Niño muere luego que farmacia le prescribió dosis 1000 veces mayor de un medicamento
Jake Steinbrecher era un vibrante niño de 8 años, a quien le encantaba bailar.
También había sido diagnosticado con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (AHDH, por sus siglas en inglés) y durante tres años había tomado la medicina Clonidine.
Jake Steinbrecher y su madre Caroline. Foto tomada de Facebook.
Sin embargo, en octubre pasado el pequeño tuvo una severa reacción al medicamento, que condujo a su hospitalización.
Los médicos del hospital en Colorado examinaron la cantidad de Clondine en el cuerpo de Jake y los resultados que encontraron fueron alarmantes. El niño había recibido 30 mg del fármaco en lugar de los 0.03mg prescritos – o sea, 1000 veces más la cantidad indicada.
“No fue un error. Fue suceso centinela”, dijo Caroline Steinbrecher, la madre de Jake, a ABC 7, refiriéndose por ese término al tipo de hecho inesperado, no relacionado con la historia natural de la enfermedad, lesión física, o psicológica grave, y que causa daño permanente o muerte al paciente.
Jake se recuperó de la sobredosis y volvió a su vida normal, pero su sistema autoinmune resultó dañado por la sobredosis del medicamento.
En junio fue hospitalizado de nuevo y falleció el día 8.
Ahora la familia está demandando a la farmacia Good Day Pharmacy de Colorado, y asegura que la empleada que administró la dosis errada sigue trabajando regularmente.
“La familia está claramente devastada por la pérdida, y al mismo tiempo se da cuenta de que no pueden revertir el tiempo para traerlo de vuelta, pero quieren hacer tomar conciencia de los efectos devastadores de los errores farmacéuticos. Los padres de Jake, aunque están en duelo por la pérdida de su hijo, están preocupados por otros niños y familias de la comunidad”, indicó una declaración de la familia divulgada por la madre en su página de Facebook.
La mujer quiere que se establezca una mayor supervisión y regulaciones sobre las dosis de medicamentos administradas en las farmacias.
"La gente confía en los médicos y en los farmacéuticos para que hagan lo correcto por ellos y para proteger a sus hijos, pero todos estos son sólo seres humanos y la gente comete errores y es ahí donde tiene que haber más protección”, dijo la madre.