Mundial de Qatar 2022: Marruecos, el reino en África que hace una semana protestaba contra la inflación y hoy festeja el pase a la semifinal

Los marroquíes celebran en Rabat la clasificación a semifinales
Los marroquíes celebran en Rabat la clasificación a semifinales - Créditos: @Mosa'ab Elshamy

RABAT.- Una semana después de masivas protestas por la situación económica y política del país, los exultantes marroquíes llenaron este sábado las calles de su capital y ciudades del país norteafricano, ondeando banderas, tocando bocinas y encendiendo bengalas para celebrar la histórica victoria de la selección nacional de fútbol sobre Portugal en la Copa del Mundo.

Marruecos venció a los portugueses 1-0 en Qatar, eliminando a Cristiano Ronaldo del torneo y convirtiendo a los Leones del Atlas en el primer equipo africano y de mayoría árabe en llegar a las semifinales del Mundial.

Festejos en las calles de Casablanca luego del pase de Marruecos a semifinales.
Festejos en las calles de Casablanca luego del pase de Marruecos a semifinales.

La capital, Rabat, rebosaba de alegría mientras los hinchas marroquíes también celebraban en las calles de Doha y en ciudades de toda Europa, donde hay muchos marroquíes emigrantes. También otros fanáticos de Medio Oriente y África que adoptaron a los Leones de Atlas como su equipo favorito también se mostraban felices.

“Estábamos tan estresados como si estuviéramos en el campo con los jugadores, pero ahora queremos el trofeo”, dijo Mohamed Amine, quien estaba celebrando en Rabat. “Los jugadores, este equipo, elevó la reputación de Marruecos entre las naciones del mundo”.

“Estoy tan feliz que ni siquiera sé si puedo expresarme, pero si estamos aquí ahora, creo que podemos llegar a la final”, dijo Yasmine Benmehredj durante las celebraciones en la capital marroquí. “Creo que podemos ganar esta Copa del Mundo”.

Protestas en todo el país

Pero el Mundial apenas logra disimular las protestas que hubo la semana pasada contra el alza de precios y la situación política.

Los manifestantes participan el domingo pasado en una marcha convocada por la coalición del Frente Social Marroquí (FSM) para protestar por el costo de vida y la represión
Los manifestantes participan el domingo pasado en una marcha convocada por la coalición del Frente Social Marroquí (FSM) para protestar por el costo de vida y la represión

Miles de manifestantes marcharon el domingo pasado en la capital de Marruecos, Rabat, para denunciar el “alto costo de la vida y la represión”, en medio de la creciente inflación y descontento social.

“El pueblo quiere precios más bajos... El pueblo quiere eliminar el despotismo y la corrupción”, gritó la multitud, que los periodistas estimaron en unas 3000 personas, la manifestación más grande de este tipo en los últimos meses.

“Vinimos a protestar contra un gobierno que representa la unión del dinero y el poder”, dijo Younes Ferachine, coordinador del grupo de partidos políticos y sindicatos de izquierda Frente Social Marroquí (FSM) que organizó la manifestación.

La marcha convergió desde diferentes ciudades de Marruecos en una protesta que también fue convocada para denunciar los casos de varios blogueros y periodistas encarcelados.

El rey Mohammed VI de Marruecos.
El rey Mohammed VI de Marruecos. - Créditos: @Carlos Alvarez

Golpeados por el impacto económico de la pandemia de Covid-19 y la inflación, los niveles de pobreza retrocedieron a la situación de 2014, dijo la Alta Comisión de Planificación del gobierno en un informe reciente.

La inflación de los precios al consumidor fue del 7,1% interanual en octubre, debido en gran parte al aumento de los precios de los alimentos, es causada en parte por una intensa sequía que ha afectado a los agricultores.

Ante las recientes protestas, el primer ministro Aziz Akhannouch impulsó últimamente la ampliación de la cobertura médica, con más de 10 millones de marroquíes de bajos ingresos inscritos en las últimas semanas.

Un año de gobierno

El rey de Marruecos, Mohammed VI, nombró en octubre del año pasado al nuevo gobierno, encabezado por el empresario Akhannouch, jefe de la Agrupación Nacional de Independientes (RNI), el partido liberal que ganó las elecciones legislativas de septiembre.

Akhannouch, considerado un hombre de confianza del Palacio Real y una de las mayores fortunas de Marruecos que, según la revista Forbes, alcanzaría los 2000 millones de dólares, arrasó en las legislativas, con 102 de los 395 escaños, y desalojó a los islamistas que llevaban una década en el poder.

El primer ministro de Marruecos, Aziz Akhannouch
El primer ministro de Marruecos, Aziz Akhannouch - Créditos: @Pool

Esta semana el triunfo contra España tuvo un doble significado ya que los marroquíes son, por lejos, el principal grupo de inmigrantes en la vecina España.

La población extranjera residente en España a enero de 2022 ascendía a 5,42 millones de personas. De ellas, más de 776.000 eran de origen marroquí, siendo así el colectivo de inmigrantes más numeroso en el país mediterráneo. La segunda posición del ranking era para otro de los países clásicos ya en esta lista, Rumania, con 658.000 inmigrantes.

Sáhara Occidental

En el frente internacional, además, la principal causa de Marruecos es de la autonomía para el Sáhara Occidental.

El mes pasado, en una reunión con el secretario general de la ONU, Mohamed VI “reafirmó la posición constante de Marruecos para solucionar este diferendo regional en la base de la ‘iniciativa de autonomía’ y en el marco de la soberanía y de la integridad territorial del reino”, según un comunicado del palacio real.

Desde hace 40 años, Marruecos y los independentistas saharauis del Frente Polisario, respaldados por Argelia, se enfrentan por la soberanía de esta antigua colonia española, de unos 266.000 kilómetros cuadrados situado en el norte de África, en el extremo occidental del desierto de Sahara y a orillas del océano Atlántico.

Marruecos, que controla un 80% del territorio, propone un plan de autonomía bajo su soberanía, pero el Polisario reclama un referéndum de autodeterminación auspiciado por la ONU.

Esta votación estaba prevista en las condiciones de un alto el fuego firmado en 1991, pero nunca se llegó a celebrar. En noviembre de 2020, el alto el fuego saltó por los aires.

Agencia AFP