Países Bajos multa a Uber con $324 millones por transferir datos de conductores

La autoridad neerlandesa de protección de datos multó este lunes a Uber con $324 millones (290 millones de euros), por transferir a su sede en Estados Unidos los datos personales de conductores europeos sin la suficiente protección.

Las transferencias son una “violación seria” del reglamento general de protección de datos de la Unión Europea (RGPD), afirmó el regulador neerlandés.

“Uber no cumplió los requisitos del RGPD para garantizar el nivel de protección a los datos transferidos a Estados Unidos”, señaló en un comunicado el presidente del organismo, Aleid Wolfsen, considerando que “es muy grave”.

Según la autoridad neerlandesa, Uber recopiló información sensible de conductores europeos, incluido licencias de taxi, datos de localización, fotos, detalles de pago, documentos de identidad, “y en algunos casos incluso datos penales y médicos”.

Durante un periodo de dos años, la información se mandó a la sede de la compañía en Estados Unidos sin usar las herramientas adecuadas, criticó la agencia regulatoria.

“La protección de los datos personales no era suficiente”, denunció.

Uber informó que recurrirá la multa. “Esta viciada decisión y extraordinaria multa son totalmente injustificadas”, declaró un portavoz de la empresa en un comunicado.

“El proceso de transferencia transfronteriza de datos de Uber cumplió con el RGPD durante un periodo de 3 años de inmensa incertidumbre entre la UE y Estados Unidos. Apelaremos y confiamos en que prevalezca el sentido común”, afirmó.

Quejas de conductores franceses

En los últimos años, el bloque de 27 países europeos ha impuesto una serie de reglas para las grandes empresas tecnológicas. También ha infligido enormes multas por infracciones.

La agencia neerlandesa empezó a investigar el caso después de que más de 170 conductores franceses se quejaran a un grupo de derechos humanos, que interpuso una queja a la agencia de protección de datos de Francia.

Según el RGPD, una empresa que procesa datos en varios países de la UE debe tratar con la autoridad de protección de datos del lugar donde se encuentre su sede principal. La sede europea de Uber está en Países Bajos.

“En Europa, el RGPD protege los derechos fundamentales de las personas, exigiendo a las empresas y a los gobiernos que manejen los datos personales con el debido cuidado”, dijo Wolfsen.

“Pero, lamentablemente, esto no es una evidencia fuera de Europa”, añadió.

“Pensemos en los gobiernos que pueden intervenir datos a gran escala. Por eso las empresas suelen estar obligadas a tomar medidas adicionales si almacenan datos personales de europeos fuera de la UE”, prosiguió.

La multa de Uber es la tercera que impone la autoridad regulatoria neerlandesa a la empresa. Las anteriores, en 2018 y 2023, fueron respectivamente de $670,400 (600,000 euros) y $11.2 millones (10 millones de euros).

Nueva Zelanda reconoce a los conductores de Uber como empleados de la compañía

El Tribunal de Apelaciones de Nueva Zelanda reconoció este lunes a los conductores del servicio de transporte Uber como empleados de la compañía, según un fallo que puede tener ramificaciones en las relaciones laborales de la economía colaborativa del país oceánico.

Este fallo confirmó una decisión del Tribunal Laboral de Nueva Zelanda, emitida en octubre de 2022, en el que daba razón a cuatro conductores de Uber que buscaban su reconocimiento bajo las leyes neozelandesas para poder tener derecho a sueldos mínimos, bajas por enfermedad y fondos de jubilación, entre otros asuntos.

Uber apeló ese fallo en junio del año pasado, pero este lunes los magistrados del Tribunal de Apelaciones rechazaron el recurso legal de la compañía estadounidense y le ordenó a pagar las costas legales de los demandantes, según el fallo de 76 páginas publicado hoy en el portal judicial.

Una sala de tres jueces consideró que “la verdadera naturaleza de la relación entre los cuatro conductores y Uber era que los conductores eran empleados de la empresa Uber en los momentos en que estaban conectados a la aplicación Uber”.

“(Los conductores) no realizaban sus propios negocios independientes de servicios de transporte durante esos períodos”, subraya el fallo.

Por su lado, Uber aseguró que no modificará sus operaciones en Nueva Zelanda a consecuencia de la decisión y anunció que llevará el caso al Tribunal Superior, la máxima instancia judicial del país oceánico, publica el diario New Zealand Herald.

La empresa tiene unos 700 conductores en Nueva Zelanda, donde el gobierno del conservador Christopher Luxon revisa las leyes laborales para que potencialmente un contratista firme un acuerdo en el que se estipule explícitamente que no tiene plenos derechos como un empleado de plantilla, agregó el medio.