Nueva ola de Covid: las celebraciones de fin de año y los festejos por el Mundial, ¿pueden disparar los casos?

Los expertos insisten en mantener algunas medidas de cuidado para evitar los contagios
Los expertos insisten en mantener algunas medidas de cuidado para evitar los contagios

Desde finales de noviembre, los casos de Covid-19 en la Argentina no paran de aumentar. Y tanto los festejos masivos en todo el país tras haber ganado la Copa del Mundo como las reuniones para celebrar Navidad y Año Nuevo e incluso las vacaciones de verano plantean un nuevo interrogante: ¿pueden estos acontecimientos disparar los contagios?

Ayer, el Ministerio de Salud de La Nación informó que esta semana hubo 72.558 nuevos casos positivos en el país, lo que equivale a un 17% con respecto de los siete días anteriores, en los que hubo 61.903 casos positivos.

“La situación actual del Covid-19 en Argentina es que viene ascendiendo: tenemos 72.558 casos en la última semana, lo que da como resultado un promedio de 10.000 casos por día aproximadamente; es una cifra importante, comparado con los meses anteriores”, remarcó el infectólogo Eduardo López.

Por su parte, el epidemiólogo y docente universitario Hugo Pizzi señaló: “Las variantes que están circulando son muy contagiosas. Estamos en una elevación de casos y la prueba evidente se ve en los países vecinos: Chile, Brasil y Perú están muy comprometidos. El virus circula con una velocidad increíble”.

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En este sentido, advirtió que este verano va a ser complicado por el aumento de casos positivos. Al igual que Pizzi, López cree que es posible que este aumento de contagios esté vinculado, en parte, a las celebraciones de fin de año o a los recitales, que si bien se pueden hacer en lugares abiertos, las personas están una al lado de la otra, gritando, con lo cual incrementa la transmisibilidad del virus SARS-CoV-2.

¿En qué puede afectar el Mundial de Fútbol? “El mundial puede impactar para traer nuevos sublinajes de ómicron. Ya pasaron tres semanas del gran festejo y el aumento de casos ha sido de tipo moderado las últimas dos semanas. Yo diría que esto va a estar reflejado en los números en no más de un mes”.

Sin embargo, el infectólogo hizo hincapié en que este año el aumento será mucho más moderado por dos causas: “La primera, porque hoy tenemos la vacuna, el 50% de la población tiene las tres dosis, aproximadamente. En segundo lugar, porque hay un grupo de gente que ha estado enferma, son casi 10 millones los que han cursado la enfermedad. Estos son los datos que apuntan en este aspecto, por lo menos para prevenir las formas más graves, que son la hospitalización y el pasaje a terapia intensiva”.

En este sentido, el infectólogo Jorge Geffner dijo: “Luego de tres años de pandemia, imponer medidas restrictivas está fuera del calendario y es lógico que así sea, pero un único evento que se fundó de muchísimos festejos y contacto puede incrementar el número de infectados”.

No obstante, afirmó que lo que más alerta no son estos eventos aislados, sino que preocupa más cuando la gente viaja en hora pico con mala ventilación y sin barbijo.

Perro del Infierno

Desde el 11 de marzo de 2020, cuando se decretó la pandemia por el coronavirus, el virus fue mutando y generando nuevas subvariantes. Cada una de ellas presenta una sintomatología propia y diferente de las del resto, aunque, en líneas generales, todas tienen una serie de rasgos comunes. En este contexto, una de las cepas de Covid-19 que llama especialmente la atención de los especialistas en este momento es Perro del Infierno, un sublinaje de ómicron. Su nombre técnico es BQ. 1, una subvariante del BA. 5, que es la predominante en el mundo y en la Argentina.

“Los síntomas son similares a cualquier cuadro de Covid, lo único que comparado con otras cepas tiene un 10% mayor de transmisibilidad y tiene cuatro veces más chances de evadir el sistema inmune”, afirmó López.

Los datos actuales no indican que la variante sea más grave, pero hay algunos médicos que piensan que Perro del Infierno es un desprendimiento o mutación de la BA. 5 y actualmente existe una vacuna para este tipo: la vacuna bivalente, que tiene la cepa original, la Wuhan y una mezcla de BA. 4 y BA.5. “Hay médicos que consideran que esta vacuna va a tener una muy buena eficacia contra este nuevo peligro porque es una variante de un sublinaje que ya está incluida en la vacuna bivalente”, dijo López.

Consultado sobre si es más peligrosa que otros sublinajes, Geffner explicó: “Tiene una capacidad creciente para evadir la acción de los anticuerpos, tanto los generados en respuesta a una infección como aquellos en respuesta a lo que es la vacunación. En ese sentido, preocupa Perro del Infierno porque tiene una capacidad extraordinaria de evadir los anticuerpos”.

Sin embargo, aseguró que los síntomas son similares al de las otras cepas: síntomas respiratorios, tos, catarro, resfrío, dolor de cabeza, fiebre. “Es más contagiosa que otros linajes de ómicron y esto refuerza la necesidad de las vacunas”, remarcó.

Consejos de expertos

Hugo Pizzi recordó uno de los momentos más significativos de la pandemia: “La angustia que teníamos por la incertidumbre y la emoción cuando llegó el avión con las vacunas. Todos se olvidaron de eso, se nos vencieron dos partidas enormes. La indiferencia de la gente con respecto a la inoculación comenzó a notarse y es fundamental seguir actualizando nuestros esquemas para estar protegidos”.

Según indicó, para estos nuevos sublinajes es necesario tener como mínimo tres o cuatro dosis: “Argentina tiene solamente vacunada con tres dosis a alrededor del 50% de la población. En este aspecto es necesario aumentar la vacunación y también la cuarta dosis porque hay solamente un 15% o 16% de personas que están vacunadas con cuatro dosis”.

“Si nosotros estamos en este porcentaje de vacunación aún, evadiendo el sistema inmune como ocurre, vamos a tener más casos positivos y más casos de hospitalizaciones, especialmente de personas mayores a 50 años o pacientes con factores de riesgo”, advierte.

Por su parte, Eduardo López insistió en la utilización de barbijo: “Sigue siendo un elemento fundamental, ya que evita entre un 50% y un 70% el riesgo de contagio. Especialmente en lugares cerrados, en espacios mal ventilados, transporte público, espectáculos que se realicen en ambientes cerrados o en ambientes al aire libre, cuando uno está muy cerca del otro, por varias horas, como ocurre en los recitales”. Y no solo eso: todos los infectólogos consultados insisten en la importancia del lavado de manos.