Las muertes por ataques de tiburones se duplicaron en un año

Un 40% de los ataques de 2023 ocurrieron en Australia.
Un 40% de los ataques de 2023 ocurrieron en Australia. - Créditos: @Stephen Frink

Un estudio de la Universidad de Florida reveló que las muertes provocadas por ataques de tiburón se duplicaron durante 2023. Aunque el índice no es alto (se registraron diez ataques fatales a nivel mundial), el número implica una señal de alerta con respecto a los cinco que se habían notificado el año anterior. Históricamente, la tasa de mortalidad por esta causal era mucho más alta, pero la mejora en accesibilidad de los servicios de emergencia y los tratamientos habían logrado reducir esta cifra que ahora volvió a subir.

Según el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones elaborado por un equipo de investigadores, el estudio publicado por la casa de estudios de Florida se centró específicamente en las mordeduras que ocurrieron “sin provocación”, es decir en el hábitat natural de este tipo de peces cartilaginosos. Los resultados mostraron que este tipo de ataques fueron más comunes entre surfistas que entre nadadores, llevándose un 42% del total. Por otro lado, la pesca submarina fue la actividad más común, que, a su vez, tuvo 22 ataques que se consideraron “provocados”.

El director de investigación de tiburones del Museo de Historia Natural de Florida, Gavin Naylor, aseguró que el número de ataques era consistente con las tendencias a largo plazo, pero que “el número de muertes es un poco desconcertante este año”.

Durante 2022, hubo solo cinco muertes por ataques de tiburones.
Durante 2022, hubo solo cinco muertes por ataques de tiburones. - Créditos: @ ShaneMyersPhoto

Otro dato aportado por la investigación que llama la atención de los especialistas es que cuatro de las diez muertes que ocurrieron en 2023 tuvieron lugar en Australia. Tres de ellas fueron frente a la península de Eyre, en el sur del país, una zona remota con una gran población de tiburones blancos y las focas de las que se alimentan. El otro caso fue en el río Swan, en Australia Occidental. Las otras muertes ocurrieron en las Bahamas, Egipto, México, Nueva Caledonia y dos casos en Estados Unidos.

Según el estudio, las áreas aisladas conllevan un mayor riesgo de muertes, ya que es donde los tiburones se acercan para obtener su alimento. “Las focas son muy ágiles, por lo que las únicas que quedan atrapadas son las que se dejan caer en la superficie... y así es como se ve un surfista”, explicó Naylor.

Anteriormente, el aumento en la densidad de población estaba relacionada con los ataques de tiburones, ya que al nadar o surfear en áreas más pobladas se reducía considerablemente el contacto entre los humanos y los animales, y por ende, la probabilidad de muertes o incidentes. La seguridad de las playas de Australia es óptima en las playas más visitadas y patrulladas, pero las playas remotas y más alejadas del centro son peligrosas debido a su aislamiento.

Los tiburones suelen atacar en zonas aisladas.
Los tiburones suelen atacar en zonas aisladas. - Créditos: @ap-images

Sólo tres especies se reparten la mayoría de los ataques: el tiburón blanco (Carcharodon carcharias), el tiburón tigre (Galeocerdo cuvier) y el tiburón toro (Carcharhinus leucas). Sin embargo, según los investigadores, “casi cualquier tiburón grande, de aproximadamente dos metros, es una amenaza potencial para los humanos”.

Pese a que estos fenómenos no tienen grandes formas de ser evitados, el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones recomienda tres puntos esenciales para tener en cuenta: nadar cerca de la costa, no hacerlo al amanecer o al anochecer y evitar el exceso de chapoteo. Además, hay recomendaciones más pequeñas, como evitar aromas extraños en el protector solar y usar trajes de baño que no tengan colores llamativos.

Los tiburones en la Argentina

En la Argentina no son habituales este tipo de ataques, pese a que el Mar Argentino cuenta con 12 especies de grandes tiburones, presentes tanto en las costas, en mar abierto y en las profundidades. Según un relevamiento realizado por el Florida Museum, hay sólo cuatro casos de ataques de tiburones en la historia del país.

La Fundación Vida Silvestre indicó que en la Argentina existen regulaciones puntuales para proteger a estas especies. Estas normas buscan evitar la pesca de arrastre en aquellas zonas del mar que fueron definidas como “primordiales para el ciclo de vida de los tiburones”, así como establecer medidas y buenas prácticas para los casos de la pesca deportiva. Sin embargo, la falta de controles llevó a varias poblaciones al borde de la extinción.

El escalandrún es uno de los más populares del Mar Argentino, aunque en los últimos 40 años su población se redujo un 90%. Entre los principales factores que fomentan su lenta desaparición, están la pesca deportiva y comercial, y la destrucción del ecosistema en general.