Yahoo Noticias ¿Por qué todavía las mujeres en América Latina tienen menos acceso a la tecnología?
La brecha digital de género se asocia, entre otras cosas, con prejuicios culturales y estereotipos de género sobre el uso de las tecnologías.
Este artículo fue producido por la Oficina Regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe en exclusiva para Yahoo en Español.
Cuando se habla de la brecha digital de género solemos pensar en la diferencia de acceso que tienen hombres y mujeres a las tecnologías de información y comunicación (TICs), tanto en términos de dispositivos como de recursos para pagar los costos de conexión.
Pero la brecha digital de género va mucho más allá. Tiene que ver, por ejemplo, con una menor disponibilidad de oportunidades de formación en herramientas digitales. O con prejuicios culturales y estereotipos de género sobre el uso de las tecnologías.
Tiene que ver también con la falta de oportunidades de educación y empleo en las áreas de Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (CTIM), o en las dificultades que encuentran las mujeres en esos campos para acceder a posiciones de poder y decisión.
La brecha digital de género también puede ser social y geográfica, pues de las 244 millones de personas en América Latina que no tienen acceso a internet, la mayoría son mujeres indígenas, rurales, mayores, migrantes, refugiadas y viviendo con discapacidad.
También existen sesgos en los sistemas educativos, en los que se estimula que niñas y jóvenes se inclinen más por carreras de servicios y cuidados (educación, enfermería, comercio) y los varones por las carreras técnicas.
La persistencia de estos prejuicios y patrones culturales inciden también en el diseño de las nuevas herramientas tecnológicas. La permanente presencia de sesgos de género en algunos chats de inteligencia artificial son un claro ejemplo de esto.
Finalmente, la violencia contra las mujeres en la vida real se reproduce en el mundo digital. Especialmente contra las mujeres con visibilidad pública, como periodistas y dirigentes políticas. La brecha digital de género se manifiesta también en esa violencia.
Como ves, la brecha digital abarca muchos aspectos y contribuye a perpetuar otras brechas de género, como las salariales, las sociales y las laborales. Una transformación digital que no incluya a las mujeres es una transformación incompleta.
Por eso es fundamental que gobiernos, organismos internacionales y el sector privado trabajen en promover políticas que contribuyan a superarla, de manera que las mujeres puedan aprovechar todo el potencial que ofrecen las nuevas tecnologías.
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