Noruega empieza a almacenar grano y señala a la pandemia, la guerra y el cambio climático

COPENHAGUE, Dinamarca (AP) — El gobierno noruego firmó el martes un acuerdo para empezar a almacenar grano, y señalo que la pandemia del COVID-19, una guerra en Europa y el cambio climático lo habían hecho necesario.

El ministro de Agricultura y Alimentación, Geori Pollestad, firmó el acuerdo con cuatro compañías privadas para almacenar 30.000 toneladas de grano. El trigo, que pertenecerá al gobierno noruego, se guardará en instalaciones de las empresas en puntos de todo el país.

“La formación de un stock de contingencia de grano alimentario trata de estar preparado para lo impensable”, indicó en un comunicado el Ministerio noruego de Agricultura y Alimentación.

Noruega seguirá firmando acuerdos para almacenar reservas en los próximos años para ir aumentando las existencias hasta 2029. El objetivo es tener unas 82.500 toneladas de grano almacenadas para el final de la década “para que entonces tengamos suficiente grano para el consumo de tres meses de la población noruega en una situación de crisis que pueda producirse”, indicó Pollestad a la emisora noruega NRK.

En el primer trimestre de este año, Noruega tenía 5,6 millones de habitantes.

La nación escandinava dijo el año pasado que dedicaría 63 millones coronas (6 millones de dólares) al año para almacenar grano.

Noruega almacenó grano en la década de 1950, pero cerró sus almacenes en 2003 tras decidir que ya no eran necesarios.

Sin embargo, tras la invasión rusa de Ucrania en 2022, Noruega formó una comisión para evaluar las fortalezas y debilidades de su preparación ante emergencias, que recomendó almacenar productos de grano.

El país petrolero, que ha apoyado a Ucrania, también acoge el Banco Mundial de Semillas en el archipiélago de Svalbard, a unos 1.300 kilómetros (800 millas) del Polo Norte.

Desde 2008, bancos genéticos y organizaciones de todo el mundo han depositado cerca de un millón de muestras de semillas en el banco para respaldar sus propias colecciones en caso de desastres provocados por la naturaleza o el ser humano.

El gobierno noruego financió el coste de la construcción, mientras que una organización internacional sin fines de lucro paga los costes operativos.