la Corte Suprema, el máximo órgano judicial del Reino Unido, anuló el miércoles esa decisión diciendo que la objeción de Ashers Baking era con el mensaje del pastel, no con alguna característica del mensajero, o cualquiera con el que estuviera asociado.

"La objeción fue a que les pidieran promocionar el mensaje de la tarta", dijo Brenda Hale, presidenta de la Corte Suprema, quien agregó que la conclusión de ninguna manera reduce la necesidad de proteger a los homosexuales y a las personas que apoyan el matrimonio gay.

La corte dijo que la situación era más parecida a que le pidan a un negocio de impresión católico que imprima panfletos promoviendo un mensaje ateo.

Gareth Lee, el activista que defiende los derechos homosexuales que había encargado el pastel, dijo en reacción al fallo del miércoles que era "un ciudadano de segunda clase" en Irlanda del Norte, el único lugar del Reino Unido donde no está permitido el matrimonio de personas del mismo sexo.

Pero el fallo fue elogiado por el conservador Partido Democrático Unionista (DUP), un partido que ha bloqueado los intentos por legalizar el matrimonio homosexual en la región.

En tanto, Daniel McArthur, dueño de la pastelería junto a su mujer Amy, dijo que el dictamen protegía la libertad de expresión y de conciencia para todos.

"Siempre supimos que no habíamos hecho nada malo al rechazar esta orden", dijo McArthur a periodistas fuera de la corte.

(Información de Padraic Halpin en Dublín, Amanda Ferguson en Belfast y Sarah Young en Londres; traducido por Lucila Sigal)