El papa Francisco cambia de planes repentinamente para visitar una comunidad diferente en Roma

Un grupo de personas se reúne detrás de unas vallas frente a un bloque de apartamentos en Casal Bertone, en el extremo este de Roma, donde se esperaba la visita del papa Francisco, el jueves 6 de junio de 2024. (AP Photo/Andrew Medichini)

ROMA (AP) — El papa Francisco se escabulló el jueves del Vaticano para reunirse con miembros de una parroquia local de Roma, como parte de su nueva iniciativa de sesiones sorpresa de oración papal, en preparación para el jubileo del próximo año.

Las cerca de 30 familias que se reunieron con Francisco en el patio de un edificio en el vecindario de Palmarola, en el extremo occidental de la ciudad, ciertamente quedaron sorprendidas, especialmente porque se esperaba que Francisco asistiera a la misma hora a otra comunidad parroquial del otro lado de la ciudad.

Aparentemente, Francisco cambió de planes en el último minuto debido a que se había difundido la noticia de que planeaba visitar un complejo de apartamentos en Casal Bertone, un vecindario de clase media en el extremo este de Roma. De hecho, la ciudad de Roma colocó vallas policiacas para contener a los fieles, había plantas decorando el lugar, y los equipos de los medios de comunicación ya estaban ahí, solo para que el papa finalmente no asistiera.

Matteo Bruni, vocero del Vaticano, no habló del cambio de planes en un comunicado emitido la tarde del jueves, junto con una foto del papa con las familias de la parroquia con las que sí se reunió. Solo dijo que Francisco había ido al vecindario de Palmarola para reunirse con 30 familias que pertenecen a la parroquia de Santa Brigida di Svezia para la tercera ronda de sus encuentros de la “escuela de oración”.

A diferencia de las típicas visitas parroquiales, en las que las comunidades eclesiásticas se preparan durante meses para recibir al papa, o de los viajes al extranjero, cuidadosamente preparados y que requieren protocolos diplomáticos bilaterales, estas reuniones de oración son informales y espontáneas.

Tras batallar con sus problemas de salud durante gran parte del invierno, Francisco, de 87 años, ha vuelto a seguir un programa bastante sólido de encuentros fuera del Vaticano. Recientemente, se reunió con grupos de sacerdotes y laicos en distintas partes de Roma, y recientemente hizo viajes diurnos a Venecia y Verona, con planes de realizar visitas a Trieste y a la reunión del Grupo de los Siete, cerca de Bari.