Más muros, más tropas, y recibir a los mejores: Thomas L. Friedman

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 16 (EL UNIVERSAL).- Thomas L. Friedman, columnista de "The New York Times", publicó este martes un artículo centrado en el tema migratorio, donde critica las políticas de Donald Trump, pero también las de Joe Biden, y propone "más muros, más tropas" y una estrategia enfocada en recibir "solo a los mejores".

"En mi opinión, el presidente Biden debería superar a Trump. Haga todo lo posible para asegurar la frontera como nunca antes: más muros, más cercas, más barreras, más tropas, la 82.a Aerotransportada, lo que sea necesario. Hacer que los demócratas sean dueños de la seguridad fronteriza. Pero no con el propósito de asfixiar la inmigración: con el propósito de expandirla. Es buena política", señala Friedman en la columna, publicada en el citado medio bajo el título: "Es hora de que Biden supere a Trump en materia migratoria".

Friedman, tres veces ganador del Pulitzer, alega que "si vamos a prosperar en el siglo XXI y competir efectivamente con China, debemos duplicar nuestra mayor ventaja competitiva: nuestra capacidad para atraer a los inmigrantes con mayores aspiraciones y a los que tienen el IQ más alto, a los que toman riesgos, a los que empiezan nuevos negocios".

Según él, "Dios distribuyó cerebros por igual en todo el planeta. Lo que no distribuyó equitativamente fue qué países darían la bienvenida a los inmigrantes con mayor energía y mayor intelecto. Ha sido durante mucho tiempo nuestra singular ventaja competitiva, ser el número 1 en esta categoría. Si desechamos esa ventaja, como país volveremos a la media global".

El cambio climático, la sobrepoblación, la fractura de países, insiste, está provocando una "derrama de migrantes que quieren dejar su Mundo del Desorden y venir al Mundo del Orden. Eso somos nosotros y la Unión Europea, entre otros".

El columnista advierte que "si más y más Estados-nación se fracturan y dejan a sus ciudadanos a merced de los señores de la guerra y los líderes de pandillas, la mitad del mundo podrá potencialmente buscar asilo político en Estados Unidos".

Bajo esas circunstancias, dice, "necesitamos una discusión racional en este país sobre cómo mantenemos un refugio seguro para los verdaderamente perseguidos y atraemos a los inmigrantes que necesitamos para prosperar en el siglo XXI, tanto los inmigrantes de alta energía y poco calificados como los que toman riesgos con un alto coeficiente intelectual, y garantizar que el flujo de inmigrantes a Estados Unidos se produzca a un ritmo acorde con nuestras necesidades económicas y nuestra capacidad para asimilar cultural y socialmente a esos inmigrantes".