Panorama de la semana en el Oriente Medio

Palestinos contemplan la destrucción tras una incursión aérea israelí, Rafah, Franja de Gaza, 9 de febrero de 2024. (AP Foto/Fatima Shbair)

La violencia ha continuado esta semana en la Franja de Gaza, así como en el Oriente Medio en general. El gobierno de Estados Unidos presiona a favor de un cese de fuego prolongado entre Israel y Hamás, hasta ahora sin éxito. Un panorama de la situación:

ISRAEL DICE QUE SEGUIRÁ COMBATIENDO EN GAZA

Israel dijo el viernes que continuará su invasión de la Franja de Gaza y entrará en la ciudad sureña de Rafah para desarraigar a Hamás. Más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes del territorio están hacinados en esta ciudad en la frontera con Egipto, y no está claro adónde pueden ir. Egipto no acepta el desplazamiento de palestinos a su territorio, al tiempo que se ha ordenado la evacuación de buena parte del resto de la Franja, que es escenario de batallas encarnizadas entre Israel y Hamás.

La situación en Rafah es catastrófica: la gente está hacinada, muchos viven en carpas, no hay suficiente comida, electricidad ni agua y las incursiones israelíes matan gente casi a diario. El sábado murieron 28 personas, y la cifra de palestinos muertos supera los 28.000 desde el inicio del conflicto, según el ministerio de salud, a cargo de Hamás.

BRECHA ENTRE ISRAEL Y ESTADO UNIDOS

La ofensiva israelí en Rafah ha ampliado la brecha con Estados Unidos. Washington quiere que Israel negocie un cese de fuego con Hamás, lo que permitiría el regreso de los rehenes israelíes y a la vez ayudaría a proteger a los civiles en la Franja de Gaza. El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu desairó al secretario de Estado estadounidense Antony Blinken, quien viajó a Jerusalén con ese mensaje a principios de la semana; posteriormente, Netanyahu en conferencia de prensa dijo que no habría cese de fuego y que Israel combatiría hasta lograr la “victoria total”.

El presidente Joe Biden el jueves calificó la actitud de Israel de “desmedida” y que “debe ponerse fin” a los padecimientos de los civiles. Desde el inicio de la guerra, estas fueron quizás las críticas más severas de Biden, quien en general apoya la campaña israelí para destruir a Hamás.

Israel lanzó su asalto a la Franja de Gaza después que milicianos palestinos mataron a 1.200 personas en poblaciones del sur de Israel y secuestraron a 250 el 7 de octubre. Poco más de 100 rehenes israelíes fueron canjeados por presos palestinos en noviembre. Un centenar sigue en poder de Hamás; se cree que el resto han muerto.

LA REGIÓN SIGUE EN EL FILO DE LA NAVAJA

El Oriente Medio sigue en el filo de la navaja al continuar los enfrentamientos entre Estados Unidos y grupos armados aliados de Irán. El mando militar estadounidense dijo que el viernes que lanzó una nueva serie de ataques contra los hutíes en Yemen, sus drones y sus sitios de lanzamiento de misiles con los que atacan la navegación. Los hutíes, respaldados por Irán, controlan una buena parte del norte de Yemen. Han atacado la navegación comercial en el mar Rojo, una de las rutas más transitadas del mundo, en el intento de presionar a Israel para que desista de su campaña en Gaza.

Estados Unidos y Gran Bretaña han bombardeado a los hutíes con el fin, dicen, de proteger la libertad de comercio y navegación en alta mar. Estos ataques hasta ahora no han disuadido a los hutíes, que lanzaron misiles a dos buques el miércoles.

Por otra parte, un dron estadounidense mató a un comandante de milicia iraquí en Bagdad el jueves. Estados Unidos dijo que el comandante de Kataib Hezbollah era responsable “directo de planificar y participar en ataques” a efectivos estadounidenses en la región. Kataib Hezbollah es una de varias milicias en la región respaldadas por los gobernantes de Irán. Mediante estos grupos armados, proyectan su poder en la región y mantienen la presión sobre su archienemigo Israel, además de Estados Unidos.

Estos grupos han lanzado casi 170 ataques a fuerzas estadounidenses en Irak y Siria desde el inicio de la guerra en Gaza; la semana pasada murieron tres soldados estadounidenses y cinco combatientes kurdos aliados. Las fuerzas estadounidenses se encuentran en la zona para contener el grupo Estado Islámico, que todavía tiene presencia en los desiertos de Siria oriental e Irak occidental.