Yahoo Noticias Oyala, la futura capital africana creada desde cero en pocos años donde hablan español
Nacida para convertirse en capital de Guinea Ecuatorial y para dar respuesta a la ambición urbanística del dictador Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, Oyala –conocida también como Djibloho– es una ciudad creada desde cero que desde hace años centra las miradas de urbanistas y curiosos. Sus primeros pasos los dio en 2012 con las primeras obras y la idea de terminar su construcción con vistas a 2020, año actual y al que aún le quedan meses para finalizar.
Uno de los aspectos que más llama la atención de este proyecto llevado a cabo por el estudio portugués IPF - Ideias para o Futuro es lo monumental del mismo. Según contaba hace un tiempo la BBC en un reportaje sobre el mismo, esta ciudad nueva y en mitad de la una zona boscosa del país, pretende alojar entre sus instalaciones multitud de infraestructuras que incluyen un campo de golf, universidad, centro de convenciones y un hotel imponente de cinco estrellas que hace tiempo que está funcionando a pleno rendimiento.
Se trata del Grand Hotel Djibloho, en el que los líderes del país reciben a mandatarios extranjeros en encuentros oficiales, como puede leerse en la web oficial de Guinea Ecuatorial. El hotel se publicita como “su destino turístico definitivo” en dicho país y sus responsables, a través de su web, lo describen como “situado en el corazón del Bosque Ecuatorial. Rodeado por verdes colinas y el serpenteante río Wele, el hotel está situado en el corazón de Djibloho, la futura nueva capital administrativa de Guinea Ecuatorial, y a solo 20 km del nuevo aeropuerto de Mongomeyén”.
Cuenta con habitaciones amplias y lujosas, suites, pero también una villa al servicio de sus huéspedes más exclusivos. Su referencia a Djibloho a ‘futura nueva capital administrativa’ tiene que ver con el hecho de que, aunque esta ciudad se ha levantado con el objetivo de mover la capital a ella desde Malabo –el Gobierno ya se mudó hace tres años–, la segunda sigue siendo oficialmente la capital del país, como puede comprobarse en la información oficial y en la guía del país que el Ministerio de Exteriores español ofrece.
Oyala ha sido levantada cerca de la frontera con Gabón, en el distrito también nuevo de Djibloho, y su construcción ha levantado fuerte críticas desde el inicio del proyecto. En cuanto a su ubicación, las razones que se dieron en su momento fueron el clima y la facilidad de acceso a la zona desde las ciudades de Bata y Mongomo y con el mencionado aeropuerto de Mengomeyén a pocos kilómetros.
Pensada para abastecerse principalmente de energías renovables y a través de una central hidroeléctrica, uno de sus idiomas oficiales, como en el resto del país, es el español. Según datos publicados por diversos medios, más de 70% de la población habla este idioma debido al pasado de España como país que adquirió el territorio africano tras un tratado con Portugal en el siglo XVII. De ahí que esta nueva capital –cuando lo sea nombrada oficialmente- se vaya a convertir, como lo es ahora Malabo, en una capital con acento español en África.
Guinea Ecuatorial no logró la independencia de España hasta el 12 de octubre de 1968. La República Árabe Saharaui Democrática también tiene el español como idioma oficial, pero la complicada situación política de la nación saharaui y la falta de consenso internacional sobre su reconocimiento dota de cierto carácter de unicidad a Oyala en este sentido.
Más allá del idioma y de las infraestructuras, las estimaciones hechas sobre la población son de una capacidad final de entre 160.000 y 200.000 habitantes cuando la ciudad esté completa del todo. “Este proyecto pretende crear la primera capital mundial enteramente dependiente de energías renovables y sostenibles”, según el estudio luso encargado de la proyección.
Teodoro Obiang Nguema gobierna el país desde que en 1979 accediese al poder tras asesinar a su antecesor en el cargo, su tío Francisco Macías Nguema, como recordaban hace tiempo en La Vanguardia en un perfil sobre su figura. Guinea Ecuatorial, dependiente del petróleo desde los noventa, cuenta con uno de los mayores PIB per cápita, pero tambié con una población empobrecida obligada a vivir en un alto porcentaje con menos de un dólar al día.
