Mundial Qatar 2022: Kylian Mbappé, el ídolo de Francia que expulsó los demonios del campeón
El Francia 2 vs. Dinamarca 1 del grupo D del Mundial Qatar 2022, que incluyó dos goles de Kylian Mbappé, necesita una recopilación. Una rebobinado, una historia que le dé contexto.
En Corea del Sur-Japón 2002, Francia era el máximo candidato a ser el campeón del mundo, y tenía virtudes como para defender su cetro. Además del Mundial en el que fue local, se había quedado con la Eurocopa 2000 y la Confederaciones 2001. Mantenía la base del plantel coronado; Thierry Henry, Zinedine Zidane, Patrick Vieira y David Trezeguet llegaban en sus mejores momentos, y salir adelante en el grupo que compartía con Senegal, Uruguay y Dinamarca parecía más que accesible. Pero para sorpresa del mundo, les Bleus sumaron apenas un punto y completaron un pobre paso por el Mundial, despidiéndose en la primera etapa.
Llamativamente, ese destino se repitió en todos los seleccionados europeos que se consagraron desde entonces. Italia, rey de Alemania 2006, no alcanzó los octavos de final en Sudáfrica 2010, por una humillante campaña frente a Paraguay, Nueva Zelanda y Eslovaquia. La defensa de España en Brasil 2014 apenas duró dos partidos; las derrotas contra Países Bajos y Chile lo dejaron sin posibilidades. Y luego, en Rusia 2018, Alemania no superó un grupo que contenía a México, Suecia y Corea del Sur. Tuvo que llegar Francia, iniciador del “maleficio”, para romper la racha negativa en el Qatar 2022. O bien, tuvo que llegar Kylian Mbappé.
Rusia 2018 ya había sido un torneo de brillar para el delantero de Paris Saint-Germain. Con tan sólo 19 años se había despachado con cuatro goles, incluido un bombazo desde fuera del área en la final, contra Croacia. Ganó la Copa del Mundo cuando su carrera estaba en su infancia, pero Qatar 2022 estaba perfilado como para ser “su” Mundial, el certamen en el que fuera el líder futbolístico. En el debut, ante Australia, había dado los primeros indicios; Kiki estuvo muy participativo en la gestación de los ataques y sumó una asistencia y un gol. La prueba, no obstante, iba a ser el duelo con Dinamarca. Y Mbappé, como lo hizo siempre en su corta carrera, tomó la oportunidad con ambas manos.
Francia salió a no tener necesariamente el control de la posesión, pero sí decidido a aprovechar cada momento en que la tuviera para crear peligro, y Kylian tomó la posta desde la izquierda. Sus ataques al espacio y su habilidad para la gambeta volvieron locos a Joachim Andersen y Andreas Christensen, los imponentes defensores centrales daneses, a tal punto que este último, jugador de Barcelona, lo tackleó para evitar que se fuera al gol en una jugada. Y fue así cómo el equipo dirigido por Didier Deschamps encontró la ventaja: Mbappé entró en el área, jugó una gran pared con el implacable Theo Hernández y definió casi con la inercia de su carrera frente a la salida de Kasper Schmeichel.
Aun en su mejor momento, Francia sufrió un fuerte golpe con el empate del propio Christensen. Pero eso no detuvo a Mbappé, que siguió pidiendo la pelota, atacando al espacio y produciendo grandes acciones con su dominio y su explosividad. ¿Quién otro que él para otorgarle el triunfo y la clasificación para los octavos de final a Les Bleus? Aun si la definición, tras bajar un centro de un brillante Antoine Griezmann con un muslo, no fue sobresaliente, la maniobra habla favorablemente de su posicionamiento, su perseverancia y su confianza en sí mismo. Con todo eso contó Francia para convertirse en el primer seleccionado en asegurarse estar en los playoffs de esta Copa del Mundo.
Su doblete contribuye a cifras impactantes: 15 goles en sus últimos 12 cotejos en la selección, y ya 31 en el historial del equipo. Mbappé ya superó a leyendas, como Just Fontaine (el máximo goleador en un único mundial, con 13 en Suecia 1958) y Jean-Pierre Papin. Por la Copa del Mundo, Kiki acumula 7 tantos en 9 encuentros, igualando a otra estrella, Luis Suárez (14 partidos), y por encima de Thierry Henry, Mario Kempes, Dennis Bergkamp y Neymar, entre muchos otros. Ilustre compañía.
Compacto de Francia 2 vs. Dinamarca 1
Con semejante inicio en Qatar, ahora llama la atención que Francia sembrara una infinidad de dudas antes del torneo. Más allá de su zona a priori poco exigente que le deparó el sorteo, sufrió una seguidilla de lesiones de jugadores importantes, como Karim Benzema, Paul Pogba y N’Golo Kanté, más Mike Maignan y Lucas Hernández (este último, después del estreno, ya sin posibilidades de ser reemplazado). E incluso con alguna controversia desde fuera, como el creciente rumor de que el seleccionador será reemplazado por Zinédine Zidane el próximo año, más algunos cruces en el vestuario y una insólita situación alrededor de Pogba y sus hermanos, que incluye brujería y extorsión. Aun así, Mbappé, Griezmann y otros destacados intérpretes, como Ousmane Dembelé y Aurélien Tchouaméni, lograron enfocarse en el fútbol, y los resultados están a la vista.
Un adjetivo caracteriza a Mbappé: “insaciable”. Poco después de marcar los dos goles del triunfo de Francia, recibió un pelotazo y, pecando de egoísta, intentó rematar como venía; no estaba conforme con lo mostrado hasta entonces. En la temporada 2021/22 era el máximo goleador, asistidor y estrella de un PSG que compartía con Lionel Messi y Neymar, pero quería ser también el mejor pago y jugar del modo que más favorece a su fútbol. En cada paso, el tiempo terminó dándole la razón. Si hay una marca o un factor que frena a Kylian Mbappé, él, con inercia y velocidad, va a intentar atravesarlo. Y también con confianza plena en que va a conseguirlo.