Una pantera de Florida tuvo tres crías, pero la tragedia no tardó en alcanzarlas
Dos cachorritos de la pantera de la Florida, una especie considerada en peligro de extinción, fueron atrapados en la madriguera en que vivían y devorados de una forma brutal, reportó la Comisión de Pesca y Conservación de la Vida Silvestre de la Florida (FWC).
Los humanos representan la mayor amenaza para las panteras de la Florida, pero lo ocurrido fue algo que parece haber sido diferente.
La hipótesis más probable es que los atacó un oso o quizás otra pantera cuando la madre los dejó solos y salió a cazar, según dijo Dave Onorato, científico del Instituto de Investigaciones Pesqueras y de la Vida Silvestre de la FWC.
“Las crías se encontraron cerca del área donde estaba la cueva donde nacieron. La evidencia de los daños es consistente con el ataque de un depredador”, le dijo el experto a McClatchy News.
Se sospecha que los dos cachorros fueron atacados el mismo día por el mismo depredador, agregó Onorato.
La muerte se descubrió el 3 de septiembre en el Área de Vida Silvestre Okaloacoochee Slough, a unas 120 millas al noroeste de Miami, dijeron autoridades de la FWC.
Biólogos estatales habían visitado a los tres cachorros —un macho y dos hembras— en agosto cuando tenían semanas de nacidos, y realizaron algunos trabajos, como hacerles biopsias e instalarles microchips.
Los cachorros macho y hembra murieron cuando solo tenían cuatro semanas y media de nacidos, de acuerdo con la FWC.
Solo el 32% de los cachorros de panteras de la Florida sobreviven el primer año, dijo la FWC. Los expertos no han determinado aún la principal causa de muerte, pero el ser atacados por otros animales es algo común, dijo Onorato.
La principal causa de muerte entre las panteras adultas de la Florida son los atropellos por vehículos.
“Los cachorros son vulnerables a una edad temprana y no se pueden defender subiéndose a árboles”, dijo Onorato.
“Cada madriguera o cueva es un poco diferente. En la que los encontramos tenía varios espacios, algunos más escondidos que otros. Pero, dado que los muchos depredadores usan el olfato para detectar a sus presas, esconderse en la cueva tal vez no fue suficiente para estar a salvo”.
Investigadores estatales han encontrado unos 524 cachorros de panteras en los 32 últimos años.
Por lo general, las crías comienzan la vida acompañando a la madre en sus recorridos fuera de la madriguera a las ocho semanas de nacidos, apuntaron los expertos.
Traducción de Jorge Posada