No te metas con los cuervos, las aves más inteligentes del mundo

El ingenio de estas aves ha sido equiparado al de los humanos porque son capaces de anticipar los problemas, resolverlos y actuar en consecuencia

El cuervo es capaz de recordar las caras de las personas que consideran peligrosas (Foto:Getty)
El cuervo es capaz de recordar las caras de las personas que consideran peligrosas (Foto:Getty)

El cuervo, esa ave negra de gran pico que casi siempre se asocia a historias de misterio, es uno de los animales más inteligentes del mundo, capaz de planificar, resolver problemas e incluso mentir. Es un pájaro al que hay que respetar y tratar como alguien que puede entender lo que haces, porque probablemente así es.

La escritora naturalista canadiense Candace Savage que ha publicado sus estudios sobre los cuervos asegura que estas aves carroñeras tienen una inteligencia similar a la de los humanos.

Tal vez por eso, estos pájaros son parte de múltiples leyendas, y han sido personajes relevantes en cuentos, poemas y películas, desde Los siete cuervos de los hermanos Grimm, pasando por el poema que le dio fama a Edgar Alan Poe, El cuervo, hasta los que participaron en el largometraje de Alfred Hitchcock, Los Pájaros.

Los diferentes experimentos y estudios que se han practicado sobre los cuervos dan cuenta de que tienen conductas que se pensaban propias de los humanos y muchas acciones parecidas a las de los simios.

Sin embargo, el hallazgo de conductas similares a la de los humanos en algunos animales como los simios o los cuervos, han llevado a los científicos a cuestionarse el concepto de inteligencia, pues la capacidad para hacerse la vida más fácil existe en muchas especies y de formas que consideraríamos geniales.

Además, de acuerdo con los científicos, así como el ser humano evoluciona en formas de entender el mundo y es afectado por la naturaleza, así mismo sucede con los animales, que avanzan como especies influenciados por las personas.

Muchos cuervos saben decir palabras, saben contar, reconocen lugares, sonidos y transar con diferentes formas de pago. Lo que no se sabe es qué tanto copiaron y qué tanto es parte de su naturaleza.

Cada vez que el hada Maléfica tenía que adelantarse en la resolución de un problema, hablaba con su cuervo y lo enviaba a echar un vistazo para ver a lo que se iba a enfrentar. Era su mascota, su servidor y su amigo.

La neurobióloga de la Universidad de Tübingen en Alemania, Diana Liao, dice que "es interesante observar cómo cerebros muy diferentes generan comportamientos similares". La especialista no lo dice en referencia a la película Maléfica y su amigo alado, sino a los resultados de una reciente investigación que lideró y en la que pudo comprobar que los cuervos tienen la capacidad de contar y emitir sonidos que diferencias unos números de otros.

En la investigación, que fue publicada en la revista Science en mayo pasado, se descubrió que los cuervos pueden controlar sus graznidos, agregando o quitando sonidos, para comunicar cantidades específicas.

Los científicos observaron que los cuervos tienen comportamientos muy similares a los de los niños pequeños que aprenden a contar por primera vez.

La Sociedad Nacional Audubon de Estados Unidos, organización que desde hace casi 120 años se ocupa de la conservación de aves, divulga este nuevo estudio sobre la inteligencia de los cuervos y señala que esta habilidad de contar se suma a otras ya conocidas como la fabricación de herramientas y el razonamiento a través de analogías.

Audubon cita la reacción a este estudio por parte John Marzluff, profesor emérito de ciencias de la vida silvestre de la Universidad de Washington, que dijo sentirse impresionado por el hecho de que los cuervos se tardaron más en iniciar procesos más complejos lo que refleja que se detuvieron a ordenar sus pensamientos como los humanos.

Estas aves también reconocen a quienes los respetan (Foto:Getty)
Estas aves también reconocen a quienes los respetan (Foto:Getty)

"Parece que los cuervos hacen lo mismo, lo cual es muy intrigante", dijo y agregó que la habilidad de contar puede ayudar a los cuervos a realizar un seguimiento de sus huevos y, lo que es más interesante, darles poder para calcular si la recompensa de un esfuerzo de búsqueda de alimento valió la pena.

Marzluff ha ofrecido conferencias acerca de la sorprendente conducta de los cuervos como por ejemplo tomarse el trabajo de doblar un cable y convertirlo en un gancho para poder extraer un recipiente con gusanos de un largo cilindro. Es decir, son capaces de valerse de herramientas y de modificarlas si es necesario para cumplir con el objetivo.

Este fue el caso de un ejemplar femenino de Nueva Caledonia en Oceanía, donde estas aves son particularmente grandes e inteligentes.

Otro caso que menciona Marzluff es el de Rusia donde varios cuervos fueron grabados casualmente mientras se deslizaban por la nieve acumulada en un techo, una y otra vez, interactuando entre ellos. El experto concluye que el único fin de este comportamiento es, al igual que los humanos, "pasarla bien" y "liberar endorfinas".

También cuenta que estas aves pueden ser "delincuentes" y que se les ha visto pillando bebidas alcohólicas que han dejado en la calle, así como cigarrillos, robando objetos, y parecen disfrutar haciéndolo.

En este punto, resulta muy pertinente recordar el caso de la niña de Seattle, Gabi Mann, que cuando tenía cuatro años se le cayó un pedazo de pollo cuando se bajaba del vehículo familiar y de inmediato llegó un cuervo a recogerlo.

Más tarde llegaron otros cuervos a esperar por más comida y entonces la pequeña, voluntariamente, se propuso alimentar a estas aves de forma rutinaria con el apoyo del resto de la familia. Pero, lo que no se esperaba Gabi es que estos animales, agradecidos, le pagarían la generosidad.

Cuando los cuervos vieron que esta familia se tomaba la molestia de alimentarlos a diario, empezaron a llevarles regalos como un tornillo, una piedra pulida, un zarcillo, o una pieza de lego.

Marzluff, citado por BBC, también comentó este caso y concluyó que "definitivamente existe una comunicación de doble vía", que hace que humanos y aves entiendan "las señales" de unos y otros.

No obstante, el especialista aclara que no todos los que alimentan a los cuervos reciben premios y que esto solo sucede cuando se establecen relaciones muy personales.

A principios de este siglo, Marzluff lideró un estudio en el que comprobó que los cuervos pueden reconocer rostros humanos, y en especial demostró que estas aves son capaces de recordar las caras de las personas que consideran peligrosas.

Para este estudio los investigadores se pusieron máscaras de goma con caras de, por ejemplo, el hombre de las cavernas, y atraparon a varios cuervos para después liberarlos.

Los cuervos analizados en esa investigación fueron los atrapados y también los que vieron a los "secuestradores".

Entonces, todas las aves analizadas regañaron con graznidos repetidos acompañados con movimientos de alas y colas a los que consideraban enemigos. Asimismo, algunos cuervos acosaron a los investigadores “peligrosos” y les cayeron directamente en picado para atacarlos.

Pero la situación no terminó allí. El estudio se extendió por cinco años y con el paso de esos años más y más cuervos se enteraron de quiénes eran los humanos peligrosos sin necesidad de recibir recordatorios. El mismo Marzluff contó a ABC que un año después de iniciada la investigación volvió a salir con la máscara y de inmediato fue “regañado”.

Por eso, meterse con los cuervos no es nada recomendable.

Les han llamado pandilleros, pero la razón para que los cuervos jóvenes se llamen a través de graznidos y se unan formando bandas o pandillas, se debe a que de esta manera logran apoderarse de algún cadáver o comida que no quieren tener que disputar con otras aves carroñeras.

Los adultos van en pareja y los jóvenes en pandillas (Foto:Getty)
Los adultos van en pareja y los jóvenes en pandillas (Foto:Getty)

Pero, en este proceso, afloran sus habilidades para engañar a otros competidores y delatan su inteligencia y su capacidad para mentir.

La escritora Candace Savage dice en su libro Cuervos: encuentros con los sabelotodos del mundo aviario, que estas aves tienen la habilidad de manipular las interacciones sociales y no solo habla de esa formación de grupos para comer más y mejor, sino también del comportamiento de los adultos, que prefieren alimentarse en pareja y en silencio para no despertar a los potenciales rivales.

También destaca la investigación que hizo el zoólogo suizo Thomas Bugnyar en la que demostró como un cuervo engañó a otro más dominante para que buscara comida en recipientes vacíos mientras el primero comía de los envases llenos.

"Este comportamiento cumple con la definición de engaño 'táctico' o intencional, y con ello el cuervo entra en un club exclusivo de mentirosos sociales que antes sólo incluía a los humanos y a nuestros parientes primates", dice un extracto del libro de Savage citado por National Geographic.

Entonces, sin lugar a dudas, los cuervos tienen una inteligencia especial y tal parece que son sensibles y tienen emociones.

Por eso no es casual que sean considerados "seres espirituales" por los nativos americanos que los consideran mensajeros entre los reinos que separan la vida de la muerte. Son el símbolo de la transformación. Son guías protectores.

Asimismo, es visto como el arquetipo del embaucador, el que se salta las normas sociales y de esta forma impulsa cambios y transformaciones.

Es, en cualquier caso, un ser que merece respeto por su inteligencia, astucia y su participación activa a lo largo de la historia de la humanidad o, al menos, la que los humanos han contado.

Fuentes: National Geographic, BBC, Science, ABC, The Royal Society Publishing, National Center for Biotechnology Information

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VIDEO

Cuevo le roba pelo a un pony para su nido